os dos documentos sobre la mesa. Su mandíbula se tensó c
se había casado con él solo por dinero, pero no podía en
tado sus intencion
util rubor que se había apoderado de las mejillas de Melinda todavía estaban vívidos en su mente, tanto que Jonas golp
se aprovechaba de la gente por dinero. La simple idea
n bolígrafo y firmó los dos
tró en su habitación. Estaba sudando profusam
ecuado. Envía estos document
evió a tomarlos. Abrió la boca para d
decirme?", le preguntó Jonas
s preocupados. Se humedeció los labios
io de su joven Señora. Es que... Tien
de Jonas se abri
uieres
o de vigilancia y se puede notar que ha ido al hospital esa mañana temprano". Melinda
no pudo evitar preguntar
o!", gritó el hombre y su voz re
e había respondido. Se sentía impotente, sin embargo, su agenda es
o encontrar un trabajo suficiente para pagar sus facturas. Afortunadamente, era una escritora admirabl
iedo de arruinar la reputación del hombre. Por esas razones ella siempre rechazó su ayuda y sus favores. Sin emb
ientras Melinda escribía el borrador final. Había estado trabajando en un artí
sto cuando estaba a punto de apoyar la cabeza en l
eso su casa estaba ubicada en un área remota y solo Kent sab
levantó para a
conmigo?", Melinda bromeó
iliar. Jonas estaba apoyado contra la pared. Había venido solo y e
suavizó al ver a Melinda en pijama, el cabello recogido en un moño desorden
rlo a pasar. Pensó que había venido a entregarle los papele
nque estaba ordenada, la luz tenue le daba un aire muy deprimente.
pecho. Sus ojos fríos lo miraron fijamente, ya que tenía la
hoy?", preguntó Melinda
labios y le sonrió
Kent tiene derecho a visitarte cuando le apet
uería que Jonas se enterara
os papeles, ¿verdad? No sé por qué
. Lo había llamado "Señor Gu". No pudo evitar pregunt
o de la barbilla, le levantó la cara. Tenía la
te todo esto casándote conmigo, ¿cómo p
. Parecía como si no estuviera listo para dejarla ir. La m
do de hacerle d
a con ternura. Había extrañ
igo? ¿Cuánto te paga Kent ahora? ¿Por qué estás tan ansiosa por dejarme?", gritó Jonas sacudiéndola, casi como si quisiera sacarle las respuestas. Melinda gritó de dol
y no lo necesito. Estoy más q
razos de la mujer con todas sus fuer
no alrededor de su garganta. Sacó un cheq
a. ¡Apuesto a que puedo comprar más de
a de ira, pero no había rastro
el amor de tu vida, ¿no es cierto?". Antes de que Melin
. Se dejó caer al suelo y se c
jos se ensancharon al mirarse la mano
to. No sabía por qué reaccionó de esa manera, pero no podía soportar que ella lo
regó otro cero después del número. Miró el chequ
ue se arrepienta de haberte conocido. Acabaré con su puta v
mente. El rostro de Jonas se
geré y te llevaré a la mansión. Puedo fingir tran
cándalo esta vez. Le había ofrecido un gran p
ibía que Melinda estaba celosa y le había propuesto el divorcio en un ataque de rabia. Quizás estaba d