o a la cama donde él y su prometida duermen, le excitaba de cierta manera. Sus manos en cada extremo de la cama, sus
ular bien las palabras – No tienes permitido hablar, ni gritar – se acomodó entre sus piernas – Llego a escuchar un solo ruido
le romperá el culo. Pero todo eso quedó en blanco cuando sintió como el pene de Jack se deslizaba dentr
subir sus piernas pero le era imposible. Solo podía mirar a Jack, emb
ernas intentaban subir y ver cómo mordía con fuerza su corbata, era simplemente excitante. Sin
ían resultado de dos d
otella de vino se atravesó per
odo su sistema nervioso era tan su
a tocar ese punto sensible y maravilloso en él. Tomando sus caderas embistió tocando ese punto, haciéndolo más sensib
areció en sus la
ueño de su placer
que tuvo un orgasmo seco. Salió de Gustavo dejándolo con grandes espasmos en el cue
idas en su boca. Queriendo ver que tan profunda es su garganta. Gustavo trató de recuperar
Jack aprovecho, cerrando los ojos y teniéndo solo una arcada, en su segunda embestida pu
nta, se corrió en su boca, mirando como Gustavo tragaba todo el me
le – susu
cer maravillas con la
ara quitarle las esposas y liberarlo de su cama. Gustavo m
e mucho que no me quedaba tan agotado – bostezo - ¿Te quedaras? – Jack lo mir
tavo se movió para darle espacio a Jack, así los
cama con ella – le sonrió – Duerme, nec
os dos riero
ú guapo –
ue en pocos minutos se qued
.
, estaba solo no le sorprendía seguramente Gustavo estaba cocin
estaba cocinando cuand
iña hermosa? – so
llevo tres días f
todo verte en uniforme – los
nada sobre el ve
bien –
ntró una tiend
clubes ya r
ing
– sonrió Gusta
o vuelva se que podemos meter al nuestr
iré hoy al club quiero ver co
hica la contrate yo, quiero que la v
parec
e irme, vamos a
cuídat
én tú,
rdó su teléfono cuando vio a R
o durmiente – le s
tros días – le so
s harán que no encuentren el vestido – suspir
preguntó sentán
i traje – lo miró – Ven, necesito ayuda profesional y tú
susurro -
– Además, me gustaría lleva
aré a cargo a Pe
y se sentó frente a
a – carraspeo – Esto está delicioso,
algunas cosas de la boda y después iré al
ué hor
0 – lo miró sonrie
al
en una habitación de e
ola m
Gustavo terminará en la mesa, los pla
er en algún momento. Jack embistiéndole fuerte y profundo, poniendo sus manos so
gimiendo y quedandose sin oxígeno lo excitaba, al igual que ha Gustavo, sentir como todo su cuerpo rea
orgasmo, corriéndose por completo y
osiendo y mirando a Jack – C
iraron y soltaron ris
ro algo me dice que no sal
me voy –
o beso, disfrutando de sus labios y cómo encajaban a la per
sonrió dándole un último y
tando el beso de Jack,
asa de Gustavo
sonr
onrisa podía a