alud de Eleonor, más bien se debía a que ellos habían escuchado con atención y claridad la confesión de Iris, la dama que debía servir a su falsa hermana realmente había atentado contr

leonor fuera tan noble como para encubrir el actuar e Iris no era posible, pues

or había llegado a ellos, también era más consiente que su hermano de todas las humillaciones que la joven había sufrido en su propio hogar, bajo sus narices, ¿Cómo se supondría que ayudaría al rey a impartir

le, pero no mucho mejor de lo que estaba días atrás, su resfriado a desaparecido,

mientos, ella no lo podía negar, pues la trataba tan fríamente como lo hacía con sus verdaderos hijos, tal vez al duque solo se le dificultaba mostrar afecto, pero eso no quitaba el hecho de

Eleonor poco comprendió aquello y se sintió aún peor, alguna vez en los primeros años como la joven White se propuso saber todo de los lobos, pero luego, ante cada desplante de los que la rodeaban, su interés disminuyo, hasta ahora, que se permutaba a que se refería e

bero, mientras que Iris continuaba cepillando su cabello, no pensaba regresar a la cama por más que el mé

por estos lugares. - a Eleonor no le costó nada darse cuenta de que ese medico estaba tratando de manipular a su padre, quien era uno de los más cercanos al rey, al menos fue su gran general y quien obtuvo la victoria en el reino de los humanos y luego con lo

más rápido? - Eleonor lo escuchaba y no lo creía, hasta ese momento ella est

rujos sanadores se dejaran ver, eso no garantizaba que algo cambiara en el futuro para la poca gente del reino Kael que aun pudier

doctor, invadiendo su espacio personal bajo el asombro de este y la sorpresa de su padre. - Y le recomiendo que no involucre a mi padre en sus planes para obtener e

ntro, lo estaban escuchando con claridad y la abrasión que le tenían a Eleonor les sirvió par

o. - era el mejor cumplido que Camer

obleza. - claro que Emir llegaría a esa conclusión, si desde que su padre la había llevado a su mansión, Eleonor nunca se compo

na idea, pues su rostro pálido les dejo en claro que su padre le había mostrado el rostro de su lobo, aun así,

ensaba ver a otro lado, buscaba justicia para su hija, la queria claro que lo hacía, aunque su corazón siempre lloraría por Felicia y su suerte, si al menos tuviera la certeza de que estaba muerta sería un descanso para su alma, pues al menos esta

i culpa, queria probar una nueva técnica de rejuvenecimiento facial, y por ello coloque lodo en la vasija, cuando Iris vio que había ensuciado el agua con la que debía asearme me regaño, advirtiéndome que podria contraer alguna enfermedad si colocaba esa mezcl

ue Eleonor nunca terminaría de adaptarse a su familia, sin saber

Eleonor, de todas formas, ella no importaba. - Arroje el balde de agua que Iris había traído para asear mi cuarto, no fue mi intención arruinar la cam

omo el duque lo estaba haciendo en ese momento. - Ya estoy cansando de tu comportamiento, de haber sabido lo problemático que sería traerte conm

adr

t en sociedad, con suerte conseguiré un buen esposo para t

y acepo lo que

y aun así Eleonor se inculpo, por un lado estaba orgulloso de que su hija se mantuviera firme en su mentira, pero por otra parte, ¿Qué clase de futuro le esperaba si estaba dispuesta a acabar con su vida por proteger a otros? Más cuando estos la han dañado y aunque en ese momento de enojo, pensó que lo mejor se