mpostura-. Tú eres homosexual, a ti te gustan los hombres, y que te si
manera en que sus palabras parecían forzadas
uando lo besé en el bar, usted pudo haberse apartado de mí, incluso golpea
James tenía razón, pero admitirlo sería cruzar
n respecto
llena de determinación-. Porque siento que usted sí desea algo más allá de
ipiente de cristal que contenía la tarta de chocolate. Las palabr
eñor Dante -dijo James,
desafiante y a la vez vulnerable en su postura, como si
a se tuerce será mi elecció
uave música de fondo se volvieron lejanas, casi irreales. Sus pensamientos giraban en torno a la conversaci
el batido de chocolate abandonado en la mesa, sabía que su v
lerado, aunque no sabía si era por la velocidad o por la ansiedad de lo que pudiera encontrar al entrar. Introdujo la llave en la cerradura y, al abrir la p
ver a Vittorio allí. Caminó hacia su madre, qu
ombre aquí? - preg
a cínica, abriendo los brazos en u
a dar un abra
sonrisa irónica,
ajo y cínico de tu parte-respondió, sent
ndose con la misma comodidad de alg
uedes necesitar de mí -dijo con un
miró con
qué es lo
desvaneció, reemplazada po
ando ese bar de m
labio, luchando por
olvidaste? -resp
queó la lengu
ro como te gusta follar pu
s, sintiendo la ira a
gamento de drogas dos veces a la semana, y quiero que metas la m
de un salto, llen
al bar por tu cuenta y pregúntale tú mismo a Arón
dora. Se puso de pie lentamente, sacando un arma de su
o no -dijo con voz gélida-. T
e. Su respiración se volvió irregular, y sus ojos se llenaron de furia y
aré lo que pides, pero si le haces daño a mi madre, no
ntamente, satisfecho con
Sabía que entendería
su corazón se rompía un poco más. Había aceptado una tarea que podía costarle
hombre dirigiéndose a la salida junto a sus hombre
la amenaza latente en cada uno de sus músculos tensos. Su madre, Sofía, se acercó con cautela, abra
ebrada por el miedo y la culpa, apretándose contra James como s
brazos alrededor de ella, como
suavidad que reservaba solo para ella-. Este hijo de puta no se iba a det
ión. Se separó suavemente de su madre, mirándola a los ojos con una pr
con resolución-.
a besó en la frente antes de girarse hacia la puerta, sabiendo que cada pa
e el rugido del vehículo ahogara momentáneamente sus pensamientos. Las calles de la ciudad pasa
rcano, apagando el motor con un suspiro profundo. Al entrar, el olor a alcohol y humo lo envolvió, familiar y reconfortante
al acercarse, su
James se sentó frente a él sin esperar invitación, y se
ito tu
inero? - pregunt
es sobr
ataba de algo mucho más serio, dejó
re aquí para sacar información s
, procesando la info
er? -preguntó, man
tes, sus ojos brillan
er a mi madre a salvo. Vittorio no se detendrá hasta obtener lo que
e, comprendiendo la gr
no y siempre me ofrece productos de la mejor calidad. - dijo Arón buscando dentro de su libreta de notas el número del proveedor. Cuando lo encontró, arrancó la esquina de la agenda y le a
demasiado bueno con lo que haces y qui
l papel y le dijo, - intento mantenerte lejos de este nego
siempre terminaba envuelto en problemas y convertía su negocio en un rin de boxeo
o con su recado. James levantó la mano en señal de saludo para que el tipo supiera que él conocía de su presencia, luego agitando la mano le sacó el dedo del medio y l
ino, el mensaje que le había enviado a su padre correría como pólvora y con una posibilidad de que este se encontrara cerca. Dejó la
gar, de pie frente a él con una expresión imp
icho? -preguntó, su v
- dijo James demora
ibido, ¿q
oción, sacó el papel doblado
seguro-. Me ha dicho que ese es su pro
, estudiándolo breveme
ión así sin más? -du
respondió James, man
cerró los ojos
erse de ti. Solo sabes buscarle pro
vía dentro de él. Apretó los
nes aquí a tocarme las pelotas? Pudiste enviar a esos carroñ
anera irónica, sin p
redero, James, te guste o no, vas a estar al mando -
mpre la manipulación. No importaba cuánto intentara escapar, Vittorio siempr
éjame en paz -dijo James, dándole la espa
ó, resonando en el garaje-. Esto no es un j
alabras de su padre como un yugo sobre sus hombros. No resp