inutos a
de mecánico, y se cubrieron las caras; con unas máscaras de Harley Quinn y el Joker, para que nadie les reconoci
guro de esto?, ¿s
ical. Sujetando la cara de la chica entre sus manos,
. Charlotte p
está bien -comentó Charlotte, sin re
testó Kevin, sujetando las manos de la chica, de
relajó por unos segundos. Tomando la dec
bien,
bastante para su menudo cuerpo, lo que hizo que la cogiera aún con más fue
aleras del Central Bank de Suiza. Kevin la perseguía cubrién
s dio tiempo de poder ver como abrieron la puerta del banco. Entraron sin pensarlo dos
pueda verlas -gritó Kevin, con la cara escondid
caer los casquillos al suelo, hicieron que Charlo
n las bolsas -dijo Kevin, dando una patada a la recortada, mientras la pasaba
ladrones -respondió Charlotte, llena de euforia; baj
que por un momento se olvidó de lo que estaba pasando. En realidad los chicos sabían que no estaba bien lo que estaban haciendo; pe
o de miedo; levantó su arma, le a
a lo ha oído, es
o de que usted también tiene fa
a se apoderó de ella, y recordando su pasado, contes
.. No me quieren, de
vin aprovechó, para que las personas que estaban dentro del ban
s manos, Kevin miró el reloj de su muñeca. Al ver que l
ate prisa, no ha
por llenar -respondió desde la otra pun
atracando el banco, las patrullas po
más cercana que vaya al lugar del asalto -se escuchaba en todos los coches policiales-. Enseguida llegarán l
ndo los agentes dentro del coche. Después de haber e
os acaban de estro
lere -respondió abrochando
usculoso, como peculiar, y tan serio que nadie d
pasado le seleccionaron, para posar de modelo masculino en un calendario. Del cual destinaron toda la r
do en una coleta. Sus ojos son marrones, muy claritos. A pesar de que es una chica joven para el cuerpo de policía, a ella no la importa demasiado; pues, de
po policial. Emma pasó su periodo de prácticas hace unos meses, ahí fue cuando la asignaron de pareja con el agente Roland. En la com
io y rompe el silencio; el chic
Quién demonios ha
sonas que están a su lado, gritan horrorizadas al darse cuenta de que está muerto. El alboroto y los gritos se apoderan del lu
ndo al suelo! No quie
ombro. Al ver que a la chica le cuesta despegar los pies
n, al tener unas de l
a, al ver que hay un hombre tirado en el suelo,
larguémonos de aquí -contes
umenta Charlotte, bajando las esc
contesta, apretando con mucha fu
os a salir de esta? ¡¿He
n vernos así, la policía está cerca de nosotros
a termina de quitarse el mono, Kevin sujeta la mano de Charlotte para que maneje el vola
o por el espejo, cuando
nos persigu
ucha más fuerza. El coche patrulla acelera su marcha y enciende el sonido de la sirena para que paren. Omitiendo cualquier clase de señal, Kevin s
. Mientras va pasando su menuda pierna por e
control del coche y sin darle tiempo de qui
, cuidado no