e su visita? -inquiere, me gusta que no se ande con rodeos
es por seguridad, para ser sincera quiero pedir su ayuda -en cuanto escucha esto suelta
cero, me parece extraño que acuda a mí después de lo que sucedió
s o mejor dicho Massimo Carluccio. -No parece nada sorpren
rcionarle esta información? -Sabía que p
fico como se quiso hacer creer después de tratar de inculpar a Massimo, aunque eso era más que evidente debido a todos los impactos de bala que el carro
inquiere paseando de un
a, por el momento no la tengo, pero solo es cuestión de unos días.
or su muerte, era un hombre despiadado sí, pero también ayudaba a todo aquel que se lo pedía. También se filtró la información de que usted junto con sus hijos murieron emboscados por culpa mía en su mansión, debido a que yo supuestamente no pu
ccio, pero éste se hace llamar Luciano De Angelis, siempre está acompañado ya
aba de persona, días después ese hombre sufrió un infarto y murió, a todas las demás personas se les ha amenazado con que si le cuentan la verdad a su marido
a información, quiero
trato? -pregun
uerte de su hijo, créame tengo mis medios, a cambio necesito de todo su apoy
mo para pedir mi protección? Creo que aún
anto su apoyo, me refiero a que necesito de sus hombres para llevar a cabo mi plan. No sé preocupe puede pensarlo, no me iré de Italia hasta en unos días, solo otra co
hace pasar por la