Sergio me contaba sobre Amanda, que sus padres tenían mucho dinero y no le prestaban atención, ella era feliz de fiesta en fiesta, que siempre tomaba de esa manera y que era él quien
amigo como tú, siempre es bueno
tenía muchas ganas de tener relaciones sexuales con quien fuera, no estaba ebria, no me estaba excitando nadie, me asusté sinceramente, me levanté, me despedí, l
me regreso a la facultad, se cuidan. Mientras decía eso, trataba de parecer lo más normal posibl
ocupes, no te vayas sola, te puede suceder algo ma
icación, no te preocupes, quédate acá de fiesta, estaré bien, no
ros, por favor nos dices cuand
r, ya ella me había comentado que Sergio la cuidaba
con un chico bastante atractivo, parecía alg
nto, que pena, que t
taxi no llegaba, me cercioré de que fuera una mujer la chofer, quería cuidarme lo más posible; como no llegaba, c
metros y un auto s
a, es mi culpa que estés así toda mojada, nin
ue nunca había sentido, al no poder soportar más, me subí al auto del chico, era mayor que yo, eso era evidente, pero sinceramente no me impor
vas, donde
e la facultad de historia si algo así sucediera, ya estábamos más que advertidas que si regresábam
a, dije como para que no se diera cue
sexy que había visto en mi vida, realmente
te, le dije que venía de Provensa, que nunca había salido de mi ciudad, omití que era estudiante de la facultad de historia, tot
del auto, él no me contó nada de su vida, solo
ubría prácticamente nada de mi cuerpo, aun sentía la exci
ara este lugar; ahí lamenté el haberle hecho
lo que no sabía es que yo estab
mi se encendió, hice algo que en la vida había hec
ente mientras me iba e
nadamente, eso hizo que mi entrepierna se humedeciera un poc
ue sentía, no sabía que había pasado esa noche, pero sabía que perdería mi virginidad con un desconocido algo mayor que
entía muy duro, poco a poco subió mi pequeño vestid
, ahí, al aire libre, sin ninguna otra
e que era mi primera vez, terminamos al mismo tiempo, ahí nos quedamos un largo tiempo abrazados sobre el capó de su Ferrari, por c