ones y los elfos. El rey Aratiel y su reina Lisbel, tuvieron solamente dos hijas. Lily, la mayor de apenas cinco años y Shairy de
n honor al pacto de ayuda mutua contra el enemigo. El príncipe Edril, que también es pequeño, será el que asu
se alejen
se ponen a jugar con el agua. De pronto todas las otras hadas que las rodearon desaparecieron y ante las niñas apareció un espeluznante dragón. Lily movió s
n por ti, serás una niña humana sin ning
sentir otro ser mágico se retiró llevándose a Lily. Shairy esperó escondida en el arbusto dos días, las hadas la buscaban desesperadamente a las dos por todo el bos
la profecía muy antigua. Así que hasta que e
dio de los humanos. Al menos lo único que no había olvidado era su nombre. El viejo a pesar que vivía de recetar remedios a los h
s que vestía hasta comidas y frutas para alimentarse, las cuales ella llevaba para la pequeña y destartalada casa que compartía con el que consideraba su abuelo. Y allí comía solo una pequeña
as volar. Podía pasarse el día entero subida en una rama de un árbol sin que se aburriera, pues aunq
ecolectar las hierbas con la que hacía los ungüentos que le recetaba a todos los enfe
yo no soy la elegida de n
scarte para que nadie más te cogiera y pudieras pacif
hay guerras por aquí, ¿qué pueblo voy a pacificar yo? So
pesar de que le contestaba eso a su abuelo. Desde niña Shairy ha tenido muchos sueños extraños que no puede comp
a llama que debe de ir por ella y reclamarla. Eso sobre todo la confunde mucho, porque siente que la voz es lastimera y real. P
de un ciervo, escuchó unos quejidos que provenían de una caver
hija del curandero del pueblo Galadrie
lero que chorreaba sangre de una enorme herida en su pecho. Corrió y quitán
curarte, iré a buscar hierba
o prestó mayor importancia a ese detalle y la tomó corriendo junto al ciervo fuera de la gruta por el medio del tenebro
taba acostumbrado a luchar. ¿Será verdad que existe una guerra? Se preguntaba en lo que había encendido una hoguera cuando sintió extraños sonidos en el bosque y cómo de pronto el homb
. Cerró sus ojos apretándose con fuerza del extraño, hasta que sintió como la tomaba en peso y corría con ella adentrándose en la
ndo como éste salía corriendo y al ver lo
uié
o, lo curé, pero ahora creo que me salvó d
n ese bosque, que existen muchos extraño
yoría de ungüentos que usaba para curar ese tipo de heridas, pero
etió? -pregu
in que nosotros lo viéram
una criatu
dices
que desapareció de