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Historia

Capítulo 4 Destino.

Palabras:3461    |    Actualizado en: 12/06/2023

rdadero nombre, solo Park sabia aquello, únicamente a su hermano menor le había confesado la verdad, se había enamorado de una ilusión, una mujer que en realidad no existía y la cual

e decidiera darse por vencida y por lo menos serle honesta, tranquilamente podría solo haber desaparecido, y en ese caso él hubiera pasado tod

.. normal. - Park veía a su hermano y realmente no lo creía, Loan se veía como cada día, su temple tranquila, su mente en

enas de la vida, ver el vaso medio lleno. - rebatió con una sonrisa, mientras levantaba el ro

de mí, aun no entiendo para que pa

as palabras solo despertaron aún más la inquietud de Park, ya que eran ciertas las palaras

nquieta, un día uno de los dos matara a la paloma

aunque regreso al restaurante varias veces, la americana ya no estaba allí y es que Loan recordaba mucho de aquella noche en el puente, menos, el detalle de

n dejo a un lado los documentos en los que estaba tan concentrado y vio f

el pequeño asiático exhalo con fuerza, pero no tenía esc

e regreses junto con Wang para su boda

estaban sobre su escritorio. - Se lo que quiere, piensa que con todo esto lograra arr

informo que era una infiltrada... lo siento. - dijo el menor al ve

or algo es el jef

ana en su lugar. Medito un largo tiempo, pero no encontró respuesta alguna a su pregunta, ¿cómo se

a. En el restaurante le fue aún peor, su jefe le dijo que no y la acuso de ladrona, ya que por las cámaras del lugar había observado a la joven cuando guardo el costoso añillo, por lo que no la queria de nuevo allí, claro que tampoco le dijo que Loan había ido a preguntar por ella en varias ocasiones. Por lo que ahora Jade se encontraba aún más estresada qu

to el asiático al ver salir al

me había dado cuenta de ello. - Wang sonrió ante la re

ivertirte y... hoy es día de paga, ¿me comprendes? - el corazón de Javier comenzó un latir

o... si me diera unos días... - las

e tu misma edad, y es tan... distraído como tú. - claro que Wang omitió la parte de que su mayor deseo era matar a Park, esa bastardo a

repitió con

es... no me hagas ir por ti Javier, c

siático y así ganar suficiente dinero como para vivir cómodamente, pero Wang no decía nada con respecto a Jade y Javier se comenzó a plantear que quizás Jade había malinterpretado las cosas, pero ahora... ahora

por media ciudad, tratando de conseguir algo, cualquier empleo, un mínimo de

ara hablar estaba cansada, pero eso no le evitó que preguntara

que pueda venderla en 48 horas? - Jade respiro profundo y

ade ya no dormía con él, no solo porque llegaba tarde de buscar trabajo, sino que Javier estaba t

o préstamo y gane, pero no lo suficiente como para regresarle el dinero y así fue por días, hasta hoy que me pidió que le pagara y... no sé qué hare para regresar el dinero, Dios no sé qué hare. - Jade tenía la boca abierta, estaba furiosa, quería gritarle, decirle que ella le había advertido que no se acercara a ese casino, pero también sentía pena, Javier se veía abatido, y había dicho que lo

la voz de Jader temblaba a medida que veía llorar a Javier, solo un

tar. - Javier cayo de rodillas en medio de la sala y Jade solo pudo arrodillarse a su lado, podría tomar sus cosas e irse, así sea debajo de un puente, pero Isaías no la había educado para abandonar a quien se quiere, y aunque Jade había descubierto que Javier era un id

r, no lo hagas, algo se nos

ento, fuera lo que fuera que se avecinaba, ella no lo abandonaría, no estaba en su ser la cobardía, ella era una persona leal y

correspondencia, hasta que ella hiciera el cambio de domicilio. Subió al autobús y luego de una hora de viaje llego a una casa, más lujosa y en el lado más caro de la ciuda

arrugo su entre cejo y vio a un lado de la puerta, luego abrió el papel donde

ngo mal anotada la dire

o si aquel hombre la hubiera abofeteado, no encontraba su voz para re

confundir, mucho menos olvidar, era la voz chillo

respondió el obeso hombre dando un paso al cost

la joven fuera un fanta

mujer por la que tu

fin la rubia en

lo culpo, e

madre con asco y resentimiento, queria golpearla, deseaba hacerlo, pero estaba allí por un motivo, aunque ahora queria saber muchas

tú... ¿cómo puedes ensuciar de e

abes, ahora dime que rayos quieres o llama

erias

- el odio con el que Magnolia la veía

no la tomaron desprevenida, como su padre siempre le había enseñado, el no a su pregunta ya lo tenía, aunque en esta ocasión no solo se preparó para el no

porque no lo tengo, Terry lo invierto todo, pero te dir

re le fuera a dar alguna información, sino porqu

hija, quizás a ti te crea y si es así

s lo único que a ti te i

no somos tan distintas, aunque tú tienes los labio

se había dado cuenta, el perfume del mayor era fuerte, era el mismo olor que su madre

Jade, cuando conozcas a Derek, me

y sobre todo adinerado, tomo su teléfono móvil y coloco aquel nombre en el buscador, cuando apareció el resultado de su búsqueda no lo podía creer, si Magnolia le había d

lo cuido y defendió de Wang y de la mayoría de las personas que componían al tigre blanco, el hijo de la concubina no era querido por cas

tor del computador, donde esta

ya lo había dicho, un día de estos, matarían al mensajero, solo era cuestión

s, aunque no se

Ha

rmo y aguanto la respiración al ver com

antes que Wang si lo arrinconaba con un matrimonio arreglado. - Park po

uedaba más que decir la verdad, que Loan le había propuesto matrimonio a la americana y que esta no s

¿Q

nco, solo que como no pudo relacionarlo con la organización se dio por vencida y borro toda sospe

ayor, sabía que su padre prefería a Loan como cabeza

o que Wang, creí que querí

eron que la nueva cabeza del tigre estaba coronada por Jade, el verde de esa gema tan preciado lo guiaría y protegería,

a sus tres hijos, pero Park no tenía madera para guiar y Wang no

o beneficios, no solo salvo a tu hermano de ser engañado, también nos libró a todos de caer en desgracia, debes traer a tu hermano l

cómo hare para que regrese

regresar de inmediato, yo me encargare de qu

s que f

dije, el destino del tigr

naba, pues si su padre tenía razón y el destino de Loan ya

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