sofá, se agarró las piernas con dramatismo y comenz

mentira, culpó a Madisyn: "Por favor, entiende que

. Después de todo, aprendió ese comportamiento de sus dueños, ¿no?", resp

ncilla bolsa sobre el hombro y se dirigió hacia la puerta, con pasos firmes e

pman se quedaron furi

de sus jefes. Desde el regreso de Jenna, el respeto que el personal le mostraba a Madisyn h

o y pasó de largo; su postura era impeca

stino", dijo el trabajador, quien

ener nada que ver con la familia Chapman", respondió el

idió al conductor que la llevara a la dirección que

ruinas, que no compartía nada con la o

s padres biológicos; además, en el aire flotab

se encontraba un hombre, vestido con un traje impecable y elegante, rodeado de guardaespaldas;

mirada llena de incredulidad. Luego, corrió hacia ella con los brazos abiertos y, a pesar de su imponencia y a

e quedó p

l y por qué

que tenía frente a ella. Tras unos segundos de vacilación, rompió

pero tú... tú no eres una de nosotros. Nuestro bebé nació muerto", suspir

hombre bien vestido y añadió

l desconocido, percatándose de las i

oz ahogada por la emoción, mientras sacaba un documento de su maletín con la mano temblorosa. "Después de escuchar que los Chapman habían encontrado a su ve

mento y leyó la i

, el parecido en sus facci

ida, la abrumó a tal grado que se quedó callada, m

y, por culpa de la negligencia de una enfermera, la vida de tres familias se entrelazó sin que lo supieran. Lo que pasó fue lo siguiente: el bebé de

. No tienes idea de lo mal que la pasó ella. Te está esperando ansiosa en el hotel

yn asintió lentamente, aunque su m

esta situación y, aunque no puedo revivir a su hijo, les ofrecer

para restarle importancia al asunto. Su tono dejaba entrever su cansancio y desilusión, pues desde que Jenna, la joven que su esposa y él habían

así que no pierdan su tiempo aquí", dijo, con una expresión mezcla de tristez

oyce estacionado en la acera. La opulencia del vehículo contrast

aquí para ti; cualquier cosa que necesites, no dudes e

un millonario cualquiera, sino el CEO del Grupo

a ascendencia y cuando esa pesada y profunda verdad se i

vuelta en un holgado vestido Chanel, encarnaba la eleganc

de que Lynda Johns, vicepresidenta de la Asociación de Danz

lograba que su hija estuviera bajo la tutela de tan distingui

vástago se pusiera su mejor

esperó que la recib

de mezclilla, la serena gracia que poseía hacía que todas las miradas se volcaran en ella. A su lado estaba

aquí?", murmuró entre dientes