¿Qué haces cuando el amor de tu vida lo conociste desde niña? Simplemente luchas por estar con él, sin importar que eso signifique irte a otro continente. Esta es una historia en la qué nuevamente el destino está marcado, sin importar tiempo o espacio, una historia en la que Agustín luchará por su sueño de ser el mejor futbolista de la época, y Nicole en llegar al corazón de su primer y único amor, sabiendo que el único camino para llegar a él es convertirse en la mejor ginecóloga, una mujer que desde niña mostró interés, perseverancia en alcanzar lo que quiere, carismática y con una sonrisa encantadora. Agustín, un niño soñador, alegre y muy apasionado en lo que hace, quien a pesar de su corta edad siempre supo ir si se enamoraba esto sería para siempre, pero ¿qué hará el día en que le toque escoger el camino del amor, o el camino de realizar su sueño profesional? Vivamos esta apasionada historia de sueños por realizar. Y acompañarlo a meter el Gol más importante de su vida, un gol de amor, Gol,¡directo al corazón!
Un amor que trasciende el tiempo y la distancia. Agustín y Nicole, dos almas conectadas desde la infancia, siendo su amor a primera vista a través de una pantalla. Pero la vida pone a prueba su amor. Él es un futbolista exitoso, ella una ginecóloga brillante. Sin embargo, ¿qué pesará más su amor o sus sueños? ¿Podrán superar los obstáculos y encontrar su camino hacia la felicidad? ¿O dejarán que sus sueños profesionales se interpongan en su amor? Sumérgete en esta apasionada historia de amor, celos y destino.
Acompaña a Agustín a jugar el partido más importante en su vida, recuperar el amor de Nicole en: Gol, ¡directo al corazón! (Se escribirá el nombre del personaje desde donde se detalle la historia según su punto de vista)
AGUSTÍN :
La miro, me mira, frente a frente y siento que el mundo se paraliza nueve eternos meses sin saber de ella, no sé si es nostalgia o es mi tonto orgullo que me hace sentir una ligera melancolía al saber que está bien quizá mejor que nunca, y todo esto sin mi. Está sola, lo cual me alivia. Cuando intento acercarme junto con Isabella, veo cómo un hombre se acerca con elegancia y alegría hacia Nicole. Él le sonríe, ella lo corresponde, y mi mundo se transforma. Mi ira hace acto de presencia, mis celos se arremolinan,
NICOLE:
Al escucharlo hablar solo asentí, recordando esos tiempos sencillos y felices. Había pasado mucho tiempo desde nuestro último paseo en ese parque, pero la conexión seguía intacta, a pesar de estar en un país completamente diferente, como si el tiempo no hubiera transcurrido. -creo que debo irme -dije, parándome era mejor no martirizar a mi triste corazón con días que ya no volverán. Agustín sonrió, y por un momento, todo pareció volver a ser como antes. La noche nos envolvía en su manto de estrellas, y por un instante, me olvidé de mis preocupaciones. Pero cuando me giré para irme, sentí su mano atrapándome. El ambiente cambió; se podía palpar la tensión. Regresé y continué firme. –¿Qué sucede, Agustín? Ya debo irme–, le pregunté. Pude ver la transformación de su rostro, y con amargura, me preguntó: –Estás apurada por regresar con el tipo con el que estás? ¿Tanto te gusta ya? ¿Son pareja?"–Comenzó a atacarme con preguntas. Le di una sola respuesta, con un aire de rencor: –Creo que este asunto no es de tu incumbencia.–Lo dije con una mirada desafiante, recordándole que él se había presentado con su novia. La hostilidad volvió a su rostro, y argumentó: –Dime algo, Nicole. Ese tipo ya vio el tatuaje que te hiciste en mi honor, ya sabe la marca que dejé en tu cuerpo, ya te tocó como yo lo he hecho.– No podía creer lo que estaba escuchando. Sentí hervir de ira mi sangre, y automáticamente, mi mano derecha se alzó para darle una reverenda bofetada. Lo vi sobar su mejilla, y mientras lo hacía, le dije: –¿Qué te pasa, Agustín? ¿Quién eres? No puedo reconocerte.– Él me contestó con una mezcla de emociones que, por mi enojo, no pude identificar. Me respondió tomándome de mis hombros, mirándome a los ojos. Juraría que vi un rastro de dolor cuando dijo:–Preguntas que me pasa... Pues me pasas tú. Me pasa que no puedo siquiera imaginarte en los brazos de otro. Me pasa que siento que te estoy perdiendo, y eso me está matando, Nicole. ¡Tú, me perteneces!– dijo aún más posesivo. < ¿Cómo hemos llegado a esta situación?> Me pregunté recordando nuestra linda historia de amor, que el destino selló desde el día en que nacimos a pesar de estar muy lejos el uno del otro.
Agustín Daniel bienvenido a este mundo.
Un 28 de enero llegó a este mundo un hermoso niño destinado a un futuro muy prometedor, él siempre lo supo desde antes de nacer que sería futbolista, así lo demostró no una sino millón de veces, en el embarazo su pobre madre sufrió esas consecuencias con las múltiples pataditas que a diario le daba en su vientre, y lo declaró el día en que nació y de forma accidental con su piecito derecho le dio una gran patadita al doctor que atendió el parto. Así fue creciendo, este hermoso niño de cabellos claros como el sol y ojos azules profundos como el cielo, con una hermosa sonrisa tan idéntico a su madre pero con los ojos del padre, es el último hijo de cuatro, el único varón, el anhelo de su padre para continuar su apellido y el sueño de su madre para educar un príncipe, sin contar que era el consentido de sus tres hermanas Wendy , Melany, y Ashley. Todos admirando a tan dulce bebé dijeron: -bienvenido pequeño Agustín Daniel- A la edad de 4 años, recordó que él nació para ser futbolista, al estar en un partido de fútbol de un grupo de niños dirigido por su tío Luis, quien lo llevaba a observar, pero ese día el pequeño Agustín jugó con el barro de la cancha, imitando movimientos de los niños jugadores, y sintió la adrenalina y la pasión activarse en sus venas, este era su propósito, su misión de vida, causando ternura y gracia al público se retiró para buscar a su mamá y poder decirle a todo pulmón: -Mamá llévame a un club para poder jugar, quiero jugar fútbol- poniendo sus ojitos de cachorro;con ternura su madre lo tomo en sus brazos, sonriendo y asintiendo con su cabeza le dijo : - Esta bien mi amor, pero antes tenemos que bañarte- Alegres madre e hijo se retiraron de esa cancha guardando en sus corazones el recuerdo de que ahí inició su sueño. Con el pasar de los años, Agustín se iba preparando más y más en su deporte favorito, aunque aveces tenía frustraciones, enojo cuando no lo tomaban en cuenta, desde ahí se fue formando su carácter determinante, autocrítico lo que le permitía reconocer sus errores y así enmendarlos, no dejaba que a su alrededor ocurrieran injusticias no lo permitía, era él siempre un pequeño abogado que con su educación trataba de interferir, y así conseguir justicia para el que no tenía que ser castigado, esto ocurría con frecuencia en su colegio, cuando sus amigos eran castigados por culpa de niños mal portados, y es que era tanta su inteligencia, poder de palabra que hasta a los mismos profesores los callaba con argumentos sólidos, demasiados como para un niño de su edad. No podemos pasar por alto lo muy inteligente que este niño era, no solo para argumentar; sino también exaltar sus logros académicos y la alegría que esto causaba en el corazón de sus padres. La relación que tenía con su madre era única, muy estrecha, a quien siempre contaba sus penas y alegrías. La amaba, era la reina de su corazón, siempre lo apoyo y era quien buscaba la manera de llevarlo a la mejor escuela de futbol para que pudiera vivir su pasión, no solo su madre fue su apoyo sino que su padre fue una fuente de inspiración para hacer lo correcto, un gran ejemplo de hombre, luchador y trabajador; amoroso y muy estricto con sus hijos; uno de los temores de los pequeños era perderlo ya que alguna vez tuvo un ACV (accidente cerebro vascular) el cual dando gracias al cielo , solo dejó un susto y un recordatorio de lo importante que es cuidar su salud. Gran impacto que tuvo en la vida de Agustín y lo importante que es cuidar su cuerpo, el deporte y una dieta saludable, lo sabían todos en su casa y con la unión que tenían todos cuidaban de su padre. El camino no ha sido fácil, pues como todo cuando estás tratando de alcanzar una meta, desde pequeño cuando lo rechazaron en un club deportivo infantil muy conocido de donde salían los mejores jugadores de fútbol de la selección Uruguaya, su primer NO, fue triste es verdad, pero esto no lo iba a detenerlo, ahí su madre le dijo: - si el camino se te cierra, cambia de camino pero nunca de meta, se valiente buscaremos más escuelas, ellos se pierden de tenerte, mi pequeño Agus-lo dijo dándole un enorme abrazo. Y así lo hizo, no se rindió, esto lo ayudó a ser más constante y luchar por su sueño, lo demostró cuando en un encuentro deportivo en su ciudad natal Maldonado, se enfrentó a este club y logró hacer su primer gol de cabeza, sin miedo a nada lo hizo dándole la victoria al club que sí creyó en él. Así entre derrotas, fracasos y triunfos el pequeño Agustín se iba formando como uno de los mejores delanteros diestros del fútbol infanto-juvenil. Entre las canchas conoció a Alan quien pasaría a ser su mejor amigo para toda la vida, y quien lo acompañaría en los momentos más importantes de su vida, entrenaban juntos, era el hermano varón que le hubiese gustado tener, Alan visitaba muy seguido su casa, sus padres se conocían y eran tan amigos de que no tenían problema en que el uno o el otro duerma en su casa, una gran amistad, aunque Alan no tenía el mismo sueño de las grandes ligas del fútbol, lo apoyaba y animaba su sueño de la selección uruguaya, ambos entrenaban juntos, sin embargo el crecimiento de Agustín era mucho más grande que cualquiera de los miembros de su club actual. Así se tejen los hilos del destino, que aunque se quieran desviar siempre nos llevarán al mismo camino, porque todo está destinado a ser; pero no hay que olvidar que el destino suele también ser caprichoso y poner tantos obstáculos, como ángeles que te ayudarán en el camino tan largo por recorrer.
Sofia una doctora que acaba de empezar su carrera deja su pasado atrás para poder iniciar una nueva vida, lo que no sabe es que en ese avión en el que se subirá conocerá a quien le enseñará el valor mágico que tiene su sonrisa para curar un corazón herido. Galo, un CEO de una gran compañía d telecomunicaciones con su corazón herido y de apariencia fría no sabe que en ese vuelo su vida cambiará....
Se suponía que mi matrimonio con Mathias me haría la mujer más feliz del mundo. Aunque sabía que él no me amaba, pensé que se enamoraría de mí una vez que lo colmara de amor. Ya pasaron cinco años y Mathias me trataba como a una cualquiera. Para colmo, conoció a su verdadero amor y cortó todos los lazos conmigo por culpa de ella. Él la presentó a todo el mundo; algo que nunca hizo por mí. Su infidelidad me llevó a la depresión. Me sentía totalmente destrozada. Tristemente, incluso en mi lecho de muerte, mi supuesto marido nunca apareció. Cuando volví a abrir los ojos, sabía que el destino me había dado una segunda oportunidad. Yo todavía era la esposa de Mathias y pasamos dos meses antes de que conociera a su verdadero amor. En esta vida, me negué a que él volviera a lastimarme. Consciente del gran error de mi antigua yo, le pedí el divorcio. Mathias rompió los papeles del divorcio una y otra vez y al mismo tiempo me encerró. "¡Rylie, deja de hacer estupideces! ¡Hacerte la difícil no me funciona!". Para demostrarle que hablaba muy en serio, seguí adelante y solicité a la justicia. Finalmente entró en pánico. Abandonó a la "mujer de sus sueños" y se arrastró a mi lado. "Por favor, dame una segunda oportunidad, Rylie. Te prometo amarte con todo mi corazón. Serás la única mujer en mi corazón de ahora en adelante. No me dejes, ¿de acuerdo?". Una guerra estalló en mi mente. Por un lado, no quería que me hicieran daño otra vez. Pero, por otro lado, no quería dejar ir al hombre que amaba tanto. ¡¿Qué debo hacer?!
Jenna Murphy se casó con Hansen Richards, a quien amaba desde la infancia pero quien más la odiaba. Ella creía que él finalmente la amaría. Pero antes de que su sueño se haga realidad ... un accidente automovilístico se llevó a su padre y llevó a su madre a una situación de muerte en la UCI. Su tío descarado y codicioso incluso se arriesgó y le robó todas las propiedades. Para obtener los honorarios de la cirugía de su madre, Jenna solo podía acceder a divorciarse de Hansen. Pero Hansen suplicó su regalo para la fiesta de cumpleaños de su abuela tratando de arreglar su relación. Sin embargo, Jenna encontró algunas pistas que mostraban que el accidente automovilístico que arruinó a su familia parecía tener alguna relación con Hansen ...
Lascivia. Lujuria y Deseo Las vacaciones acabaron y Rachel debe volver a su puesto como teniente en el ejército de la FEMF, encontrándose con que la central de Londres no es lo mismo. Llegó un nuevo coronel, soberbio y con una belleza que no parece humana. Hombre que no tiene ojos sino dagas de acero que la ponen entre la espada y la pared al sentirse tentada por su superior. Ella sabe que no es sano, bueno, ni correcto sencillamente porque quien incita deseos impuros es el mejor amigo de su novio; Bratt Lewis. Christopher Morgan no es solo el coronel, verdugo y dictador del ejército más importante del mundo, tambien es el terror de la mafia italiana y a futuro el arma que dañara al que predica ser su hermano. Él tenía claro a lo que iba, pero Rachel despertó tentaciones sexuales regidas por aquel pecado desconocido llamado lascivia, demostrando que en cuestiones de pasión no hay amigos, alianzas ni compromisos. Él esta casado y ella sueña con lo mismo, pero la tentación desencadenará entre ellos un torbellino de pasiones, lujurias y deseos que solo viven aquellos que se hacen llamar amantes. "Sus actitudes son las de un desalmado sin sentimientos, pero su físico... Joder, su físico me humedece las bragas." Mafias, ejércitos secretos, infieles, adicciones y engaños. ¿Complicado? No, complicado es convivir con la tentación hecha hombre.
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Hace tres años, la familia Moore se opuso a la decisión de Charles Moore de casarse con su amada mujer y seleccionó a Scarlett Evans como su novia. Pero Charles no la amaba. De hecho, la odiaba. Poco después de la boda, Scarlett recibió una oferta de la universidad de sus sueños y se lanzó sobre ella. Tres años más tarde, la amada mujer de Charles cayó terriblemente enferma. Para cumplir su último deseo, él llamó a Scarlett y le presentó un acuerdo de divorcio. La joven estaba profundamente herida por la abrupta decisión de su esposo, pero ella decidió dejarlo libre y aceptó firmar los papeles. Sin embargo, Charles pareció retrasar el proceso deliberadamente, dejando a Scarlett confundida y frustrada. Ahora, Scarlett estaba atrapada en las consecuencias de la indecisión de Charles. ¿Sería capaz de liberarse de él? ¿Charles eventualmente entraría en razón y enfrentaría sus verdaderos sentimientos?
Hace cinco años, la familia Powell quebró. Madeline Powell dio a luz a gemelos; dejó uno con el padre del niño y se llevó al otro. Años espués, Madeline regresó como líder de Internet de opinión. Sin embargo, alguien se enteró de su regreso. El hombre la pellizcó por la barbilla y se burló fríamente: "Has publicado muchos videos en Internet, ¿qué tal filmamos algo picante juntos?". Los ojos de Madeline se abrieron y su garganta se secó. Al día siguiente, vio a un niño pequeño que se parecía exactamente a su hijo en la casa del hombre. Madeline no pudo evitar besar la mejilla regordeta del pequeñito. Sorprendentemente, el niño no estaba contento. Puso una cara solemne y preguntó: "¿Qué estás haciendo?". Madeline estaba furiosa. ¿Cómo pudo ese hombre haber hecho que su hijo fuera tan desagradable como él?