es de mi deportivo y fuí rumbo abajo. Tomé una pera del frutero para finalmente ir a el garaje ¿per
n- lo tomé p
está mi d
as ir- mierda, por un demonio... No, no es momento debo irme, no puedo dejar esperándolo. Solté m
el tiempo pasó muy rápido... Observo el bello café a través de mi ventana, salgo
puerta una esbelta, delicada y hermosa figura se posa a solo seis centímetros de mi, un gran ventanal de vidrio nos separa. Hoy lleva unas Vans ne
la misma hermosa sonrisa de la primera vez aunque... la tristeza sigue reflejada en la expresión de su rostro, obs
ja registradora. El moretón en su ojo ya desapareció pero... Ahora su muñeca está vendada, no pareces ningún matón ¿Alguie
s regresa para mí suerte no tardará- asentí, se alejó lentamente mientras ataba a
n- esa agradable voz y ese dulce aroma sé de quién son, mis ojos se abrieron como platos... Sus labios estaban a solo centímetros de los míos. -Hasta que por fin despiertas, ya llegó m
lpas salieron de mi inclinando mi
enfoque tanto en solo venir a verlo que no tomé en cuenta lo más importante, la razón por la que hoy podía verlo. -Bueno... Yo estuve pensando en una pastelería ¿te parece?- asentí tomando la carpeta que puso sobre la mesa. -
m-mi me ENCANTA- oop
ha sellado esa expresión en tu rostro?. -Entonces, yo creo que es todo... puedes llevarlo contigo a casa y darle un repaso, yo ya se lo que diré y las muestra
feromonas no huelen nada similar a las que tienes impregnadas. -¿Cómo
Nam
hico no me agrada, puedo n
amigo desd
no lo olvides- ¿por qué es
ue tarde... entonces mañana yo haré los postres de presentació
rda ¿Si quiera se
no puedo dejar que vuelvas a estar a
do de piano llegó a mis oídos, Jimin rebuscó en su delantal y sacó su teléfono. -Listo, cuando llegue a casa te enviaré las imágenes y recetas que debes preparar- guardó su teléfono en el bolsillo derecho y desató su delantal. Tengo el número de Par