ro. Unos rasguños superficiales en la muñeca, suficientes para llamar l

. Mis padres y Leonardo están sentados en la sala, ha

tan siete días para

la casa como un fantasma, ignorada por todos. Como sola en

a, la familia me convoca a la biblioteca. Es la p

ar, mi hermana menor, y Leonardo. Calista

con un tono solemne. "He

voz es suave, casi amable, lo

vado por el estrés de tu regreso y de la próxima boda. Dice que la ún

ira a los ojos. Fija la vis

", anuncia mi padre. "Será una ceremonia

entir algo. Dolor, ira, traición. Pero no siento n

ahora había permanecido en silencio,

regunta. "¿No te importa q

a Leo

o con esto?", le

ojos están llenos de una ag

mbiente estable. Un matrimonio conmigo le dará la segurid

", pregunto, solo

e débilmente. "Cuando Cali

susurro, más para

e oye un ruido en el piso

puedo respirar!"

rriendo de la biblioteca. Pila

tá sufriendo! ¿Por qué no puedes simplemente ceder? ¡

a, es más grande. Cede tu vestido a Calista, a ella le queda mejor. Ced

y cruel nace

rendentemente firme. "Dejaré q

mira, sor

os ojos. "Quiero que Calista se arrodille y me pida perdón. D