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organ, en Foggy B

ntras cantaba a todo pulmón, conocía ese hábito que ella tenía, muy bien, normalmente era provocado por la llegada de algún paquete o corresp

n mi casa, y que me encontraba especialmente algo tocada de salud, desde hacía dos días, una salida loca y desenfrenada de chicas, para celebrar que, sorprendentemente, nuestras

también me ocurría por las tardes. Morgan me había sugerido que fuera al médico, que eso no era normal, pero yo, como estábamos en época de exámenes globales, lo habí

ra, había un programa de intercambio de universidades que era becado, al que pocos estudia

os arquitectónicos, y técnicas de trabajo modernos y antiguos que ellas estaban estudiando, o que ya existía, y el último año que era el que más me ilusionaba, estudiaremos r

a, sabía que mi padre, aconsejado por la maldita bruja de Ruby, no me iba a dar el dinero para subvencionarme este programa como si les había pasado a algunos de mis compañeros, que, por sus calificaciones, y su estat

salón mientras ella desenvolvía un paquete que, por su apariencia, pequ

e, en el fondo, yo no lo lamentaba, como debía de ser lo lógico, prueba de ello era la camisa de hombre que, colgada sin lavar, de un perchero en el armario de mi

frute, por cierto, ¿sabes lo que me ha enviado mi tía?, algo que hará que cambies la car

y Dreams??"- le dije acercándome a ella, para comprobar si ese delicioso manjar,

n las zonas rurales de Nueva Zelanda, que la adoré de manera inmediata, así que cada vez que su tía enviaba jamón curado, yo prácticamente me apropiaba de él, intercambiándolo por la ropa destrozada de lujo,

eformó, y que yo reparé, en ese paquete que te llegó hace dos meses."- me dijo

Todo iba bien, el café estaba recién hecho, el pan se calentaba en la tostadora, el huevo lo acaba de freír con poco aceite en la sartén, justo como a mí me gus

n, el olor se volvió tan intenso, que pronto me vi envuelta en nauseas, y tuve que correr

una servilleta húmeda llegaba a mi cara, así que me g

eses?"- yo la miré como si estuviera delante de un extraño y peligroso fenómeno, mie

ega llegó, pero tenía que ceder ante la verdad, por mucho que pensara tenía que admitir

firmó mis peores pesadillas, abrió el armarito del baño, y de detrás de algunos cosméticos

que no...!"- Las palabras de negación e inc

s o no embarazada, la primero que debes recordar es si, esa noche, cuando estuvieron juntos, usar

do..."- dije lamentándom

tenido de la cajita, que era un paquetito que ella acaba de abrir. Las manos m

s y sentimientos de temor que me a

de bolígrafo de su interior, mientras me explicaba cómo funcionaba, yo oía las

o y salgamos de dudas, luego ya pensaremos que hacer, Pero hazlo ya, el no saber es aún más peligroso."- me dijo de forma

do con atención a esa especie de bolígrafo girado boca abajo, esperando el resultado qu

a prueba de embarazo, mis manos temblaron, y me vi incapaz de hacerlo, así que con la mirada rogué

ue Morgan me miraría muerta de risa, diciéndome que había caído en una pesada broma, pero por mucho que mi mente trataba de negarlo, la realidad estaba allí, y cuando Mor

zada de un desconocido que había conocido mi pr

me haría tomar una gran decisión que me separaría de mi antigua vida, para comenzar otra nueva con Morgan a mi lado ayu