se abrazó. Intentó respirar profundo para calmarse, sin ningún éxito. Las lág
fallecido. No estaba segura de cuando había sido la última vez que soñó con eso. Le había tomado algunos años y un sinfín de terapias aprender a
el techo del carro. La oscuridad de la noche apenas iluminada por lo faros. Un grito. La
dar que no estaba allí. Intentó respirar, pero era un trabajo
ción, se sintió como un sonido lejano. Segundos después unos brazo
un salvavidas. Él se escuchaba preocupado. Trató de darle un
Las lágrimas aún se desl
ndo. No estaba segura de que le estaba diciendo, pero tan solo es
a respirar con naturalidad desapareciera. Se separó de Luka y se limpió
ía resultado muy frustrante, pero aprendió a manejarlos y en su mayoría pasaron a ser
tes de insistir en saber l
adilla. -Se l
información, lo cual fue bueno n
se puso de pie mientras ell
al hombre que trabajaba para ella que se quedara
ado -dijo él con v
un lado y la obs
tame
bre
Cualquier cos
ce tal vez, Giovanni y yo fuimos de campamento, era algo que hacíamos cada año
izo un ges
anni, por supuesto se negó. Siempre
ios mortificada apenas las p
preguntó si algo lograba irritarlo, hasta ese mom
si
sonrisa de lado-. ¿Puedo continuar? -preguntó él toca
S
edió para que me callara de una vez. Quedamos en que el que perdiera iba a nadar desnudo
ó -a
y se proclamó vencedor. Él no me habría obligado a cumplir mi castigo, pero ambos tenemos un sentido del ho
a de ropa. Luka le sonrió como si supiera que estaba pasan
hiciste? -preg
eal que conozco. Cuando se acercó lo suficiente me burlé de él y nadé de regreso a la orilla. No llegué muy lejos porque comencé a reír sin parar. Eso l
me disculpé mientras trataba de llegar a la orilla, para cuando lo hice él me llevaba buena ventaja. Él caminó con la ropa mojada, pero yo... Yo cam
tar soltar una carca
os mucho tiempo? -pregu
un hermano mayor para mí, pese
estaban carga
r el tiempo. Alguien a quien pudiera contarle mis secretos o con quien hacer travesuras. -No sabía porque estaba compar
é su
da eso, es algo hipócrita de mi parte. Estoy viviendo la vida que m
iene porque decirte qu
tan fác
aron en silenci
olver a tu
protegerte, incluso
rabajo? -preguntó ant
o una fuente de ingresos. Quería que el resto l
alisó el ceño que no sab
s de la manera q
nto
eguntar a qué se refería, él cambió de tema-. Ahora ¿pued
o. Si no lo hubiera visto luchar contra hombres que parecían má
dormido en l
a de ello. -Él se estiró para
. No era eso lo que había pensado
a actuar diferente a lo que
frente, rodeó la cama y se recos
a sorprendió más, si
mbre -dijo a
respondió Luka si
oplido y cer
o; pero, extrañamente, su presencia la hizo se