Instalar App
Historia
Novia Traicionada, La Reina de la Mafia Se Alza

Novia Traicionada, La Reina de la Mafia Se Alza

Autor: Gavin
img img img

Capítulo 1

Palabras:1318    |    Actualizado en: 10/10/2025

Lombardi, fui a registrar nuestros papeles de unión oficiales. Era la culminación de

do a una esposa dos meses antes. No era yo. Era Is

quedó de pie, con el brazo rodeando a Isabella, quien se agarraba el vientre y afirmaba que esperaba un hij

a prueba del trabajo que construyó toda su carrera- con retratos

a para provocarle un aborto, por fin lo entendí. No s

l Consigliere del Don me había ofrecido el control del Proyecto Quimera, la red de inteligencia más poderosa de

ítu

vista de

rdi, fui a registrar nuestra unión con el Consigliere de la familia. Fue entonces

no a un único objetivo: el ascenso de Marco. Era nuestro futuro, los cimientos de la familia que yo anh

mos esta noche, solo nosotros dos. Compré su corte de carne favorit

los papeles de la unión con Salvador

on un gesto, con los o

lo un trámite. Podemos hace

segura mi posición, nuestra posi

voz teñida de un fastidio que ya

era inmensa. Dante, "El León", era un hombre cuyo nombre se susurraba, un fantasma de poder que controla

isma. Una sorpresa. Una forma de demostrarle que seguía sien

queña y silenciosa que olía a papel viejo y cuero. La empleada era un

n registro de unión

ulario sobre la

e del s

o Gua

clado. Me miró, y un destello de al

rco Guardiola se act

e alivio

hizo él mismo. Siempre

eada no

istró a

se congeló

mí. Valent

te con la cabeza,

es para Isa

er que juró que no era más que un error de juventud. La hija de la familia Moretti, uno de nues

oraron en la garganta-. Llevamos tres años juntos

empleada perma

o, sí hay un certificado de matrimonio legal a nombre de él e Isabella Moretti, con fecha de hace dos meses. J

rramó por el suelo. Mis manos temblaban mientras buscaba a tientas mi cartera, la foto gastada de Marco y yo en nuestro "día del pacto". No fue una boda

a mientras le mostraba la foto-

a la miró

nales no son reg

probarlo -rog

or hacia mí. Allí estaba, en frías letras negras sobre la pantalla: Marco Guardiola

legado tarde a casa, oliendo a un perfume que no reconocí. Había deslizado una pila de papeles frente a mí, diciéndome que era

bajo, Vale. E

Qué había firmado? ¿Una disolución? ¿La anulación de nuestr

a que su posición fuera segura. Los proyectos que había diseñado para él, los modelos financieros para sus negocios legítimos que le habían ga

de Dante, para dirigir el Proyecto Quimera, la red de inteligencia más sofisticada de

ida, lo único que siempre había querido era una familia. Un lugar al que pertenecer. Marco me lo había promet

. Un fuego. Una rabia tan fría y pura que quem

adas en el suelo. Salí de esa ofi

. Iba a encontr

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY