on vida, hasta que al final había terminado por apagarse. El anciano que se sentaba cerca golpeó los leños carbon
masculló para sí-. Mucha
n la parte superior de la vara, hasta que impactó
to-. ¿Se puede sabe
du
y pálido, que miró con ojos ojerosos llenos de
guera con su bastón-. Hay que volver a encenderlo, o si n
aba trabajosamente-. Además, como si fuera tan fácil saber
raznido que pretendía
bó también los días y las noches, y
soles siguen allí, brillando con fuerza -dijo el chico mientras rebuscaba entre los fa
ién sabe, y qué importancia tiene? Las nubes no se van a ir a ninguna parte, así
s que quedaban colocó las ramas y las hojas. De un bolsillo de su capa vieja y raída sacó un par de piedras oscuras e irregulares, y comenzó a hacerlas chocar la una con la otra. Las chispas comenzaron a salir despedidas para ir a aterrizar sobre las hojas y las ramas, pero parecía que el fuego se resistía a prender. Después de forcej
sintió el calor de las llamas calentar sus manos nudosa
sentó junto al invidente, con los brazos alrededor de las rodill
a pregunt
me llames eso -re
y abuelo
ro sigo tenien
egunta es
nos segundos, meditando, hasta que al fi
iguió la victoria sobre los Yinn gracias al Fragmento Ámbar... Y q
s, ya
el Fragmento Ámbar? ¿De dónde
aspeó, frotándose las
nte cargó un gargajo y se volvió para lanzarlo por los aires-. Durante mucho tiempo se creyó que había sido una
tó el joven-. Si permitió a los hum
cho ignorante -respondió el anciano-. Dicen que se trataba de una lágrima de la diosa Alwa, que lloraba p
, y se cambian las tornas; el poseedor se convierte en el poseído y la gema lo corrompe, le arrebata todo cuanto le es propio. Le hace perder la razón, le hace querer destruir a todo el qu
forma que a él? -insistió el muchacho, levantando el brazo para señalar la en
o. Un soldado sin parangón, con una habilidad marcial y militar insuperable. Y cuando sostuvo la lágrima de los dioses en la mano... Adquirió la fuerza de un tit
ejanía-. Ella no era fuerte. No era rápida, resistente, ni sabía pelear. Ella era pura... y cuando tuvo el Fragmento Ámbar, s
quí quedamos