la sala común del sanatorio,
e su hermana gemela, Lucía, c
men conocía esa sonrisa, era la
formó en el es
, encerrada, por
ijos de un político local
Carmen, una fuerza que
dest
amaban loca,
le traía dulces de naranja, su
casaba con ese
isto sus ojos,
la transmisi
esia, su rostro desfigurado,
it
me atacó! ¡Quería qu
os puños, sus n
a no haría dañ
e puso ro
la amiga de su infancia, que esta
ró algo al oí
gri
raciada! ¡Llévenla a la finca de
n a Lucía, que ll
straron
el caos, luego se
se le
ómago era ahora u
taba en
en, iba a sa
gilidad mental
alculadora y la sed de ve
que dormía en sus mús
anos de adolescente, la se
locura, había
veces, necesita