ñar la Luna, se ar

o Garcí

elo. Me ofrece su mano para ayudarme a levant

-tartamudeo a

por una sensación extraña al notar lo apuesto que es. Sus ojos d

ula cuadrada con una ligera línea de vellos rubios, nariz respingona y labios gruesos.

. Demasi

sobre alguien que apenas acabo de conoce

la vida, envía a todo mi cuerpo un escalofrío -. Venía distraído cuando choqué contigo -me ofrece su m

Retiro mi mano trata

isc

llamo Kira

es perfecta, sus dientes estúpidamente blancos y todos

ia-. Voy de camino al comedor, ya que hemos chocado, po

-sus

soy a su lado, a penas llego a su fuerte pecho. Una tierna sonrisa se dibuja en sus labios

ocedo al ver a tantas personas acumuladas. Las multitudes y yo no somos buenas compañeras, es una de las razones por las

gusta tanta algarabía -susurr

iosa, ha de pensar que soy una re

no abandona mis ojos, produciendo que mis piernas se debiliten-. Conocer nue

l sentir

emociones por alguien qu

esto e

ndome la misma sensación de cuando lo tomó por prim

los sietes días que dura el campamento. Para el día de mañana, desde bien temprano iremos al lago para una compe

ue haga de las suyas y me coloq

ala, y esta escena me traslada al comedor de Hogwarts. B

tica y una frescura, además, de sus ojos grises. Las cosas entre los dos fluyen sin tensiones y media hora

jos negros, con sonrisa burlona que tengo fre

gua para no responderle. Paso por su lado y me cier

fiende Brando -, solo ha sido un tropezón.

ta una carcajada, su

rla-. ¿Dónde? Si más horrenda no puede s

habla a

a tensión en el ambiente, decido que es mej

arle su merecido al imbécil del comedor. Le digo que no quiero problemas y lo acepta. R

a a leerlo, yo tomo otro sin importar si contenido, lo repaso

que me hace sentir. Muchas veces me encuentro pensando el cómo se sentirá sus labios sobre los mío

un altercado con ese chico y sus amigos, allí supe su nombre. Y si debió darme un indicio de algo no lo hizo, todos los que estamos en este campamento somos h

siento que la vida me sonríe po