n su mirada, lo

a respetar le dio una buena bofet

mine de cambiarse antes que Fiorela nos de

la aun ardía, no sabía porque lo había hec

ruin al pensar

r, su corazón muerto había vuelto a la vid

como Raphael no sabían tratar a mujeres como ella, era como un

librí, vas

ardían, sus labios eran fuego, quería volver a esa habitación

cuentro -su cuñada la sacó de sus pensam

choque con él y

Raphael -de pronto la puerta se abrió, Luca salió co

trajo para darle un beso, Anastasia bajo la vista, pero al volver a verlos

r la mirada, ve

s que había sido suyos ap

da al

miento que despertaba Luca, Fiorela era un

Raph

nastasia no sabía cómo fue que logro, evit

sus miradas delatoras, revelarían lo qu

recostó tocand

o, cerró los ojos y su mente la llevo al mundo de los sueños, donde él apare

tada, movió su cabeza, no podía seguir pensa

una tarde un p

se topó de nuevo con el cue

a quiso protestar, pero no tuvo éxito, no quería escándalos o que Raphael

con su pulgar acaricio su labio inferior -te perseguí toda la mañana, porque lo único que quiero es beber tus labios -m

snuda, tocándote, escuchando...- siguió su camino de besos por su cuello, su perfume lo volvía loco,

misma -tú te vas a casar con Fiorela, esto no puede ser. -él volvió a tomar su rost

eas tanto como yo -Luca lanzó una mirada de l

vano, al final termino cediendo a sus labios, a s

a tomo su pierna y la levanto, su falda dejaba que pudiera acariciar su suave piel, sus dedos llegaron a s

nos va llevar esto? -le dij

r -tomo su mano y la llevo a

feliz, tu mirada me lo dijo, yo quiero que seas feliz conmigo, Colibrí huye

ice

ue seamos felices -ella dio media vuelta -¿Qué va pasar cuan

ués la llevo a sus labios -se valiente ven conmigo -se acercó a besarla, quería que sintiera amor, que cayera en pasión que corrí

permitir que volviera a pasar algo así -no vuelvas a seguirme, mi destino es

ra una mujer diferente a otras, ella no caía tan fácil a la tent

nte en tu venganza... -escuchó que decía To

bir a su lujos

razón, pero no

hael, él debe sufrir lo que y

el cuerpo de Luca pegado al suyo, por las noches tenía sueños con

de Raphael la sacó de sus pensamientos esa noche tendría una cena supuestament

te todos seré la esposa perfecta- Raphael s

jo a su

me gusta tomar a ninguna mujer por la fuerz

ero tomar m

a -él plantó un beso en sus labios,

en las nubes. Los de Raphael la mandaban a un abismo de desdi

n la cama le parecía

hubiera tomado, si me hubieras probado ahora serías una mujer satisfecha y feliz... -no creía en sus palabras, si

uiero estar contigo por amor

con el tiempo aprenderás a amarme- beso su

a.

por un arreglo entre las familias, solo para salvar a su padre enfermo de ir a

seas así, pe

omo su rostro la besó, ella quería apartar el

specificaciones de un navío -el hombre miró a Anastasia y despué

-vamos, no puede ser que no puedan hac

ntos eran los mejores cuando no tenía

ocios de Raphael, odiaba cuando eran esas

o si fuera un p

con ese vestido...- le susur

rlo su corazón comenzó a latir como

a besar en la mejilla a su hermana y a

-Fiorela estaba feliz y radiante, miraba a Luca con un brill

icio la reunión -Luca camino sin apartar la vista de Anastasi

ería una tortura

cuenta de las miradas qu

za entre las fam

re que quiero -dijo

prichos de su hija, cualquier cosa que pedí

s fuego en la cama -Anastasia apretó la man

zos

rque su primera esposa se suicidó? - eso la

ue ella tomará

tipo de hombre, pero cara

fecta, lo que a

das de todos los hom

hombre está claro -dijo cuando estaban s

pe en el estómago

ui cortés con t

a noche coqueteando con los hombres y no d

etó con fuerza -¡ERES UNA Z

A!

ella y comenzó a besarla, a rasgar

avor -dijo con

igar... -pero el parecía que estaba sordo, sus labios

olor fue lo que logró qu

ame, pero tú ti

en -se levantó de la cama, ella se hizo a la cabec

ero

que no lo haría, pero dio media

ejó que las lág

dría que estar con él, pero no podía le provocaba

e ahogaba en esa casa, fue corriendo a

rando a las personas, siempre había soñado

a algo que estaba m

í ¿que