ard M
odía apartarla de mi mente, la forma tan inocente y a la vez tan sensual en que ella se mordía su labio
, había hecho que mi pulso se acelerara, además de que tenía o
podía dejarlo solo todo el día con Smithy, pues el niño necesitaba otro tipo de cuidados y tampoco podía mandar
ue lo cuide.- hable en voz alta
ody
cir que es un hombre guapo, sin embargo tiene esa aura de virilidad que se hace patente, más con esa ropa de muy buen corte; me recuerda a la ropa que mi padre usaba, me
de despejarme de esos pensamientos, y me
bajar a ayudar la Señora Mary, a mi casera, en la cocina; ayuda que ella me agradece, pues to
udarle a limpiar la cocina, me refugio en mi recamara, no es muy lujosa, pero con la ayuda de unos pocos muebles y una cortinas q
tengo que buscar un nuevo trabajo, uno mejor pagado que el que tengo en este momento, pues necesito ganar más, pues se me están acumulando las deudas. Por lo
contacto me abrazaba la piel, y que se me secaba la garganta, pero al levantar la cabeza y ver las cejas levantadas del hombre que me sostenía, dejo de respirar y sin saber qué hac
pues aun lo tenía presente el contacto de ese hombre, y aunque cerrara los ojos, si ese hombre me toca
corriendo como si te
pondí, con esa respuesta tan vaga y no qu
ión en contra de mi conducta, pues soy respetuosa y trato de cumplir con mi trabajo sin falta, además de que trato a todos bi
e pongo a leer, buscando el trabajo que tanto nec
i voy corriendo cuando salgo de la oficina, y es cuando una fuerte mano me detiene, sujetándome del antebrazo, asombrada y un poco temerosa, y hasta con un p
ender lo que pienso, pu
e una proposición.- me dijo el hombre y al hacerlo esbozó una
cerme?- le preguntó muy seria, con
podemos hablar aquí en la entrada del edifi
y con una taza de café fre
ucho los ojos por la sorpresa
?- Él asintió con la c
xpediente, y quiero hacerte una proposición
ard M
stá mi compañía y mi departamento privado, por lo que si la chica de ayer a la qu
de ella, le ordene a mi secre
nícame con per
e respondió, a los pocos seg
or Maxwell, línea dos.- tomo el teléfono con
o servirle s
joven empleada, no se su nomb
ipción puede ser algo tardado señor, pero podemo
e un metro sesenta y cinco o setenta de estatu
genérica, veré los expedientes y le lleva
eno, espero que me
a Morton de Personal, tras lo cual cuelg
Señora Mortón, encargada de personal con no me
as las empleadas menores de treinta que encajen
, yo solo veo las fotografías del expediente, y los descarto uno a
le digo entregándole los demás expedientes d
tiene trabajando en la empresa desde hace cinco meses, no veo reportes de faltas o retardos al trabajo, ni amonestaciones por lo que sé qu
denes de quien, me paseo por el piso donde ella se encuentra, ella no me ve, pero yo
cuerdo que el día de hoy tuvieron una junta por lo que supongo que a ella le ha tocado hacer
ene casi corriendo por lo que tengo que detenerla sujetándola del antebrazo, cuando me mira,
que hacerte una proposición.- le digo y al hacerlo e
me?- me pregunta muy seria, con una m
os hablar aquí en la entrada del edificio.- le dig
niendo frente a nosotros un café, me pres
sorprende pues mi experiencia me dice que las mujeres solo escuchan lo que quieren, y lo
es puedes ayudarme.- le digo, ella siguió
lista para viajar conmigo en cualquier momento que lo necesite, si aceptas yo te ofrezco cincuenta mil libras, como compensación, más la ropa que vas a necesitar como mi esposa, además yo arreglare todo en la oficina para que tengas un trabajo al finalizar el contrato, las cincuenta mil libras
osos que eran mordidos en ese momento por unos pequeños dientes blancos; lo que
reguntó al ver que ella
do de formar alguna palabra que no alcanza a s
res soltera, pero no sé si tienes
me responde ella, con una vocecita muy tenue
sted es lo suficientemente capaz como para librarse de sus mujeres sin problema alguno, y
r a una institutriz, mi sobrino acaba de perder a sus padres, y no quiero ponerlo en manos de una persona que no le de cariño y compañía
ody
licándome su proposición y el motivo que le lleva a hacerla, y lo hace sin dejar de mirar
pero noto que solo ve mis labios que en estos m
pregunta al ver que yo
más que quiero de mi boca no logro sacar un
res soltera, pero no sé si tienes
enas yo logro escuchar ya que mi voz fue muy tenue, tengo que pasar saliva antes de p
o y yo creo que usted es lo suficientemente capaz como para librarse de
serio y con un semblante que me
r a una institutriz, mi sobrino acaba de perder a sus padre, y no quiero ponerlo en manos de una persona que no le de cariño y compañía,
a locura, más sabía bien que el dinero me ayudaría a cubrir las deudas y los gastos de l