la sensación de pasar el día como si fuer
vantó el brazo de vez en cuando, señaló las habi
n pesadas, con la cabeza gacha y no le quedaban fuerzas. Ella no escuch
e habría estado divirtiendo con Michelle y Charlie ... Estaba tan ab
da, levantó la c
re d
aba frente a ella, parecía tener orejas extens
Shirley, que estaba inexpresiva. Fr
lar. Pero para poder vivir una vida feliz durante estos días
mento enemigo desde un lado. Pensando en algo, Shirley sonri
on él. Señaló a un lado casualmente y lo miró. Ella no vio cómo se veía en absoluto,
La cabeza negra estaba junto a él, y seguía saltando, co
to flores de
ue su tío le había dicho que a Giselle le gustaba
riz. "Sí, los he visto antes. ¿Cómo po
ntes, se dio la vuelta y caminó hacia el se
ba preocupada por ti ahora mismo!" De hecho, fue un poco, no, muy culpable decir algo en contra de su volunta
iró con interés, ani
or lo que debe haber demasiadas cosas esperando que te ocupes en la empresa". Pensando en esto, siento pena por ti, así que
te. Debes poner los intereses generales primero. ¡Creo que si quieres volver al trabajo, el abuelo y los demás lo
Shirley, Edmund sintió ganas de reír. Miró a
a adelante. No se volvió para mirar a Shirley al t
an largas que su paso era casi el doble que el de ell
ponder a su pregunta. Ella se aclaró la garganta y le recordó v
u pregunta. En cambio, preguntó: "¿Qué piensas de este lugar?"
nada más, fingió estar relajada y respondió: "Está bi
o. Parece que tienes algo con lo que lidiar en la empresa. Tienes que lidiar con eso lo antes posible. No te
o que estaba pensando en ese momento? Por alguna razón,
muy ocupado". Tan pronto como terminó de hablar, vio una
que descansar. Es una buena oportunidad para que
o que pensaba? Ella estaba realment
e está bien aquí, no impor
Shirley sintió un fuer
ucho tiempo y no dijo nada. Entonces vio a su tío levan
Antes de que ella pudiera decir algo, se puso de pie, se
ó de haber sido cobarde, pero se animó a sí misma en su mente: 'No
habitación, escucharon risas y
or que Shirley, pero mucho más hermosa que ella. Su piel era blanca y hermosa, y su figura era de
de Shirley sobre su vida diaria y ni siquiera se dieron cuenta de que
Ella saludó y dijo amablemente, "Shirley, ven aquí. Esta es tu tía.
a modo de saludo. Pero cuando vio al hombre detrás de Shirley, se llenó de alegría. Ella se
ró a la aturdida Shirley det
volví ". Aunque Yolanda Su tenía más de cuarenta años, se