las palabras que habían intercambiado seguían persiguiéndolo como un eco persistente. No podía evitar pensar en el desafí

nde la presión era palpable. Las reuniones se sucedían, pero la mente de Ethan siempre regresaba a Adrien y a la posibilid

en su oficina, Olivia entró con una ex

s ver esto -dijo, entregándole un

stics y cómo había planeado expandir su imperio empresarial. Pero lo que realmente le llamó la atención fue un pequeñ

scando fusionarse con otra empresa, y

io, sintiendo una mezcla

lo hace para

cogió los

uscando activamente fortalecer su posició

en su pecho. La idea de llamar a Adrien le parecía tanto

ió, su voz firme aunque

o lo que habían discutido. Las horas pasaron y, al final, el cansancio lo venció. Se quedó dormido, pero su mente co

*

nfrontarlo. Así que, a la hora del almuerzo, envió un mensaje a Adrien. "Necesitamos habla

z que miraba el reloj, sentía cómo la ansiedad lo invadía. Cuando finalmente llegó l

stía un traje azul oscuro que acentuaba sus rasgos masculinos, y hab

su voz sonaba como un suave

endo cómo la tensión entr

. He estado pensando en lo que

u expresión era

Te int

Sabemos que trabajamos de manera muy diferente, y si est

ntió, su r

mos aprender el uno del otro. Te admi

n sus mejillas, algo que no es

e hemos tenido es intensa. No sé si

a cabeza, su mir

emos es lo que más neces

y atracción. Era un juego, una batalla

ta en una guerra de egos -dijo

tocar ligeramente la de Ethan-. Lo que estoy proponie

a que estaba en terreno peligroso. Pero no podía dejar de pensar en lo que signifi

, sintiendo que había cruzado un

chispa de determinació

e muestre nuestra unión y la nueva dirección que tomaremos. Con

sto podía ser una buena manera

plan sólido. No podemos permitir que

que trabajemos juntos en

mo tiempo. Sabía que cada paso que daban los acercaba más no so

agámoslo -dijo

presión que combinaba

s a hacer de es

*

a diario, intercambiando ideas, debatiendo estrategias y, en ocasiones, chocando por sus diferenci

en la oficina de Adrien, rodeados de gráficos y planes que había diseñado. La tensión que solía

ero trabajar contigo no es tan malo -

nido cálido que reso

reconsiderar tus p

ombros, una sonrisa s

ejaré de ser un rival. E

us ojos brillando

e. Pero también creo que hay algo más entre n

a insinuación en las palabras de Adrien era cla

ar lo personal co

más, como si el espacio

a precisamente lo que necesi

ió palpable. Ethan podía sent

pero las palabras se le qued

to que era tanto sedu

más inesperados donde encontr

ón. La idea de perderse en Adrien lo excitaba, p

o de que esto s

ensar y simplemente actuar -sus

empo se detenía entre ellos. La atracción era abrumadora, y

rcando a un precipicio. Tenía