oy en la carcacha que papá llama auto y que se arrastra como puede por la vieja carretera que nos conducirá a la casa de los abuelos. Me imagino que pensarán que me voy de va
ueno, también lo despidieron. Mis abuelos no son encantadores, sin embargo, se pueden aguantar. E
n anuncio cabizbajo. Me siento mal por
-Ese fue el saludo de mi abuelo. Me
frunce el ceño. Digamos que nunca aceptó el pase de los años y se cree un
miro con asco; mi abuelo viste una franela blanca con una bermuda por encima de las rodillas de color azul marino. Está muy viejo y arrugado, pero es fuerte y muy activo, los dientes le bailan en la boca y una calva en el medio adorna su cabeza, donde les cuelgan algunas hebras blancas por los l
alar tu carne flot
ues déjame decirte que esta carne flotante
, a ti tu carne no se te vuelve sólida ni con todas las past
no lo dijiste
ecimos a coro. Ni siquiera podría imagin
rieta contra ella, asfixiándome con sus grandes bubis que al parecer t
me mira con cara de pervertido mientras
e los dibujos animados? Abuelitos cariñosos y con pudor que, te regalan cosas, hornean galletas y te hacen historia
ión con desánimo y se me parte el corazón, sé que muchas de sus desgracias son consecuencias de sus actos impulsivos y su orgullo, no obstante, es mi progenitor y protector, me duele verlo en esa condición. Minerva me sirve pastel de fresa con mermelada de piña, es una rara combinación, pero me encanta. Tomo mi café con té de limón y como del pastel
apá -mi abuelo espeta mientras ellos conti
ndignación-, ha pasado por mucho y temo que caiga en
a favorita-. No nos dejó ayudarlo e hizo como quiso, se dejó embaucar por esos buitres con tantos préstamos y todo para demostrar que él podía obtener de la noche a la mañan
odo sin dejar escapar ni un solo detalle. Entro a una habitación que parece habitada por Barbie y resopló del desagrado. Ni cuando era una chiquilla me gustaban estas cosas brillantes
*
ickelodeon y discovery kids. Necesito remodelar mi habitación que, según mis cálculos, habitaré por un largo tiempo, puesto que pasará mucho para que nos recuperamo
ncia. ¡Este sitio es un chiquero! Mi abuelo
para, el enano creció y es más alto que yo, ahora. Vaya, tendré que pensarlo dos veces antes de golpearle las bolas o hacerle el truco derribador que aprendí viendo las luchas. Lo escaneo con la mirada y no soy la única que es
in descendencia -espeto con sorna esperando a que se averg
eer que eras un hombre con voz de mujer. -El muy es
a y con ganas de borrarle la sonrisa de la car
también. Solo te pido que no te enamores de mí,
adboy, ese chico rudo que se hace el difícil y te intriga. Scott es una tierna ratita sin mucho atractivo, no es que sea feo, pero tampoco es un galán. Si lo observo bien, no tiene la complexión física que me gusta: esos animales con músculos que te pueden cargar sin problemas, no me imagino al pobre Scott cargando
destino sería la extinción -respondo inexpresiva y entro a
n ignorada-, te puede caer tus babas con todo y catarro encima. -Ríe de s