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que no ha dejado de vigilar la residencia de la familia de Nisha. En cuanto supe que estaba viva una llam
de la balacera en la mansión de Grecia. El hijo de puta de Dark sigue saliéndose con la suya y sigue arrebatándome lo que por dere
sos ojos verdes y ese terror al verme, solo de imaginar su expresión este
abla, sacándome de mis turbulentos pensamientos de añ
reíble, su rostro es una máscara perfecta de tranquilidad, una tranquilidad que deseo con l
ara ver algo o alguien sospechoso, pero no hermos
que la vida, su culazo ahora se ve mucho más grande, en definitiva el bastardo de Ratko y Claus estuvieron entrenándola, mi sonrisa se amplía porque esto será muchísimo más
su hombre ha vuelto a ella, rio suavemente una vez deja
egunto sin mirar a ninguno d
posicione
que mis hombres comiencen hacer lo suyo, mientras
me he estado moviendo con una falsa identidad, esta mascara fue cortesía del sujeto que me ha puesto en c
s una pena que no puedan disfrutar un poco más de la paz, la tranquilidad y la nueva vida que Ratko l
de mis hombres advertirme pero rio negan
adas, mientras asciendo en la caja metálica, revivo sus ojos y su expresión tranquila, una expresión que estoy deseando ro
n el aroma y sintiendo como poco a poco la adrenalina comienza a hacerse presente, antic
enc
más y finjo mi mejor sonrisa antes de tocar el timbre. Después de algunos segundos, escucho ruidos en la puerta y esta se abre. Frente a m
regunta con cie
en su dirección y se tensa de inmediat
i sonrisa se ensancha mientras intenta cerrar la puerta
enía intención de lastimarla - murmuro en tono divertido tendiéndole mi mano, ella duda un instante y suspiro - estoy aquí de parte de Ratko Stevens, ¿sabe quién es verdad? - su ceño se f
o Nish no está en este momento - come
tancia conversar con ella - la mujer lo medita un poco y
me adentro en el espacioso departamento, finamente decorado y
sonrió con
ta y asiento dejándome caer
ra para dirigirse a la cocina mientras observo a mi alr
cuparnos? - pregunta desde
madera, muchas fotos de Nisha con su familia, en todas luce increíble, con esa sonrisa hermosa que suele ador
e así vestida, sin poder contenerme más, tomo el portarretratos y lo sostengo entre mis manos, absorto en l
suegra me sobresaltan y me traen de
comento dejando la fotografía en
triste en la voz - Max murió hace algunos años e
a, sus ojos están anegados de lágrimas y l
endiéndome la taza de café, la tomo con cuidado
l último que preparara, con calma disfruto del caliente liquido mientras la escucho gimotear de
olocarle el silenciador, aunque es un departamento insonorizado no quiero alertar al resto de la hermosa fam
se gira para verme en cuanto lo hace sus ojos se abren de la sorpresa
r sus ojos de los míos mirándome con confusión - pero necesito darle un hermoso regalo de bodas a su hija, un claro m
us ojos hacia su pecho, donde de inmediato comienza a bro
oz triunfante sus ojos se abren aún más y antes de que p
dona poco a poco el cuerpo de mi suegra mientras se arrastra por el suel
te estúpido - murmuro en tono burlón mientras me acerco a ella una
la suya - murmura en
su frente, su cuerpo cae en el suelo sin vid
ntras me adentro por el pasillo hasta la primera puerta que consigo, pego mi oído a la puerta pero no se escucha
esta debe ser la habitación de uno de los gemelos, doy un paso dentro en busca del otro integrante d
atuajes sale por ella secándose el cabello, sus ojos se fijan en mí, la sorpresa en su rostro a
ocimiento y rio al saber que posiblemente el
cia la cama, me muevo rápido y caigo sobre él, sostengo su mano que in
o y un quejido escapa de sus lab
uinaras el regalo de bo
o en pie, lo tomo del cuello y me coloco
o el cuchillo por su cuello en seguida un chorro de sa
úsica para mis oídos. Espero a que caiga en el suelo a mis pies justo donde debe estar. Sus ojos van perdien
rmuro girando sobre mí mism
ncia flota en el aire, es su habitación, sin dudarlo ingreso en ella, su cama está hecha a
e mis brazos hermosa - murmuro ante
cuanto las abro su armario me da la bienvenida, reviso los cajones en busca de su ropa interior, una senci
lo que veo en su interior me llena de ira, de una furia incontrolable que deseo des
ellas Nisha sonríe con felicidad una felicidad que solo debe pertenecerme a mí, l
mis manos y estrellándola contra el fondo de la pared
mi ser es un odio y una furia que ciega mis sentidos, me giro sobre mis talones en
nte a un televisor encendido, camino hacia el como un toro embravecido y sin aviso sin decir nada clavo el cuchillo en su pecho, sus ojos se abren de golpe y me ve con expresión aterrada, saco el cuchillo y vuelvo a enterrarlo en su cuerpo, una y otra, y
do plumón y una libreta c
ciosa, ¿recuerdas? Cada vez que cerraras esos preciosos y encantadores ojos que tienes el único rostro que ve
mor G
ió de lado al ver el cadáver cubierto de sangre de su padre y me acerco a él, tomo el cuchillo
control de mi cuerpo, me inclino sobre el c
tranquilos, reinicio el silbido del tema que tanto ha estado rondando mi cabeza estos últi
añicos y tomo la fotografía, la doblo y la meto en mi bolsillo, camino hasta la puerta y salgo del departamento dejando un claro mensaje, no solo a Nisha, sino también a los b