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Inspirada en la novela de tv CORAZÓN SALVAJE de 1993. Desde su infancia, Rebeca ha sabido que su destino estaba unido al de su primo Iván Felipe. Su compromiso era un acuerdo inquebrantable... hasta que el corazón de Iván Felipe eligió a otra. Marta, la hermana de Rebeca, se convirtió en su esposa, ocultando un pasado prohibido con otro hombre. Rebeca, leal y sacrificada, haría todo lo que estuviera en sus manos para que su primo nunca descubriera la verdad. Pero el regreso de Pablo, el hombre que alguna vez fue amante de Marta, amenaza con derrumbarlo todo. Sin embargo, Pablo ya no es el mismo de antes. Como alfa de su manada, su prioridad es comprender el mundo humano para garantizar la supervivencia de los suyos. Lo que no esperaba era encontrarse con Rebeca... ni que su alma rugiera al reconocerla como su compañera. Durante años, los licántropos creyeron que su Diosa los había condenado, negándoles el vínculo sagrado de los compañeros. Pero ahora algo ha cambiado. De repente, muchos de su especie están encontrando a su otra mitad entre los humanos. ¿Es este un nuevo amanecer para su raza o solo el preludio de un conflicto aún mayor? Mientras los cazadores acechan y el destino de ambas especies pende de un hilo, Rebeca deberá decidir entre su deber hacia su familia o el llamado irresistible de su corazón. ¿Podrá el amor entre una humana y un licántropo desafiar las barreras de sus mundos? ¿O será solo un imposible entre la luna y el destino?
Desde que tengo memoria, me han dicho que estoy comprometida con Iván Felipe Ortega, mi primo. Siempre me he sentido una joven afortunada, pues no solo es un hombre de gran fortuna, sino también increíblemente apuesto, al menos a mis ojos.
Cada vez que me encuentro con mi madrina, su madre, me cuenta con una sonrisa que Iván me envía saludos especiales en cada carta que escribe desde Inglaterra. Mi corazón se llena de una calidez suave cada vez que escucho su nombre, como si estuviera cerca, aun estando a miles de kilómetros.
Iván Felipe partió siendo apenas un niño, enviado a estudiar al extranjero, pero pronto volverá como todo un hombre. Tomará las riendas de los negocios familiares y, finalmente, estará listo para formar nuestro hogar.
Nunca he mirado a otro hombre con interés. ¿Qué sentido tendría hacerlo, si mi destino ha estado atado a él desde siempre?
Casi todas las noches abrazo el retrato que le pedí a mi madrina, el cual guardo como un tesoro. Sonrío al imaginar nuestro hermoso futuro juntos. Pronto seré María Rebeca de Ortega, y cada día me esfuerzo por ser digna del título, del apellido, y de él. Un suspiro se escapa de mi pecho, cargado de sueños y esperanza, mientras aprieto con más fuerza la imagen contra mí, sintiendo que así, de alguna manera, lo tengo más cerca.
Aunque nunca he salido de este pequeño pueblo, mi madrina se ha asegurado de que reciba la mejor educación. Fui instruida por las religiosas del convento de San Patricio, y ahora, a mis casi dieciocho años, sé todo lo que una esposa moderna debe conocer. Estoy lista para ser la compañera que Iván Felipe merece.
De pronto, unos suaves golpes en la puerta me sobresaltan.
-Rebeca, hija -dice mi madre al otro lado-, ¿puedo pasar?
Rápidamente escondo el retrato bajo la almohada y me acerco al tocador para cepillar mi cabello.
-Adelante, mamá -digo mientras comienzo a deslizar el cepillo, contando suavemente cada pasada.
-Veo que ya casi estás lista para dormir -comenta, sentándose al borde de la cama, observándome en silencio por un instante.
-¿Qué sucede, mamá? ¿Por qué tan callada?
-Es solo que me parece increíble cómo ha pasado el tiempo -responde, con una nota de melancolía en su voz-. Me alegra que Iván Felipe esté a punto de regresar, pero no puedo evitar sentir que estoy a punto de perder a mi hija y quedarme sola.
Su tono me llena de ternura. Dejo el cepillo y me acerco a ella, sentándome a su lado.
-No digas eso, mamá. No vas a perder una hija; vas a ganar un hijo -le aseguro, intentando infundirle calma-. Además, pronto volverá mi hermana también, y no estarás sola.
Aunque trato de tranquilizarla, en el fondo entiendo su temor. Desde la muerte de papá, hemos estado las dos solas. Él falleció trágicamente en una caída de caballo, dejándonos sin fortuna y con el título de condesas como nuestro único legado, algo que heredarán mis hijos. Mamá, a pesar de todo, siempre quiso lo mejor para nosotras, por eso aceptó el generoso ofrecimiento de mi madrina para hacerse cargo de mi educación a cambio de mi compromiso con Iván Felipe. Según entiendo, a mi madrina no le importa nuestra falta de riqueza, pues ellos poseen suficiente. Lo que valoran es el linaje y el título que aportará nuestra familia al matrimonio, además de la posibilidad de que pueda darles hijos fuertes y sanos.
Con mi hermana Martha Isabel, las cosas han sido diferentes. Mamá tuvo que aceptar que la tía Ruth la llevara a la capital para educarla, y aunque la vemos en vacaciones, cada vez es más claro que el pueblo le resulta pequeño y monótono. Está acostumbrada al bullicio y al refinamiento de la vida social en la gran ciudad. Lamentablemente, aún no ha recibido propuestas de matrimonio, y sé que eso la amarga profundamente. Esa frustración la descargará con mamá, haciendole la vida más difícil, estoy segura.
-Ya lo sé, hija, pero sabes a lo que me refiero -dice mi madre, apretando suavemente mis manos y regalándome una sonrisa cálida-. Mi niña ha crecido, y ahora se va a casar. ¡Tenemos tantas cosas que organizar para la boda!
La boda. Cada mujer sueña con ese momento mágico: la iglesia decorada con delicadas cintas y flores blancas, el sonido suave de la música llenando el aire. Me imagino caminando hacia el altar, con un vestido blanco que fluye como un sueño a mi alrededor, un velo largo y majestuoso arrastrándose tras de mí, y en mis manos, un ramo de rosas blancas. Al final de ese pasillo, me espera Iván Felipe, con una sonrisa que ilumina su rostro, y su mano extendida hacia mí. Mi corazón late rápido solo de pensarlo.
Pero no quiero mostrar a mamá cuánto me emocionó la noticia que nos dio mi madrina esta tarde. Saber que Iván Felipe regresará al país este mes ha hecho que mi corazón se desborde de anticipación.
-Mamá, esperemos a que Iván Felipe regrese primero. No sabemos si quiera casarse de inmediato o si tendrá otros planes en mente -trato de calmar mis propias ansias con esas palabras, aunque la emoción me quema por dentro.
-Mi amor, estoy segura de que en cuanto te vea, querrá organizar la boda enseguida. ¡Eres tan bonita! -dice mi madre con ternura, dándome la bendición antes de salir de mi habitación.
Sin embargo, esas últimas palabras quedan resonando en mi mente. ¿Le pareceré bonita? Han pasado tantos años desde la última vez que nos vimos. Entonces, yo no era más que una niña delgada y revoltosa. ¿Qué tal si en su viaje ha conocido a mujeres más impresionantes? Mujeres elegantes, con familias poderosas e inalcanzables. ¿Y si regresa y no quiere casarse conmigo?
Sacudo esos pensamientos de mi cabeza, intentando alejar el miedo. Mi madrina siempre menciona que él me envía saludos especiales en sus cartas. Eso debe significar algo.
Me detengo frente al espejo y me observo con detenimiento. Sé que no soy la mujer más bella del mundo, pero tampoco me considero desagradable. Mi piel es clara y tersa, sin imperfecciones. Mis ojos, grandes y azules, siempre brillan con vida. Aunque mi cabello rizado es un reto constante, al final siempre logro dominarlo. Y, según mi madrina, lo más importante son mis caderas. Ella dice que, a pesar de ser delgada, tengo caderas anchas, y eso siempre ha sido un símbolo de fortaleza y feminidad.
Tomo aire, tratando de convencerme de que soy suficiente, de que Iván Felipe me verá con los mismos ojos con los que yo lo veo a él en mis sueños.
Libro de desarrollo simultáneo a Adicta a sus besos, es la historia de Sebastián, otro de los hombres de la familia Pizano, quien siempre se ha preocupado por cuidar a sus primos, aunque tenga que ensuciarse las manos para hacerlo. Un hombre que no cree que llegará a enamorarse algún día, pero... lo hace y decide que Sophia será su mujer. Ahora solo debe salvarla del fuego cruzado que tiene su familia con algunos "clientes" y convencerla de que acepte su tipo de vida.
Una mañana, Isabella despierta en la cama de un desconocido sin recordar cómo llegó allí. Alexander, un atractivo heredero de una poderosa familia, tiene un oscuro legado y una condición: casarse y tener un hijo para heredar un imperio ilícito. En un desesperado intento, Alexander elige a Isabella como su esposa sin su consentimiento. Aterrada pero fascinada, Isabella se adentra en un mundo lleno de peligros y secretos. A medida que Alexander descubre la dulzura y la fortaleza de Isabella, se desarrollan sentimientos genuinos entre ellos. Juntos, deberán enfrentar enemigos ocultos y desafíos insuperables para construir una familia por elección propia. ¿Podrán superar las adversidades y hallar el amor verdadero? 🔹 Una historia que te mantendrá en vilo, preocupándote por cada pensamiento y sentimiento de los personajes. ¡No te la pierdas! 🔹
Lorena es una mujer nacida en cuna de oro, quien debido a experiencias traumáticas vividas en su infancia y adolescencia, desarrolló un carácter muy peculiar. Ahora es una empresaria reconocida en el mundo del arte, pero está buscando de manera desesperada un cierre a todo lo que vivió en su juventud. En medio de esa búsqueda, ingresa al mundo oscuro de lo ilícito, en dónde conoce a dos hombres que volverán su mundo de cabeza y de alguna forma, harán su vida mucho más interesante. Oliver, es el hombre ideal, el chico perfecto para presentar en casa y si a eso le sumas que es muy bueno en el sexo, el hombre tiene muchos puntos ganados. Richard, es un hombre mayor, pero con la suficiente experiencia para volver loca a Lorena y hacerla dudar de sus convicciones, fuera de eso, es el rey del bajo mundo. Después que el corazón de Lorena se decide, el universo mete su mano y una serie de sucesos hace que deba separarse del hombre que eligió y deba encontrar nuevamente la forma de que todo vuelva a su cause tras la aparición oficial del causante de su trauma inicial y su lucha familiar.
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Charles tenía novias diferentes cada día del año, nunca salía con la misma chica. Su nombre había sido vinculado a innumerables mujeres. Autumn, por su parte, se vio obligada a casarse con Charles sustituyendo a su hermana, quien se había escapado. Su único deseo era divorciarse después de un año. Ninguno de los dos había esperado que se enamoraran el uno del otro. Tampoco esperaban que el mundo entero los desafiara. Una ex novia quien causa problemas cada dos por tres. Una hermana fugitiva quien regresa con la intención de recuperar a Charles. Una suegra que siempre se entromete en sus momentos íntimos. ¿Te gustaría leer más? ¡No dudes! ¡Vamos allá!
Cuando eran niños, Derek le salvó la vida a Norah. Años más tarde, Derek quedó en estado vegetativo tras un accidente automovilístico y Norah se casó con él sin pensarlo dos veces. Con sus conocimientos médicos, incluso lo curó. Durante dos años, Norah amó a su marido con todo su corazón, esperando poder devolverle su bondad. Pero cuando volvió su primer amor, él pidió el divorcio. Sin dudarlo, ella estuvo de acuerdo. Lo que pocas personas sabían es que ella, etiquetada como "abandonada", era en realidad una piloto de carreras, una famosa diseñadora, una genio hacker y una reconocida doctora. Lamentando su decisión, Derek le pidió perdón a Norah. De repente, apareció un encantador CEO, abrazó a Norah y le dijo: "¡Aléjate de mi esposa!". Sorprendida, Norah soltó: "¿Qué?".
-Nuestro amor nos llevará a terminar como Romeo y Julieta. - ¿Juntos? - ¡No! Muertos. -Tú siempre tan romántica. -Y tú, tan estúpido. -Ya hablo doña perfecta. -Aunque te cueste reconocerlo, así que no pienso seguir perdiendo mi tiempo contigo. Me retiro antes de que se me pegue lo malo, con permiso joven Sanz. -Hasta nunca B-R-U-J-A fea. Espero que choques en tu escoba voladora y te destroces el rostro para no volverte a ver la cara de mustia amargada que tienes. -Qué tus buenos deseos se te multipliquen insecto -grito la chica al salir corriendo de la casa para tratar de llegar lo más pronto a la parada y alcanzar el último autobús que la llevaría de regreso a la Universidad de Barcelona, donde estudiaba. Esto era tan solo una pequeña pelea a la que se tenía que enfrentar cada vez que se encontraban en la residencia de la familia Sanz o donde coincidieran, en donde había sido contratada como niñera del menor de los hijos de la familia. - ¿Podrás algún día dejar tranquila a "Mi Vale"? Sigue por ese camino y me voy a asegurar que papá te quite todas las tarjetas, congelé todas tus cuentas y de pasada te ponga a trabajar para que dejes de estar molestando a mi chica. - ¡Mocoso! Nadie pregunto tu opinión, ¡Cuidado y abres la boca o me desquitaré contigo! Deberías de estar de mi lado y no de un espantapájaros como ese que no es parte de tu familia y a duras penas conoces. -Mira, quien habla, el chico más estúpido que puede existir en toda la ciudad, si no fuera por tu cara bonita, nadie se fijaría en ti. Te aseguro que en esa cabeza no hay ni gota de masa encefálica de la cual puedas presumir como ella. - ¡Basta! Lárgate a tú cuarto o voy a acabar contigo en menos de un segundo. - ¡Huy! Ya se enojó el niño bonito. Te estaré vigilando, no vuelvas a molestar a Vale. Si ella se marcha por tu culpa, me aseguraré de cumplir todo lo que te he dicho y sabes que no bromeo HER-MA-NI-TO. ¿Quién se atrevía a desafiarlo de esa manera? ¡Claro!, otro Sanz, uno que por lo menos conocía el amor y respeto a las personas sin importar su clase social o personalidad. Para este chico todas las personas eran iguales, hasta que demostraran lo contrario.
Rachel pensaba que con su devoción conquistaría a Brian algún día, pero se dio cuenta de que se había equivocado cuando su verdadero amor regresó. Rachel lo había soportado todo, desde quedarse sola en el altar hasta recibir un tratamiento de urgencia sin su presencia. Todos pensaban que estaba loca por renunciar a tanto de sí misma por alguien que no correspondía a sus sentimientos. Pero cuando Brian recibió la noticia de la enfermedad terminal de Rachel y se dio cuenta de que no le quedaba mucho tiempo de vida, se derrumbó por completo. "¡No te permito que mueras!". Rachel se limitó a sonreír. Ya no necesitaba a ese hombre. "Por fin seré libre".
Dos años después de su boda, Ximena perdió el conocimiento en un charco de sangre durante un parto difícil, olvidando que su exmarido se iba a casar con otra persona ese día. "Nos vamos a divorciar, pero el bebé se queda conmigo". Estas palabras resonaron en su mente. Sabía que él no estaba allí para ayudarla, sino para quitarle a su hijo. Ximena preferiría morir antes que ver a su hijo llamar madre a otra mujer. Posteriormente perdió la vida en la mesa de operaciones con dos bebés en su vientre. Pero ese no fue el final para ella... Años más tarde volvió a encontrarse con Ramon, que ha cambiado mucho. Quería quedársela para él a pesar de que ya era madre de dos hijos. Y cuando supo que ella se iba a casar de nuevo, irrumpió como un loco. "Ramon, ya morí una vez antes, así que no me importa volver a morir. Pero esta vez, quiero que muramos juntos", gritó ella, mirándolo con angustia en sus ojos. Ximena pensó que él no la amaba y estaba feliz de estar fuera de su vida. Pero lo que ella no sabía era que la noticia de su inesperada muerte le había roto el corazón. Durante mucho tiempo lloró de dolor y agonía. Siempre deseó poder retroceder en el tiempo o ver su hermoso rostro una vez más. Todo esto fue demasiado para Ximena, cuya vida estuvo llena de idas y venidas. No sabía si debía volver al lado de su exmarido o seguir adelante con su vida. ¿Cuál elegiría ella?