ía dicho mi
onde no me llamaban por
un poco el rostro, notar aquella barba negra perfectam
a estaba peo
andr
r en el bordillo, aunque Alej
n! -Solté con la voz te
voz-. Piénsalo mejor. Piensa en tu familia, Rous
, si ves a una persona del otro lado del puente, observando el precipicio,
ver si había más personas, pero no era así, afortunadament
arandal y, así, con esa gran incomodidad, tuve que verlo al ro
fuerte en mi cintura, como si aún tuviera miedo de que yo me fuera a lanzar. Un pequeño mal movimiento,
o temblor en
o, sorpresa, de alguien
que quería salir corriendo de aquel vergonzoso
ado de la vida, donde el terreno era firme. Y, cuando pude dar pisada
lencio i
e silencio
nte cuando todo te sale mal y alguien
a? ¿Qué podr
eer que yo hace unos segundos estaba del otro lado del puente. Volvió a observarme, como si
anos que traía una bolsa negra, l
aferrarme a lo primero que encontrara par
ela de la bolsa- Yo... Bueno... La señora Clarena me pidió que... -in
realmente había pasado un s
Se me quedó -hice un intento rápido por sonr
mí con mucha impresión, su rostro er
to veraniego que soplaba en el puente. Tragué en seco y pude se
manos que apretaban la tela neg
decir con tono ab
puse-. Muchas gracias
rocesaba que había soltado mis manos del barandal y que, de no haber sido
cando que no me estuviera siguiendo o mirando. Al llegar, me senté en la banc
ra tanto porque Alejandro me acabara de ver a punto de quitarme la vida, era porque... Alejandro se
do me hacía falta tres años para graduarme de bachiller, creé mi proyecto de vida a cinco años en el cual inclu
lases, con notas casi perfectas; mientras mis compañeros sufrían por reprobar un ex
aba hablar mal de mí a mis espaldas, diciendo que era una presumida. Era por esa
s recuerdos que tengo son de haber hecho un pre-ICFES con el cual pude ganar un muy buen pu
abía pensar era en estudiar todo lo que pudie
acía sentir bien, era como si estuviera teniendo la recompensa de mi esfuerzo
puntaje podía ingresar hasta a la carrera de medicina. De hecho, antes de pasar mi solicitud para la carrera de licenciatura, varias personas cercanas a m
ntrolar mi vida. Y fue la primera vez que me sentí rebelde. Mi pequeña
eligió ser profesora de castellano.
or que maneja taxi"
ber sido doctora?" Me
ncia para enseñar?" Me
n la carrera que había elegido, por eso mismo, cuando ingresé a p
a completa por excelencia aca
in tener un sólo amigo: no tenía tiempo para hacer amistades. Además, me daba miedo socializar, mostrar mi verdadera personalidad y que t
de tres plantas con un bello jardín lleno de todo tipo de flores y fachada estilo colonial donde los niños corrían de un lado a o
que me sentí tan
ntro, teniendo mi propio salón de clases,
si aceptaban voluntariados o si podría hacer mis prácticas allí. Su r
ompañeros en el evento y la directora ya me había conocido por lo mismo. Así que, después de unos minutos de con
as cosas. Después, cuando ya tenía seis meses, la maestra Rosa se jubiló y, por mi buen desempeño, me entregaron aq
nerme por años en el puesto de profesora, hice un técnico de atención a la primera infancia c
abía, ella me lo había dicho, una vez que terminara el téc
rollo, ya me estaban hablando de formalizar mi trabajo, pero, debía esperar a que el nuevo coor
aba de ver a punto de lanzarme de un puente. Yo, la pr
orrido hacia el único objetivo que t
a de su parte. Lastimosamente no pude dormir y era lo que me pedía
con cariño esa noche, se
ue se estresan con facilidad y mostrarme tranquila, que nada sucedía. Aunque por d
bié con el uniforme de docente rosado del centro de desarrollo. Practiqué frente al espejo varios saludos
debía estar en el centro Rousseau a la una para organ
e sólo tuviéramos unos años de diferencia, porque siempre noté que ocuparía un puesto importante en el centro de des
re de mí, al verme a punto de lanzarme de un
e competencia para ocupar el cargo de profesor