ia y sin paraguas, echó una carrera para entrar en el bar de siem
al, llevándose por medio a todo lo que pasaba, incluida
rpe, disculpe, dij
Mario al darse cuenta que era su chica, se quedó si
uera está diluviando y entre
o nada, res
nes a
dió Sara un
o, comería
de prisa, dijo Sara esq
oniendo la comida, ¡ Julia hoy somos dos
edio que aceptar par
as y pollo de segundo, dijo M
contestó con
minutos, y por fin Mario se la
el no sabía ya de que hablar, la chica era demasiado c
e chico habla y pregunta
tame que haces aqu
na clínica de psicología y al terminar mi beca me ofrecieron q
, y en qué
ho más, " Bueno por la zon
odría invitar a salir alguna noche?, me das tu núme
mida agradable, y salió sin más, no quería ir deprisa con es
spuso a mirar los expedientes de los tres últimos pacientes,
wich para cenar, pensaba en Mario, sabía muy poco de él y s
se encontraba con Mario, y allí estaba, se fu
ido asintió y
cada día y poco a poco se fu
Mario no vio llegar a Ana
a, déjame invitarte
recuerdos con Sara y no reaccionó
algo, tienes algún p
, estoy esperando a mi mujer, pero parece q
a, yo comeré contig
, dijo Mari
mujer se quedó un poco extrañada, Mario nunca la había hablado de ninguna compañera y si comía alguna vez con
sa, y Mario al verla s
o a Ana, una vieja amiga de la universidad. - Encantada Ana, e
ueno yo tengo que marcharme ya,
, ya nos
mal gesto, había algo en
on en silencio de
lmente se decidió a preguntar, - no sabía qu
l lado del bufete, bueno, más bien me enc
ien. terminó
ades de la vida trabaja al lado de mi bufete... " y co
.. contes
o incómodo y cuando llegó la ho