Em
sus palabras,
én la abrazó sin ningún pudor, y le dio un beso en
sa supuesta amistad y tanto cariño qu
veo recorrer varias veces, hace más de 6 años, la zona en donde estaban varias
del día en que la mocosa me
migos, tomando cervezas en
no lo suficiente como para n
parada de taxis, estaba con o
ioneta y toq
ge me
supe si me había
Sol
do bajé la
¿Q
egunt
que te
con mis
no est
impasibilidad,
o co
e las chicas que
idiota de
viné, porque ella ar
ba bo
cualquier cosa y n
yo me quedo en l
stante flaquita y v
n la sensualidad de la mo
¡S
ord
ndo mucho la pierna, mi camion
ás bor
é con voz
¡N
una pierna sobre otra, haciendo qu
giné el color d
volviera a prestar
, creo que había tomad
más de cuidado de l
ada tanto la miraba y me preguntaba si se daba cuen
íntima y ese top que le marcaba el pecho tan sensualm
star cerca de nuestras casas
a a la mansión de los Vernez, ellos eran
un parque, que a esa
lega
comodaba el cabello y no
s muy b
ins
on una bebida energética
ló be
que eso t
es div
uerés d
ella se desabrochaba e
¿C
regu
ndo con claridad, aunque
esto, y me acerqué a el
ailaste
se so
Cuá
e disi
te a
muy cerquit
estremecía y f
l beso, mis manos se dispararon a su
her
mis sentid
era un modelo grande, su interior er
on frenesí, olvidándome del odio ca
el que gobern
n ganas, hasta que sentí su desesperación, seguía sin pensar, es que había estado todo el día imag
¡A
quedándo
eo que fui
nstante me di cuenta
ocurr
a ser v
misma tarde, y lo h
e nunca en mi vida había sentido, ella me seguía devolviendo los besos, que p
gasmo tan potente, que creía que n
porque esa noche muchas
u interior, se
muy h
rep
otizado por
entras su boca respondía con ferv
estaba escuchando sus gemidos, en un momento sus uñas se enterraron en mi espalda y su boca mordió mi hombro, mientras que sent
ner orgasmos y pocas eran tan apasionad
mejor qu
n los dos poderosos
tranquilos, me di cuenta del terrible m
mord
ado fácil sacarme las ganas de ella, hasta m
... no pude contr
me había dejado esa marca a propósito, para crearme algún tipo de proble
e entre las dos veces que eyaculé, no había salido de ese paraíso de pasi
ene, lo veo l
amente no supo controlarse,
que me quedé con la virginidad
camioneta, no me parecía tan
s vi
uera un detalle menor,
debutaron hace rato, yo... estaba esperando sentir
e quis
usto
e podría gustar a es
eció como
elo tener en la guantera de mi camioneta y hast
s y de pronto me sonrió, su sonrisa era c
¿Q
nté con
. sos m
ión, eso me molesta bastante, porque siento que no soy
parezc
y hasta me parecía i
, m
utame,
aba en terminar de sacarme las ganas de tenerla en mis brazos, ni pensaba esperar a que tenga su orgasmo, pero ella de pronto comenzó a gemir y a
cé con e
n mirarla, esa chica era el diablo, ejercía sobre mí una atracción que yo no
taste, ahora ac
si le hubiera
nto, se lo
so, ya había pasado el momento de besarnos, no tenemos una rel
i casa, antes de que y
puerta de su hogar, porque el por
l acostarme, al
rmido, aunque estab