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orar y mi apetito se ha ido. Sé que ya ha pasado bastante tiempo desde que escribí la primer carta, pero espero comprendas que estoy mal. Hoy de nuevo en l

¿por qué dejas

todas las noches. Te veo en la escuela y es como si no me conociera

máticamente se inundaban de tanto dolor, me duele, duele que ya no estemos juntos, me tort

r adelante, como ya lo decía, me has dejado por otra chica y vaya que no es cualquier chica de la escuela, estamos hablando d

ita tendría un ojo morado. Te vi entrar al gimnasio con aquellos movimientos perfectos que hicieron que me enamorara de ti, quería detener el tiempo, quedarme justo ahí. Cuando giraste hacia la izquierda justo en dirección a el

to será una broma pesada

vencer. Tengo que sacar todo mi dolor, tengo

lo haré po

ella primera vez, por fortuna pude ocultar mis ojos llorosos tras la lata de soda que sostenía, no quería que me v

sentir el viento revolotear mi cabello (como tú lo hacías), sentí cada paso con más seguridad. Sé que esto es el comienzo, no te

fel

ta

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