pa un poco, padre me observó de reojo y luego miró el plato de Jimin. -Al parecer no te gusta el bistec de r
ba algo distraído aunque tampoco tengo mucho apeti
lo olvide por completo... Cuando me avente sobre
mira- eleve mi brazo izquierdo y lo moví de un lado a otro. A
- Jimin se puso de pie y padre con su dedo índ
del comedor me puse de pie abruptamente. -¿No terminarás de come
alejado de esto!- sin darme cuenta lo di
, primero te repito que no me vuelvas a alzar la voz, segundo, no bus
vienes a molestarme, llevándome y recogiendo me cómo un niño? Me estuve conteniendo pero no lo soporto
e adoro con todo mi corazón, me preocupo más por ti de lo que lo hace esa madre tuya más sin embargo solo vives diciendo y amenazándome con ir con ella! ¿Qué hice mal, por qué me desprecias de esta manera? ¿Solo por ponerte límites? ¿Por evitar que te conviertas en un asco de persona parásito, que derrocha dinero a gusto, fuma y solo se aprovecha de otro sin poner nada de su p
ncipal. -¡Jimin!- me apresure a seguirlo para mí suerte el solo caminó, cuando por fin pude estar a su lado tomando una bocanada de aire lo tomé por el hombro. -Oye ¿Qué sucedió?- sin esperarme l
pedazo de mierda má
me odia pero... Aún no se que fue lo que hice, no l
r ti como un desecho pero si tan solo supieras que el único desecho que no merece ser reciclado eres tú, ¡ERES UN MALDITO IMBÉCIL!- lo ha escuchado todo, no puede s