an
grité a la cara al que s
rencia y falta de empatía me hacían p
moré en mi adolescencia y pensé, solo pe
z se había convertido en el
tampoco me esforzaba por gustarle de nu
nas fotos de su cuerpo desnudo. Más que sentirme molesta, me sentía tris
ados de la cadera tengo piel colgando, no es algo para m
iero sen
abogados, ya basta de oblig
s pensó que lo fuera a
u comentario fue de tan mal gusto que fue
o me respetas, y lo mejor es dejarlo has
ción, tomé mis cosas de la cama y fu
hija, era tanto el tiempo que estaba aquí que le dimos esta habitación para
s y estábamos tan enamorados que nos habíamos casado a los diecisiete y hab
s, pero cuando tuve a mi hija me dediqué al
a, ahora siendo uno de los ingenieros
rabajo y yo de nuestra hija, nos distanciamos y en vez de hablarlo, él
e mi cara en la almohada del lado izquierdo y un aroma v
ien ese muchacho, pero no tan a
a fragancia, caí rendi
escuchar un ruido y una maldi
había venido a seguir las discusión hasta aquí, pero lo que encontré
del susto a Mateo que giró a mi dirección con cara de traum
mente al verlo, pero esperaba fielme
mó él sacándome de mis
al chico que siempre ha estado aquí
dir tu espacio, no s
me quitaba mi c
yo el invasor. -me dij
me puse de pie, olvidándome completame
exual, netamente por comidad ya
, esta vez
anera tan fija y con una tensión formándos
es en encaje en la parte de mis pechos y este se t
momento exacto en el que
vaya, -susurré. -
dejando una distancia con
z que me tuteaba. Pero si primera vez que su
la cobija para que no viera mi cuerpo ca
sperando a que la respuesta fuera a
ó un paso más hacia mí. -¿Quieres
co y hasta me sentí segura. Pero iba a aprovech
respondí con la
ar con mi hija, ya que ella conoce por t
endió si mano a mi rostro para
or su cercanía y so
abras me dejaron seca. -Yo no dejaría
cieron y puse mi p
, espero que no dejes ir a la chic
ejilla suavemente y lo dejé ahí viéndo
noches
la puerta a mis espaldas y caminar hasta la ha
a. Nunca me había sentido ta
n envuelta en la cobija y entré sin
o favorito de la cama y al ve
nuevo? -pregu
jos humedecidos. -L
ia mí y me abra
a con mi hija, es como tener a mi
én sabe todo lo malo que ha hecho porque
s a l
ama donde nos acurrucamos co
de por lo que estoy pasando y sinc
..
mí, al abrir los ojos me fijé que era mi hija quien esta
go las energías y no me se
dad, sino porque me había perdido a mi misma en un
ada y es un sentimiento que sin
imas salieron de mis ojos hasta que escuché t
oví en la cama y Barbie cayó a mi l
nte, con el pensamie
ue abrió la puerta fue Mateo, lo hizo con dificu
é porque mi piel pálida a vece
cuché saludar y mostró esa s
Mateo. -respon
uno, al ogro que ti
sonreí en agradecimiento y me entregó la
o hice mucho desa
iré un poco el cuerpo para ac
emovió buscándome hasta acurr
sus ojitos grises como
y fue inevitable n
í aún acariciándole el rostro. -Mat
o y quitó la mirada de m
el agua, -yo me reí por l
que quema
observo la bandeja asombrada, -Vaya, va
no para impresionar
giosa y comenzó a comer lo que ha
momento de la habitación para buscar su plat
los codos y yo preocurando no mostra
no había luz, pero hoy era
cina hoy, ¿Si? -me di
no hay mejor compañ
o mientras se levantaba de la cama y marcaba
on los platos vacíos en l
eguntó mirándome dir
su dirección tratando de arregl
delante sentiré me
ón y bajó un momento la
por esta actitud
a que estaba enamorado de mi y que cuando estuviera
de mi hija y es vecino de nosotros en el ve
hora vive aquí prácticamente y nunca me ha molestado, ni a Iván ta
oco incómoda con los g
e admirado como madre, mujer y esp
ara me lo haya dicho, sino porque hay que estar muy ciego par
a picar por mis l
erar todo ésto que te tiene así y que vuelva ese brillo que siempre veía d
y más por su carita bonita d
en tono de broma y acercó su mano a mi me
as, Mateo, -susurré co
eño, -yo fruncí el entrecejo viéndolo directamente a los. -Me prom
o pude responder porque él se acercó a
mi casa para la tarde de
ndeja de la cama y se
___