co
er mayor, me miraba embelesada y sonriente "Se
n me espera –Le ofrecí mi sonrisa diplomát
s con las manos en los bolsillos, escuché la risa de mi madre y eso
ijo no se enamora de ti es un completo idiota –Rod
an hipnotizantes, profundos y llenos de vida, un rostro hermoso que parecía estar esculpido por un artista, cada rasgo desde su nariz delicada hasta sus labios carnosos e
s brazos abiertos dejando un sonoro beso en mi mejilla. –Quiero presentarte
mano temblorosa en mi dirección, con l
una descarga eléctrica dejando mi piel ardiendo. –Espero que mi ma
ces –Replicó mi madre con un
espondo sin apartar
s tortolos para que se conozcan –Respon
eva a Jacob al jardín en un moment
e desviaron hacia las redondas y perfectas nalgas de Natalia, esto no estaba saliendo como es
para poner mis pensamientos en
mbros. –Puedo preguntar ¿Por qué está siendo obligado a
ueca con seriedad. –Ser un Morgan significa que tu vid
sarse –Afirmó
i madre, pero no voy a dejar que guie este circo a su manera puedo proponerte algo estoy seguro
–La confusión fue e
nte de todos, pero cada quien podrá hacer su vida como quiera, establecemos nuestras clausulas, si aceptas te daré todo lo que quieras. –Al mencionar esto último pude ver el brillo resplandeciendo en su mirada eran las palabras mágicas para una mujer ofrecerles una vida lle
posa trofeo, sé que en estos casos el amor es inexistente, pero al menos deseo tener un compañero
objetivos? –Pregun
ra, usted quiere casarse por un nombramiento, yo lo haría para...
ironía. –Busco sumisión, porque la futura s
si en efecto se equivocaron conmigo –Expresó con altanería determinada, sin apartar sus ojos de los míos, sí que tenía bríos esta chica, peroa más, llegué a la estancia donde mi madre y la tía de
al escuchar a mi ma
ujer que desafíe y cuestione mis mandatos ya tengo suficientes problemas, me subí a mi camioneta el rechinar de los neumáticos hizo eco en todos los alrededores y aceleré dejando atrás este lugar, d
..
e ánimo para escuchar su cantaleta y reproches, cerré mis ojos dejando que el alcohol me hiciera olvidar esos ojos