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¿El dinero lo puede comprar todo? ¿Inclusive el amor? Edan O'Connor, un millonario, heredero de una importante empresa de inversiones, le promete a su padre casarse frente a él, en su lecho de muerte, para cumplir con su último deseo, solo hay un detalle, su padre no tolera a su novia, Vivian. Por lo que Edan decide contratar a una chica para hacerse pasar por su nueva novia y simular un matrimonio falso frente a su padre. En el hospital, Edan conoce a Alma Contreras, una joven hermosa y humilde, quien tiene a su madre hospitalizada necesitando una cirugía que ella no puede costear. Edan le propone un trato, le pagará todos los gastos médicos a su madre, si ella simula ser su novia por unos días y un matrimonio actuado. En medio del desespero y la necesidad, Alma acepta. Pero hay dos detalles, repentinamente, lo que se suponía era un matrimonio falso, se vuelve un matrimonio real y gracias a una cirugía de último momento, el padre de Edan se salva, cambiando el rumbo de su contrato por completo. ¿Qué pasará cuando en medio de la actuación, empiecen a despertar verdaderos sentimientos entre Alma y Edan? ¿Cómo se tomará Vivian, la novia real de Edan, una mujer pedante y tóxica, el que su novio se haya casado con otra mujer? ¿Será capaz el amor de vencer las barreras del dinero y las clases sociales?.
Edan O'Connor conducía a alta velocidad por la autopista en su Ferrari, iba apurado hacia su trabajo, se le había hecho tarde discutiendo con su novia, Vivian, de nuevo.
Cómo siempre, ella quería que Edan se quedara durmiendo a su lado hasta tarde, pero él debía ir a trabajar. Aunque Edan era un hombre con recursos, tenía responsabilidades, además, el dinero no se hacía solo.
Él estaba molesto con Vivian, esa mujer lo hacía perder las casillas, ella era malcriada y testaruda, pero cómo lo hacía enloquecer en la cama, por eso no era capaz de dejarla, él estaba loco por ella y aunque estaba molesto, de hecho, iba pensando qué detalle tener con ella para contentarla.
Edan observó la hora en el tablero, era muy tarde, aceleró el auto. Él debía dar el ejemplo en la empresa y ser puntual, puesto que, actualmente, se desempeñaba como el CEO de la empresa INCAPITAL, dedicada a las inversiones, la cual fue fundada por su padre. Pero debido a una enfermedad cardíaca, Erick, el padre de Edan, se había retirado para ceder el puesto a su hijo.
Esa era una empresa muy grande, con varias sedes y sus hermanos menores se hacían cargo de otras sucursales, pero la sede principal, había caído bajo la responsabilidad del hijo mayor.
Una llamada resonó, Edan se detuvo en un semáforo y observó el tablero, era su madre, él suspiró frustrado, su madre Angélica, podía llegar a ser bastante... Absorbente. Pero tenía que contestar, si no se tendría que aguantar un jarabe de lengua después.
Presionó el botón del tablero para contestar la llamada y al cambiar la luz del semáforo, arrancó.
- ¿Edan?. - Se escuchó en el altavoz.
- Buen día, madre.
- Edan, es urgente. - Su voz sonaba quebrada.
- ¿Qué sucede?. - Preguntó buscando un lugar donde detenerse, Edan tuvo un mal presentimiento.
- Es tu padre. - Soltó la mujer en un suspiro.
*
Alma Contreras estaba en medio de una clase, apenas comenzaba el día y ya estaba cansada, últimamente se esforzaba el doble en todo. Entre la universidad, el trabajo como mesera y ayudar a su madre con los quehaceres del hogar, se sentía tan agotada.
Pero no sé daría por vencida, sabía que algún día su esfuerzo valdría la pena y soñaba despierta con el día en que sería capaz de llevar a su madre junto a sus hermanitos a una nueva casa, lejos de su padre.
Era increíble como ese hombre que ella tanto había admirado y que alguna vez fue amable, pudo haber cambiado tan drásticamente luego de haber pedido su empleo. Sí, pasó mucho tiempo buscando una nueva fuente de ingresos, pero ya había parecido perder el espíritu de lucha que él mismo le había inculcado a su hija desde muy pequeña.
Ahora se dedicaba a nada más que beber y apostar. Y lo poco que sacaba de las apuestas lo usaba para comprar más bebida. No solo era eso, sino que últimamente se había puesto agresivo, parecía que el mundo en qué ahora él estaba, lo había consumido y terminado de convertir en una persona completamente diferente de quien Alma recordaba.
Pero por lo menos, estaba su madre, Luz Rivas, quien ahora se había convertido en el pilar de la familia y trabajaba duramente desempeñándose en la limpieza de hogares para mantener a su familia.
Alma estaba en medio de una clase y no se había percatado de la infinidad de llamadas perdidas que había en su teléfono celular, que estaba guardado en su bolso en modo silencioso.
Al terminar la hora de clases y revisar el aparato, una fuerte corazonada la atacó, había demasiadas llamadas de su casa y del teléfono personal de su madre, algo tuvo que haber ocurrido.
Desesperada, Alma busco un sitio aislado y llamo antes que nada a su madre, el teléfono fue contestado por una extraña voz.
- ¿Buen día?. - Se escuchó al otro lado de la línea, Alma miró la pantalla, verificando que hubiera llamado al número correcto. Sí, era el número de su madre, puso el teléfono nuevamente en su oído.
- Por favor con Luz Rivas.
- Es usted su hija, Alma, ¿No es así?.
- Sí.
- Disculpe, nos hemos estado intentando comunicar con usted, mi nombre es Abigaíl, soy la enfermera de turno del hospital central, su madre está ingresada aquí.
- ¡¿Qué?!.
- Intentamos contactar a un familiar, llamamos al número que aparece registrado como casa, pero en vista de que el marido de la señora Luz está indispuesto y sus otros hijos son menores, ella nos indicó que podríamos comunicarnos con usted.
- Sí, sí. - Alma sintió como su cuerpo comenzó a estremecerse y las lágrimas se le juntaban en los ojos. - Voy de inmediato.
*
Edan llegó al hospital central rápidamente, todos lo miraban sorprendidos, no todos los días se veía en un centro hospitalario público, a un hombre llegar en un Ferrari, usando un traje de diseñador.
Corrió hasta la recepción, preguntando por el señor Erick O'Connor, la enfermera que se sonrojó con la sola presencia del hombre, lo envió hasta el tercer piso, su padre estaba ingresado en cuidados intensivos. Edan apresuró el paso y al entrar al pasillo indicado, vio a su madre hecha un mar de lágrimas, quien lo recibió con un abrazo.
- ¡Mamá! ¿Qué fue lo que pasó?.
- Tu padre... Tu padre tuvo un ataque. - Explicó la mujer entre lágrimas.
- ¿Cómo está?. - Preguntó Edan separándola de su cuerpo, para verla a los ojos. Ella comenzó a negar al tiempo que las lágrimas salían.
- Está muy mal, los médicos dicen que lo más probable es que no supere este episodio.
- ¡¿Qué?! ¡¿Y qué hace aquí?! ¡¿Por qué no está en la clínica?!.
- Íbamos camino a la empresa, él me insistió mucho en que quería pasar a dar una vuelta y cuando le dio el ataque... Este era el centro médico más cercano.
Un médico se acercaba en ese momento, traía una carpeta en las manos, la cual revisaba con mucho interés y se detuvo frente a Angélica.
- ¿Señora O'Connor?. - El médico la llamó y ella asintió. - Logramos estabilizar a su esposo, sin embargo, eso no significa que todo vaya a estar bien, por el momento, tenemos que esperar y confiar en que el señor O'Connor resista.
- ¡¿Qué?! ¡¿Solo eso van a decir?! ¡¿Qué hay que esperar?! ¡Hagan algo!. - Interrumpió Edan, desesperado con la tranquilidad con que el doctor hablaba.
- ¿Señor...?. - El médico lo miró con cierto recelo.
- Edan O'Connor, soy hijo del paciente. - Se presentó, con cierto enojo, sin siquiera tenderle la mano.
- Entiendo su preocupación, sin embargo, ya hemos hecho todo lo que está en nuestras manos, lo demás, queda de parte de él. - Terminó el doctor. Edan se pasó la mano por el rostro, frustrado.
- ¡Tenemos que trasladarlo! Considero que aquí no están haciendo lo suficiente, necesito que preparen su traslado a la clínica inmediatamente, ¡Pagaré lo que sea necesario!. - Indicó Edan, mostrando su descontento.
- Señor O'Connor, no se trata del dinero que tenga, su padre está en un estado muy delicado para un traslado, si lo hacemos, lo estaríamos condenando. - Refuto el doctor, disgustado.
- Po... ¿Podemos verlo?. - Balbuceó Angélica, interviniendo. Ella sabía cómo era su hijo y seguramente todo terminaría en una discusión con el personal médico.
- Por el momento, estará aislado y descansando. En cuanto sea posible, los haremos pasar. - Contestó el doctor, usando un tono un poco más apacible hacia la mujer.
El médico se retiró. Edan volvió a abrazar a su madre, que comenzó a tener espasmos provocados por la crisis de llanto. La impotencia comenzaba a llenarlo, él deseaba poder hacer algo más por su padre.
Luego de una larga hora en el pasillo, Edan decidió que necesitaba estirar las piernas, dar una vuelta por el lugar o hacer algo, lo que sea. Recordó que en la recepción había varias máquinas expendedoras, así que le avisó a su madre que iría por un par de cafés.
Bajó y comenzó a servir los dos vasos, cuando por casualidad volteó hacia la recepción y vio entrar a una hermosa jovencita corriendo, ella llevaba ropa humilde y una mochila colgada en su hombro, por lo que, dedujo que seguramente se trataba de una estudiante, la joven se notaba desesperada. Ella llegó preguntando a la enfermera, quien le dio algunas indicaciones y de nuevo, salió corriendo hacia los ascensores.
«Pobre chica» pensó Edan, sabiendo que quizás esa jovencita enfrentaría el mismo trago amargo que él estaba enfrentando, posiblemente una persona importante para ella, también estaría en una camilla, luchando.
Nicole Matthews se casó profundamente enamorada de un hombre que no la quería en un matrimonio arreglado, manteniendo la esperanza de que algún día él se terminaría enamorando de ella. Sin embargo, eso nunca pasó, él solo la despreció, tratándola de gorda y manipuladora. Luego de dos años de un matrimonio seco y distante, Walter Gibson, el esposo de Nicole, le pidió el divorcio de la manera más degradante. Sintiéndose humillada, Nicole acepta el plan de su amiga, Brenda, quien le sugiere darle una lección a su futuro exesposo, usando a otro hombre para demostrarle a Walter que la mujer que despreció y trató de gorda, podía ser deseada por otro. Solo debían contratar a un gigoló. * Patrick Collins, ha sufrido una decepción amorosa tras otra, todas las mujeres que han mantenido una relación con él, solo han demostrado interés por su dinero, pues Patrick es uno de los herederos de la familia más rica y poderosa del país. Él solo desea enamorarse de verdad de una mujer que lo quiera por quien es y no por su apellido. Y una noche, en un bar, una mujer hermosa, curvilínea y desconocida se acerca a Patrick y le habla, confundiéndolo con un gigoló, esa mujer le hace una propuesta a Patrick fuera de lo común, que le parece muy interesante y no puede rechazar.
Megan Smith es una mujer que resalta a dónde quiera que va por su belleza, sin embargo, lejos de ser una bendición, esto siempre le ha traído problemas. La belleza de esta joven se convertirá en su mayor castigo cuando debido a una trampa, ella se acueste con un desconocido, un suceso que cambiará su vida drásticamente, obligándola a desaparecer, por temor a lo que pueda suceder. El atractivo heredero, Albert Collins pronto se convertirá en el hombre más rico y poderoso del país, por eso, es normal para este hombre que las mujeres lo persigan y deseen, lanzándose sobre él, sin recelos, no obstante, ninguna de ellas parece capturar su interés. Esto cambiará, cuando una joven tan hermosa que lo deja impactado, se aparece frente a él rogándole por una noche juntos, Albert no puede negarse, parece hipnotizado por los encantos de esa dulce damisela. A la mañana siguiente, luego de una noche única e inolvidable, él está seguro de que esa misteriosa chica es el amor de su vida, la mujer con la que debe casarse, sin embargo, ella ha desaparecido, por lo que él no descansara hasta tenerla de vuelta entre sus brazos.
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Mayra es una joven latina que viaja desde su pueblo hasta Estados Unidos para encontrarse con el único miembro de su familia que queda, su primo Roberto. Sin embargo, se lleva una gran sorpresa, pues su primo resulta ser el jefe de una importante mafia y él le ofrece una vida de lujo siempre que ella acepte trabajar con él en la organización. Ella se niega, no le gusta esa vida criminal y prefiere vivir sola humildemente. En su nueva vida conoce a Julieta, quien se convertirá en su mejor amiga, y gracias a un pequeño incidente en el trabajo, conoce a su esposo Liam, un hombre guapo y dedicado. Toda su vida es perfecta, hasta que se entera de la muerte de su primo Roberto, allí se comienzan a caer las máscaras y Mayra descubre que su esposo nunca la amó, que su mejor amiga Julieta era su amante y para colmo la agreden de una forma tan brutal que ella queda hospitalizada, recuperándose tanto física como psicológicamente por una larga temporada. Pero eso no se quedará así, luego de tanto sufrimiento, Mayra ha tomado una decisión, todo lo que desea en el mundo es hacer sufrir a esos miserables que le causaron tanto dolor, ella volverá para buscarlos y obtener su dulce venganza.
Durante siete años, Jillian estaba enamorada de Bryan con pasión inquebrantable, pero él permaneció distante, con sus emociones herméticamente selladas. Descorazonada, ella se marchó al extranjero tras graduarse de la universidad. Tres años después, Jillian, ahora una abogada de éxito, se sentó provocativamente en el regazo del hombre. Con una sonrisa juguetona, le espetó: "¿Qué te pasa, Bryan? ¿Eres impotente?". Bryan ya no podía contenerse. Con un rápido movimiento, la tomó en brazos y la arrojó sobre la cama. A la mañana siguiente, cuando él se despertó, Jillian esbozó una sonrisa traviesa. "Solo es una aventura, ¿de acuerdo?".
Durante tres arduos años, Emily se esforzó por ser la esposa perfecta de Braiden, pero él todavía se mantenía distante con ella. Cuando él le pidió el divorcio por otra mujer, Emily desapareció. Sin embargo, cuando reapareció más tarde, se convirtió en su última fantasía. Despidiendo a su ex con una sonrisa burlona, ella le desafió: "¿Te interesa una colaboración? ¿Quién te crees que eres?". Los hombres no le servían para nada; Emily prefería la independencia. Mientras Braiden la cortejaba sin descanso, descubrió las identidades secretas de Emily: hacker de alto nivel, chef, médica, talladora de jade, corredora clandestina... Cada descubrimiento aumentaba el desconcierto de Braiden. ¿Por qué los conocimientos de Emily parecían ilimitados? El mensaje de Emily era claro: destacaba en todos los aspectos.
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad. Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció.
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