nombre, se llamaba
hora cero". Sobre su cabeza se colocó la corona de la justicia. A ninguna persona le sorprendió que una mujer ta
omo un ser sin defectos. Era la rep
s hombros, la gruesa capa vinotinto caía hasta tocar el piso tapizado. Al fondo se encontraba Adem, vestido de gris
a derecha; bajó su rostro hasta tocar su frente el mango de la espa
delante de ella cuatro guardaespaldas, también vestidos de negro protegían y hacían camino a la entrada de la corona.
iglesia se arrodillaron, inclinando sus cabezas, demostr
ar fijamente a la pareja, la cual comenzó a subir hasta ella, se arrodillaron y la anciana colocó la co
para observar a la multitud, la cual levan
eco por el inmenso templo. Todos se reincorporaron y después inclinaron sus cabezas, haciendo una revere
tenía rostro: Ja
ión ante la justicia, Jara extendi
os Soñadores Oficiales. Así como también en todas las dimensiones era transmiti
la vida misma, el cuál jamás había sido entregado a una persona. Este cargo se tiene que dar de la mano de un Justiciero, el cual
menos importante que el de Protegida, pues siempre se incli
ibiría el ascenso a Verdugo: asesinar a personas que cometieron pecados capitales. Por e
importante del planeta Tierra y todas las dimensiones existentes: la Protegida del Justiciero. Ella hab
oñadores Oficiales Internacionales, los que do
o llamaron Exp
iales. Por esta misma razón debía tener un cuerpo esbelto, ser mujer, de piel oscura, cabello liso, pero con nariz fileña, ojos col
escendiente de la dinastía Darmy, la familia donde había
sada con un hombre de piel oscura, con un cuerpo robusto y poseía gran altura. Para los integrantes del Experimento Jara les pareció la
con el poder y los genes
eliminar cualquier defecto genético e incrementar sus años de vida a unos quinientos años. Así mismo como también fue intervenido su
Darmy, siguieron haciéndole intervenciones genéticas,
ones. Fue considerado un parto perfecto. Soltó un fuerte llanto, demostra
alto coeficiente intelectual. Sus dientes crecieron y todo su cuerpo maduraba de una forma avanzada. Por esta m
ales, siendo adoctrinada por la filosofía de las Grandes Amantis. Adquiriendo
aba para ser quien en el futuro ocupara el cargo más importante de la vida misma: Protegida del Justiciero. Por lo cual s
vo el que una noche cualquiera, a sus seis años, en un hospital pediátrico, la n
ficial, quien en el futuro se convertiría en su Verdugo, la sombra que l