/0/15588/coverbig.jpg?v=22532312abb581bb0af87ccc4a8b6038)
Damián Ferreira es un CEO brillante pero solitario que se finge inválido para investigar quién intenta traicionarlo en su empresa. Para mantener las apariencias, contrata a Valeria, una periodista encubierta que también tiene sus propios motivos para aceptar el trato. Lo que ambos no esperaban era enamorarse en medio de un torbellino de secretos.
El aroma a café recién hecho llenaba el aire en el café donde Valeria Armenta solía refugiarse cuando necesitaba pensar. Era un lugar discreto, con mesas de madera desgastada y paredes adornadas con estanterías llenas de libros viejos. La lluvia también golpeaba los ventanales, pero en este rincón del East Village, todo parecía más tranquilo. Valeria estaba absorta revisando notas en su libreta, su cabello castaño recogido en un moño desordenado y una pluma bailando entre sus dedos.
Había sido una semana particularmente frustrante. Su última investigación, una exposición sobre prácticas corruptas en una empresa farmacéutica, había sido enterrada por el editor en jefe del medio donde trabajaba. "Demasiado riesgo legal," había dicho, aunque ella sabía que el verdadero motivo era la presión de los anunciantes. La impotencia la carcomía. Sentía que su pasión por el periodismo se estrellaba contra las barreras del poder y el dinero.
Estaba tan inmersa en sus pensamientos que apenas notó al hombre que entró al café. Aunque se movía en una silla de ruedas con la destreza de quien ha aprendido a dominar cada movimiento, su porte elegante y el cabello perfectamente peinado destacaban entre los clientes habituales. Llevaba un abrigo oscuro y su presencia proyectaba autoridad, incluso en un lugar tan informal como aquel. Cuando su mirada se encontró con la de Valeria, algo en sus ojos oscuros y penetrantes hizo que ella se detuviera por un instante. Era Damián Ferreira.
-¿Valeria Armenta?-preguntó él con voz firme, acercándose a su mesa. Su silla de ruedas apenas hizo ruido mientras se desplazaba.
Valeria parpadeó, sorprendida. Había visto su rostro en revistas y artículos, pero jamás había esperado conocerlo en persona. Se incorporó ligeramente en su asiento, tratando de disimular su confusión.
-Sí, soy yo. ¿Le puedo ayudar en algo?-respondía con precaución. Su instinto de periodista se activó al instante. ¿Qué haría un magnate como Damián Ferreira en su café habitual, y por qué estaría buscándola a ella?
-Soy Damián Ferreira. Creo que nuestra conversación podría ser mutuamente beneficiosa,-dijo, dejando entrever una leve sonrisa que no llegaba a suavizar su expresión severa.
Valeria frunció el ceño. El nombre de Damián no solo era famoso en los negocios; también estaba rodeado de rumores y secretos. Era conocido por su habilidad para manipular situaciones a su favor. Algo en su interior le decía que aceptar aquella charla podía ser peligroso, pero su curiosidad innata era más fuerte.
-De acuerdo,-respondió finalmente, señalando con un gesto la silla frente a ella, aunque de inmediato corrigió, recordando la situación. -O... bueno, siéntese aquí, por favor.
Damián maniobró su silla de ruedas con fluidez para colocarse frente a ella. Durante un momento, el silencio entre ambos estuvo cargado de tensión. Fue él quien rompió el hielo.
-He seguido tu trabajo durante un tiempo,-comenzó, su tono medido pero directo. -Tienes una reputación de no rendirte, incluso cuando los poderosos intentan silenciarte.
Valeria lo miró fijamente. Sabía que aquello era un cumplido disfrazado de advertencia.
-No suelo rendirme, es cierto. ¿Eso le molesta?
Una sonrisa casi imperceptible se dibujó en el rostro de Damián.
-Al contrario. Es exactamente por eso que quiero proponerte algo.
Valeria inclinó la cabeza, intrigada. Damián Ferreira no era un hombre que desperdiciara tiempo en pequeñeces. Lo que fuera que estaba a punto de ofrecerle, sin duda sería significativo. ¿O peligroso?
-Estoy escuchando,-dijo, cruzando los brazos sobre la mesa.
-Necesito una esposa,-soltó él, tan directo que Valeria casi derrama su taza de café.
El silencio que siguió estuvo cargado de incredulidad. Valeria lo miró como si acabara de decir el comentario más absurdo del mundo.
-Disculpe, ¿qué?
Damián apoyó los codos sobre la mesa, entrelazando las manos.
-Lo que escuchaste. Necesito una esposa, pero no en el sentido tradicional. Es un acuerdo estrictamente profesional. Un contrato por un año.
Valeria lo observó fijamente, tratando de encontrar alguna pista que le indicara que estaba bromeando, pero no la encontró. Su expresión era seria, calculadora.
-Y ¿por qué yo? Hay miles de mujeres que aceptarían esa propuesta sin dudarlo.
-Porque no quiero a una mujer que busque beneficios personales o que se deje manipular por el dinero. Quiero a alguien que tenga algo que ganar por sí misma, alguien con principios. Y tú, Valeria, necesitas algo que yo puedo ofrecerte.
La mente de Valeria trabajaba a toda velocidad. La oferta era inusual, por decir lo menos, pero también tentadora en cierto modo. Había muchas cosas que ella necesitaba: recursos, acceso a información, incluso una plataforma más grande para exponer las injusticias que combatía. Pero aceptar un acuerdo con alguien como Damián Ferreira también significaba entrar en su mundo lleno de intrigas y riesgos.
-Digamos que acepto escuchar más detalles. ¿Qué hay para mí en esto?
-Libertad,-dijo Damián, inclinándose ligeramente hacia ella. -Acceso a recursos que podrían convertir tus investigaciones en armas verdaderas contra las injusticias que tanto odias. Y, además, protección. Los enemigos que tú y yo compartimos no se atreven a tocar a alguien bajo mi amparo.
-¿Y qué gana usted?
Damián sonrió, pero esta vez había algo oscuro en su expresión.
-Estabilidad. Imagen. Y tiempo. Tiempo para descubrir quién está intentando destruir mi imperio desde dentro.
Valeria lo observó, intentando leer entre líneas. Era evidente que había mucho más en juego de lo que él estaba revelando.
-Tendremos que discutir los términos con mucho cuidado,-dijo finalmente. -No soy alguien que acepte acuerdos a ciegas.
Damián asintió, como si hubiera esperado esa respuesta.
-Por supuesto. Te enviaré los detalles esta noche. Tómate tu tiempo para decidir, pero no demasiado.
Valentina llevaba una vida profesional estable como gerente de marketing en una empresa tranquila, con rutinas previsibles y cero dramas... hasta que todo cambia. El nuevo CEO de la compañía no es un desconocido: es Nicolás, su exnovio de la universidad, el hombre al que dejó años atrás para perseguir sus sueños profesionales en otro país. Ahora, Nicolás vuelve más exitoso, carismático y poderoso que nunca... pero también con una clara misión: poner a prueba a Valentina, demostrar que ya no la necesita... ¿o tal vez todo lo contrario? Entre reuniones tensas, miradas que arden y recuerdos del pasado que no terminan de morir, ambos deberán enfrentar lo que aún queda entre ellos. Porque en los negocios puede haber reglas... pero en el amor, todo se vale.
Alejandro Rodríguez es un CEO de una exitosa cadena de hoteles de lujo, conocido por su carisma y su habilidad para manipular el mercado a su favor. Sin embargo, tras el suicidio de uno de sus empleados más cercanos, comienza a recibir mensajes anónimos que lo acusan de un oscuro secreto relacionado con el pasado de la empresa. A medida que profundiza en la investigación, se da cuenta de que alguien dentro de su círculo cercano está jugando un juego peligroso, y podría costarle no solo su carrera, sino su vida.
Alma Serrano es una mujer que lo tiene todo: es la CEO de Seré, una de las casas de moda más influyentes de Latinoamérica. Visionaria, elegante y ferozmente independiente, ha construido su imperio desde cero. En el mundo de los negocios, nadie se atreve a subestimarla. En casa, comparte su vida con Tomás, su esposo, un hombre cálido, discreto y encantador que ha renunciado a su carrera para ser su apoyo incondicional, manejando el hogar con ternura y devoción. Pero lo que Alma no sabe es que Tomás es en realidad Leonel Duarte, CEO en las sombras de Theia Corp, una marca de moda emergente y agresiva que, bajo su liderazgo secreto, ha comenzado a arrebatar mercado a grandes firmas... incluida Seré. Lo que comenzó como una estrategia corporativa –acercarse a Alma para espiarla desde dentro– se complicó cuando se enamoró de verdad. Ahora, atrapado entre su amor genuino por Alma y los secretos que podrían destruirla, Tomás/Leonel se ve forzado a jugar un juego peligroso. Su doble vida se tambalea cuando Alma comienza a investigar la identidad del misterioso CEO de Theia Corp, sin saber que duerme a su lado cada noche. ¿Cuánto puede ocultarse la verdad antes de volverse insoportable? ¿Puede el amor sobrevivir a una traición construida con silencios?
Santiago Arriaga, un CEO implacable y sin debilidades, esconde un secreto que nadie sospecha: está casado. Hace cinco años, por circunstancias inesperadas, se casó con Camila, una mujer que no pertenece a su mundo de poder y riqueza. Aunque su matrimonio fue solo un acuerdo para resolver un problema legal, Camila se convirtió en su refugio, su escape del caos de su vida. Sin embargo, cuando Santiago se ve obligado a comprometerse con la heredera de otra familia para cerrar un trato millonario, Camila se harta de ser su sombra. Está lista para irse, pero Santiago se da cuenta de algo demasiado tarde: no puede dejarla ir. Ahora, deberá elegir entre proteger su imperio o luchar por la mujer que nunca quiso admitir que amaba.
Oliver Montenegro, un CEO millonario y homosexual, está en una encrucijada: su familia tradicionalista y los inversionistas de su empresa insisten en que debe casarse para mantener las apariencias. En medio de la presión, su mejor amiga, Julia, le propone una solución inesperada: casarse con él a cambio de una vida llena de lujos y la libertad de seguir con su propia vida. El plan parece perfecto hasta que la prensa, los accionistas y la familia de Oliver empiezan a sospechar. Para aparentar ser un matrimonio real, deben actuar como una pareja enamorada en público, lo que los lleva a situaciones cada vez más complicadas. Sin embargo, lo que ninguno de los dos esperaba era que fingir amor despertara sentimientos inesperados, celos y secretos que podrían cambiarlo todo.
Después de un accidente que la deja con amnesia, una mujer embarazada de quintillizos se encuentra con un CEO poderoso que asegura ser su esposo. Pero la verdad es que él solo quiere protegerla de su pasado... y ha jurado que, cuando recuerde la verdad, la hará suya de verdad
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Yelena descubrió que no era la hija biológica de sus padres. Después de darse cuenta de que intentaban venderla por conseguir una inversión, la enviaron a su lugar de nacimiento. Allí descubrió que en realidad era la heredera de una familia opulenta. Su verdadera familia la colmó de amor y adoración. Ante la envidia de su supuesta hermana, Yelena superó todas las adversidades y se vengó, al tiempo que demostraba su talento. Pronto llamó la atención del soltero más codiciado de la ciudad. Él acorraló a Yelena y la inmovilizó contra la pared. "Es hora de revelar tu verdadera identidad, querida".
Hace dos años, Ricky se vio obligado a casarse con Emma para proteger a la mujer que amaba. Desde el punto de vista de Ricky, Emma era despreciable y recurría a artimañas turbias para asegurar su matrimonio. Por eso mantenía una actitud distante y fría hacia ella, reservando su calidez para otra. Sin embargo, Emma amaba a Ricky de todo corazón durante más de diez años. Cuando ella se cansó y consideró la posibilidad de renunciar a sus esfuerzos, Ricky empezó a tener miedo de perderla. Solo cuando Emma estaba muriendo, embarazada, él se dio cuenta de que el amor de su vida siempre había sido Emma.
Rachel pensaba que con su devoción conquistaría a Brian algún día, pero se dio cuenta de que se había equivocado cuando su verdadero amor regresó. Rachel lo había soportado todo, desde quedarse sola en el altar hasta recibir un tratamiento de urgencia sin su presencia. Todos pensaban que estaba loca por renunciar a tanto de sí misma por alguien que no correspondía a sus sentimientos. Pero cuando Brian recibió la noticia de la enfermedad terminal de Rachel y se dio cuenta de que no le quedaba mucho tiempo de vida, se derrumbó por completo. "¡No te permito que mueras!". Rachel se limitó a sonreír. Ya no necesitaba a ese hombre. "Por fin seré libre".
Janet fue adoptada cuando era niña, un sueño hecho realidad para los huérfanos. Sin embargo, su vida fue cualquier cosa menos feliz. Su madre adoptiva se burló de ella y la acosó toda su vida. La mucama que la crio le dio todo el amor y el afecto de una madre. Desafortunadamente, la anciana se enfermó gravemente y Janet tuvo que casarse con un hombre que tenía mala fama en sustitución de la hija biológica de sus padres para cubrir los gastos médicos de la criada. ¿Podría ser este un cuento de Cenicienta? Pero el hombre estaba lejos de ser un príncipe, aunque tenía un rostro atractivo. Ethan era el hijo ilegítimo de una familia rica que vivía una vida lujosa y apenas llegaba a fin de mes. Él se casó para cumplir el último deseo de su madre. Sin embargo, en su noche de bodas, tuvo el presentimiento de que su esposa era diferente a lo que había escuchado sobre ella. El destino había unido a las dos personas con profundos secretos. ¿Ethan era realmente el hombre que pensábamos que era? Sorprendentemente, tenía un extraño parecido con el impenetrable hombre más rico de la ciudad. ¿Descubriría que Janet se casó con él por su hermana? ¿Sería su matrimonio una historia romántica o un completo desastre? Siga leyendo para saber cómo se desarrolla el amor entre Janet y Ethan.
Se rumoreaba que Fernanda, recién vuelta con su familia, no era más que una violenta pueblerina. Pero Fernanda se limitaba a esbozar una sonrisa despreciativa. Otro rumor sugería que Cristian, normalmente racional, había perdido el juicio, locamente enamorado de Fernanda. Esto la frustró. Podía tolerar los cotilleos sobre sí misma, ¡pero calumniar a su amado era pasarse de la raya! Poco a poco, a medida que salían a la luz las múltiples identidades de Fernanda como célebre diseñadora, experta jugadora, reconocida pintora y exitosa magnate de los negocios, todos se daban cuenta de que eran ellos quienes habían sido engañados.