o de las respiraciones compartidas. Los ojos azules de Cameron se encontraron con los ojos negros de B

se con desenfado en la encimera, sus brazos a ambos lados,

nsidad de la mirada de Cameron. Su pulso se aceleró, y los n

su voz un susurro cálido que resona

ndió ella, con un deje

o perdido? - inquirió Cameron, una sonrisa juguetona danzand

uando, cambiar de entorno no está mal -contestó Bianca, una sonrisa

uesta. Fue una respuesta corta, pero clara, abriéndose a todo tipo de p

un biólogo marino a una mujer con el arte en la piel

anca, desafiante, la tensión entre ello

se mueve de lo más aburrido a algo más atra

u lado, reduciendo el espacio entre ellos. Una chispa de curiosidad se encendió en los ojos de Cameron mientras observa

us movimientos. Bianca tomó el vaso, abrió el grifo y lo llen

lerada desde que vio al chico. Para ella, era un jo

desviando la conversación h

ndió Bianca, notand

l, su voz más baja y c

dolor varía con el peso de cada tatuaje -contestó ella, su mi

igeramente, una sonrisa intrigante en sus labios.

directamente hacia el tatuaje en cues

ella, sintiendo como la tensión e

entonces? -preguntó él,

dad de sus respuestas. La tensión entre ellos se int

é te has mudado de Londres. Total, todo lo que encuentras aquí, podrías duplic

tre ellos. La mirada de Cameron se volvió más directa, capturando cad

no sentirse incómoda por la situa

artista, también b

eron, sus ojos brillando con

ojos fijos en los de Cameron, como si

rada intensificándose

ibes pa

respondió Bianca, manteniendo una mirada desa

ando sus palabras co

e insinuación, mientras seguía recostado contra la

apoyada en la encimera, los brazos cruzados, como

ntestó ella, su sonrisa enig

irió Cameron, captando c

mirándolo con determinación. Aunque Cameron era u

as? ¿Qué tipo de notas haces con más frecuencia? -i

ensión entre ellos se volvía casi tangible. Finalmente, decidió rompe

es ardientes -declaró ella, deslizando sus palabras como

ramente hacia adelante. La proximidad entre ellos se volvió palpable, y el al

ó él, sus labios rozando en el aire, como si estuviera cerca del lóbulo del oído derecho de l

na corriente subterránea, listos para dejarse llevar por la sinfonía que aún estaba por componerse. La danza de insinuaciones y deseo se prolongaba, construyendo un juego peligroso que ninguno de los do

suavidad, sintiendo la proximidad de Camero

ersidad? - interrogó Bianca, dejando q

iver

udias en la

a resonara con un tono sugerente que hizo que el

me dejó hospedar en la casa de al lado,

, siempre busca algo qu

idad entre ellos parecía aumentar con cada palabra compartida. Las miradas se entrelazaron, pero el mister

rió ella, dejando que su sonrisa ju

ión pícara, no retroced

vando consigo un matiz sugerente que hizo que la

ue parecían contener secretos aún no revelados. Ambos se perdieron en el abismo de la cone

da, la madre de Cameron, hizo su entrada. Las llaves de la casa del árbol en la mano, su presencia aportó un cambio repenti

¿Podrías ayudarme con las maletas de Bianca? Traigo las l

usa para distanciarse momentáneamente de la conexión intens

yo se la

n unas palabras y ni siquiera eran para ellas y tal parece que su mente, las calculó de forma dobl

un momento -prometió Cameron, su

n en un silencio tenso mientras ella respondía la llamada, sus miradas chocando y entrelazándose en un juego de complicidad no

olgó el teléfono y s

Cameron te muestra la casa, ¿de acuerdo? - Le preguntó

ente incluso cuando Amanda abandonó la cocina. Una vez solos, el silenci

a y estaba a nada de un solo fósfo