Dejada a la Deriva: La Gélida Partida de la Heredera

ártel de Monterrey, un lazo sellado co

a alberca helada en nuestra fiesta

de

a como si fuera de cristal frágil, mientras yo luch

lada frente a todo el bajo mundo, Javi no me ofr

un escándalo, El

s, destrozándome la rodilla y mi carrera como bailarina, Ja

tu. Necesita aprender que es de mi propiedad, no mi socia. Cuando es

con su amo. Creyó que podía matarme de hambre de

quiv

do al protector con su amante, y

su anillo en un

de Monterrey y me matriculé en

desaparecido, yo ya estaba en Nueva York, de pie junto a un

ítu

a Gar

ofunda, pero estaba lo suficientemente frí

ferraba a mis piernas como un ancla de cement

rficie distorsionad

Javi" de

do dueño de mi corazón desde que yo tenía cinco años. El ho

nzó a

alivio reflejo y desesperad

no nadó

de

tes, la chica que acababa de empujarme. Ella se agitaba, gritando con una actuaci

tra su pecho como si estuviera hecha de c

eó más fuerte que el frío. Me puse de

ue se extendía por mis venas. Caminé hasta el borde, arrast

tenido a media nota. Todos los ojos del bajo mundo de Monterrey

nía a la amante mientras la prometida goteaba

con delicadeza. Se quitó el saco y lo env

tonces

alidez. No había discu

ndalo, Eliana -dijo, su

tan fuerte que pensé que podrían

ndo el rostro en la seda. -¡Me resbalé! ¡

te. Pero a Javi no le importaba la verdad. Le importaba

descartándome como a una sir

susurré, las palabras sabían a

el hijo del Subjefe, un hombre que había matado por la Fami

-dijo, lo suficientemente alto para que

de mi pech

a y definitiva. La cuerda que me había atado a él d

ré. No

vuelta y

a crecido, gente que ahora presenciaba mi ejecución social. Salí

, pero marqué el número que había guardado par

r. El favor que le prometiste a mi madre. La inscripción a

era por el sueño y la con

uces de la ciudad que ya no era mi

de que pudi

mi cuarto va

Me movía como un robot, pro

millete seco del baile de graduación. El relicari

ntiras en ese

del Cártel de Monterrey. Estaba harta

disciplinarme. Pensó que m

puesto exactamente d

de s