Seducido por mi Jefa Millonaria

ma

hasta Carnaby Street, puse los ojos en blanco

tos listos para atacar, Amelia y Costanza miraban

a, y Costanza asintió con la

ra estar, y como era sábado por la noche, estábamos tentando a la suerte. Los famosos venía

había convertido en un hábito. Había vuelto a equivocarme y, de repente, Elliot,

ndo buscaba su próxima dosis, se convertía en un monstruo. Después de que me atacara una vez más, escap

la avanza". Con una minifalda verde y una chaqueta ro

egalo: un recipiente antiguo con una imagen de Cleop

inó la cabeza hacia un

adre me espera de regreso en Merivale. Le

runció el ceño". Pensé que íbamos a almorzar

a de disculpa. "No pu

incipal, y después de ver a tantos a quienes se les n

go y rubio con las manos. Su vestido era tan corto que casi se le notaba

n comparación con vosotras dos,

a tocó la tela sedosa de mi vestid

me quedé sin aliento.

elia miró a

mientras él se ocupaba de un hombre que se tambaleaba y, d

e aceleró. "

cabeza y frunció e

oiga. "Me incliné hacia

ró para mirarlo fijament

" pregun

ro fuerte: "Ese es el tipo

tención porque se giró y sus ojo

ir, después de que me atacaran y me robaran, todavía no podía sacármelo

endo. Me recuerda

ian era el vivo retrato

estos meses. Mira esos músculos. Están a pun

chazo de Julian, que había socavado mi confianza en mí misma. Y si bien antes pod

sa "dije". Quizá mis tetas no

s ojos en blan

ez sea

eño. "¿No dijiste que

ntento fallido de sed

e las chicas les acaricien el pene. Créeme,

a seguía enamorándose d

e de la fila, me encontr

oleada de nervios mientras trababa mis rodill

ojos permanecieron fijos en los míos y, d

ver a Reboot. Había pasado mucho tiempo desde que es

prefería estar casi calvo porque su pelo era rizado. Tenía la cabeza con

resto. Parecía má

al que le formaba hoyuelos en las mejillas y le daba

e maduro

de ba

e emoción cuando entramos en

odeó con su delgado brazo y su pulse

octurno estimulaba los sentidos. En cada rincón había tragasables, tragafuegos, bailarines de burlesque y contorsioni

gar parecía temblar de exuberancia, algo típico de la escena de los clubes. Normal