/0/17402/coverbig.jpg?v=f23fb00903de02deab35ae59c834942b)
a predicción de la tarotista se me clavó en los huesos: "
no tardó e
erlín, regresó a mi vida como un brillante cirujano, acompañ
strozaron, pero nada se comparó con el momento en que se negó a operar a
la horrible verdad de que él, el hombre que me había aniquilado, había apro
scubrí no solo este tormento,
arse: su crueldad no era venganza, sino una de
linterpretado tanto
lsedad y manchado por el dolor, s
ue solo yo podía sacarlo, mi corazón roto se vio obligado a
GOOGLE PLAY