nales. En el salón principal, Ethan se encontraba de pie frente a Isabella, que parecía más vulnerable que nunca. Había escuchado la confesión, pero no podí
. Sabía que la explicación no iba a ser fácil, pero debía contarlo todo.-La situación fue muy difícil. Cuando llegó el momento del parto, los médicos se sorprendieron, porque Liam ya había nacido y los representantes se lo habían llevado. Nadie esperaba que Noah llegara después, y la verdad es que fue una sorpresa para todos. La situación fue confusa. Los médicos no sabían qué hacer. Pensaron que Noah era un error, un bebé que no estaba en los acuerdos, que no estaba previsto en el trato. Ellos querían entregarme a Liam, porque ese era el acuerdo original. Pero cuando vieron a Noah, no sabían cómo manejarlo. Y entonces... me ofrecieron algo.Ethan se acercó aún más, con la mandíbula apretada, y lo que más le dolía no era el hecho de que Noah estuviera allí, sino el cómo todo había ocurrido sin que él lo supiera.-¿Qué te ofrecieron? -preguntó, su voz algo cortante.Isabella bajó la mirada por un momento, temiendo que sus palabras pudieran hundir aún más a Ethan en la incertidumbre.-Me dijeron que si aceptaba que Noah fuera "un error", podía quedármelo. Pero a cambio de silencio, de no decir nada a nadie. Podía seguir adelante con mi vida. Los médicos me dijeron que el trato era solo por un bebé, pero que no podían hacer nada por Noah. Decidieron que, si lo quería, podía quedármelo. No querían admitir su error. Yo... estaba devastada. Mi padre seguía grave, y ahora tenía que lidiar con un bebé. Estaba sola, sin nadie que me ayudara. Todo estaba fuera de control.Ethan, de pie frente a ella, sentía como si el suelo estuviera cediendo bajo sus pies. No podía entender lo que escuchaba. Todo parecía tan inverosímil, tan complicado. La vida de su hijo, de los dos niños, había estado decidida por circunstancias ajenas a su voluntad, y él ni siquiera lo había sabido.-¿Y qué hiciste? -preguntó Ethan, su voz apenas un susurro.Isabella levantó la mirada, sus ojos brillando con el dolor de lo que había tenido que vivir.-Mi padre murió poco después del nacimiento de Noah. Me quedé sola con él, sin dinero, sin nada. Mi madre no quería saber nada, y todo se volvió un caos. No te