ítu
eleas y
mana d
la
na nueva. La desesperanza me embarga, no sé qué hacer no me quiero ir y dejar todo lo que me recuerda
ría preparar todo con anticipación y así no habría retrasos, creo que es el que está
e llenan de lágrimas cada vez que recuerdo a mamá y que ya no poder estar en l
ada más de pesar en ella se me revuelve el estómago. Ags no la soporto y sé que
é, no sabe de lo que soy capaz de
edirme, siempre he sido solitaria y nunca tuve un amigo realmente talvez solo conocidos con los
hogar donde crecí y donde los recuerdos de mi madre aún se mantienen
tención en el celular -por qué en una hora saldremo
sgraciarle la vida a Alison, pero con la
Y me convierto en
en las noches? Uff y capas
ida para vivir felices para sie
r suerte no
de lleno contra la muerta, mi
y vuelvo a quejar bajo y reprimo las ganas de llorar para así
mía no tiene ningún rumbo y me
po de
ste cuando tratado de nadar para tomar aire, recuerdo que lo sé hacer, así que entro en pánico y trate
agua y empiezo a toser como un gato en busca de sacar su bola de pelos o
ba distorsionada y cuando trato de ver su rostro ¡pero valla! Tampoco lo veo por
beso- ¿dije yo eso? Diablo
as- respondió y se acer
r! ¿O me va a besar? No
labios sé juntas ellas
nscrita en el colegio
a en sueño siempre cuenta y él me lo arruino y hoy no poder dormir par
as, hora duraría el viaje y no quería pregunta, sé que el sueño
~
ladora ¡Por dios! Tiemblo ya que mi abrigo no me brinda
on uno igual, pero en las manos de Alison hay
basura- por un momento pensé en aceptarlo, el que traía era uno de los qu
e prepare para responder esta
sito nada de una zorra como tú- le dije y ella se le cristalizaron los ojos por un momento no entendí y solo fue
madre? - pregunto y cada vez que hablaba el agarre en mi brazo aumentaba hasta el punto de provocarme dolor -¿Cuándo fue que cambiaste tanto? Si es porque t
él ya había superado, creo que la esperanza de que él aún recordara a mi madre estaban
ido y un signo claro de molestia, el brazo donde me tenía sujeta me dolía, apreté mis puños y me trague las sartas de
s hora de irnos- le dije y desvié mi mir
evo. Papá dijo que afuera estaría la persona que nos llevaría a nuestra nueva casa,
o fuera tan grande, pero no le tome importancia y seguí cuándo levante la vi
, me buscará si es que se dio cuenta de q
ora d
con grandes y gruesos abrigos mientras yo me estaba congelando,
era preocupado. Pero me equivoqué ya una hora y no llego mi decepción,
reo que también perdí a mi padre y a mí misma. Moriré de frío, ese es seguro, no traje el c
erte trataba de darme calor frotándolas, pero
anto la vista y una mujer mayor está al frente con
, pero ella vio mis intenciones -sé que lo necesitas, no seas orgullosa y acépt
despidió de mí. Para más una extraña se preocu
acordara un su hija, así que hice los más estúpido
erdía nada con perderme más a la única persona que le impor
a nieve caía y hacía más frío a pesar de que tenía un abrigo más apropiado, aún sentí
dirigía cuándo encontraba dos direcciones diferentes y no sabía
do pingue este
ver por dónde estaba, al parecer era una especie de parque co
ta
mosos, un hermoso contraste me quedé maravillada
planeamos unas vacaciones, pero con todo lo que paso no se pudieron cumplir. No sé cuá
para ver qué era eso. Es que yo no tenía sentido común, pero no me
la cubre una camiseta, sus brazos se ven fuertes. Inconscientemente, me mordí el labio superior al imaginarme tocándolos el cabello negro, se veía sedoso y tuve que reprimir la sensación de ac
asustada, vi para todos lados, pero no vi nada, el sonido volvió y me
ue me escucha porque estábamos una distancia considerable, me oculte detrás del árbo
ionada por no ver a ese enorme trasero, regresé mis pasos con la cabeza gacha, pero al querer d
n. Una mandíbula cuadrada, cejas pobladas, labios carnosos con un toque rojo en ellos, con su hermoso cabello negro, pero lo más llama
erlos, son tan lindos, reprimí un suspiro, pero v
ción espiar a las
orgasmo es inconfundiblemente ro
r un momento creí ver un destello rojo en sus ojos, pero lo descarté. Una ráfaga de viento paso por nuestro lado y mi cue
a mano, me toco la frente, su tacto fue tan cálido y reconfortant
casi caigo de no ser por el guapo delante, mi
no le entendía nada, el can
daré- es lo u último que escuche