cta para regañarla, como siempre. - ¡Azotaste a nada más ni nada menos que dos de las
e cruzó
de su dignidad o algo como eso? - Por un momento se mira las manos enrojecidas, i
la. - No debes olvidar que estás embarazada, ya no puedes hacer lo que se te vanga en gana como siempre lo
ntió con r
reja de Jake, nadie me respete
ente de que las personas no iban a tolerarte cuando decidiste mudarte aquí. Además, ustedes dos ni siquiera
a la misma excusa
llevó a casa'' y gracias a los maquiavélicos planes de su suegra su vid
- Murmura, mirándose el anillo de oro que nunca desprotegía su dedo. - Sé que tampoco está siendo fác
una vida tranquila junto a Jake en un lugar
se hace un poco más profundo, Ginna sigue concentrada en aplicar el ungüento en sus man
overse de sitio, incluso con su mano herida la retiene con
dos aprietan más. Ginna se siente a punto de ser devorada viva. - Parece como si estuvieras o
de actitud cuando el asunto está relacionado con Jake, es
bías, ¿No
pasó s
escuché que el otro día usted se desmayó y le hicieron una pr
oy hablando de eso
Per
aba enterado de mi embarazo y que le parece una desgracia! ¡¿Por qué sie
na intentó neutralizarla, no podí
el medio y convertirse en el b
os menos conmigo?! El dijo que... - Cassie se sor
había creído y tenido una fe ciega en las mentiras
ió la maldad personificada, D
el día encerrada en tu habitación como una reclusa? - Delancey sonríe con la amabili
e hacer nada contra su suegra cuando ella mis
amos. - Se le escapó decir, Ginna inmediata
... Porque no tengo ningún tipo de autoridad suf
na de Cassie, está segura que si vuelve a abrir la boca terminará solt
quí, señora Delancey, siempre
quisiera que no tener que ver sus desagradables ca
saliva de los nervios que siente en ese momento, intercambia ciertas miradas de pánico con Ginna, ambas saben que lo más probable era el hecho de que aquella muy terrib