Nazo es un joven con un talento para resolver enigmas y tiene cierta obsesión con cualquier cosa que le llame la atención, lamentablemente es manipulador, egoísta y le importa muy poco la forma en que hace sentir a las personas a su alrededor, se defiende bajo el argumento de que la verdad es la única forma digna de vivir. sus pensamientos encuentran un dilema al conocer a Sara con quien convivirá en un lugar que se llena de misterios que rodean a la chica y su familia, en un pueblo donde muchas conveniencias suceden y al parecer algunas personas estarían involucradas en ciertos sucesos extraños, también terminara por darse cuenta de que no solo Sara tiene sus propios secretos.
Sin importar cuanto te alejes, cuanto huyas o las maneras astutas que encuentres de zafarte, siempre volverás a toparte con algo que llamara tu atención Nazo. Esas palabras seguían en su mente aun intentando retomar el sueño que había perdido por el reciente ruido que ocasionaba su hermana en la planta baja.
- ¡Nazo levántate ¡- exclama su hermana en un tono dulce- esa voz tan afable y ese tono de ternura y entendimiento, es falsa - ¡Nazo más vale que estés despierto o te meteré una patada en tu estúpido trasero ¡- si esa sonaba más como ella
El desayuno se habría sentido bien de no ser por la reciente mirada amenazante de su hermana Jane quien le juzgaba muy duramente por sus acciones futuras, era perfecto ahora no podía ni decir uno de sus chistes matutinos sobre el crecimiento de su nuevo grano, definitivamente le patearía el trasero, Nazo intento evadir completamente la tensión del ambiente leyendo el periódico actuando como un adulto responsable, el silencio terminaría por comérselos sin embargo, incluso en la oscuridad hay esperanza y su salvación apareció con James entrando a la cocina
- Buenos días – James levanta su mirada y se sorprende – no sabía que estabas aquí Jane
- Gracias al cielo un poco más y tendría que ir por mis herramientas- responde Nazo rápidamente soltando el aburrido periódico
- ¿de qué hablas? – pregunta James observando la escena
- Se refiere al muro de Berlín que tenemos ahora entre ambos
- ¿Sigues enojada con el Jane? – pregunta James a la par que se sienta
- Espero que esta vez puedas hacer amigos – responde Jane evadiendo la pregunta de James
- ¿te preocupas por mí? Es extraño teniendo en cuenta que amenazabas con patear mi trasero hace unos minutos
- Eres un idiota- responde riendo
- Tengo que irme, llegare tarde – le dedica una mirada a James- y no queremos eso ¿verdad?
- Suerte – responde sabiendo a lo que se refería su mejor amigo
Nazo toma su mochila y saca de ella unas pastillas acto seguido toma 2 de ellas, James se acerca a él y se cruza de brazos
- ¿acabas de tomar dos? – pregunta tontamente
- Bueno es simple, más dolor más pastillas
- ¿Qué tanto te duele? – pregunta mirándolo extrañado
- Mi espalda está bien – responde cerrándole toda oportunidad
- ¿creí que ella no quería verte ni en pintura? – pregunta cambiando el tema
- Si y tú crees que mi dolor es porque no me he disculpado con ella
- El dolor psicológico puede...
- Brutal hermano – Nazo se pone su mochila al hombro interrumpiendo a James – te di unja oportunidad y respondiste exactamente de la misma forma ¿sabes en que te convierte eso?
- En un buen amigo que se preocupa
- No, en un idiota
Nazo se dirige a su universidad, la nueva lugar donde se encontraba no debería representar un cambio para él, aun cuando era tan aislado ahora se encontraban en un pueblo costero alejado, ya desde antes había estado cambiando de lugares, no reconocía ninguno como un hogar, sin amigos, sin pareja y sin ningún tipo de ataduras, James era su mejor amigo le conoció de una manera muy inusual y es el único sujeto que ha permanecido con él a pesar de sus peores actitudes, su hermana por otra parte solo era para él un recuerdo crudo de sus padres y en definitiva él tenía un gran problema con ellos aunque no significara que eso debería aplicarse a Jane, el camino no fue tan largo como para que siguiera pensando en tantas cosas, tomar el metro en esa pequeña ciudad era ágil y un proceso rápido, el lugar al que se habían decidido mudar era bastante peculiar él podría hasta pensar que de alguna manera es atraído hacia lugares extraños, llego al lugar de introducción y una chica de pelo rubio le explico con detalle y amabilidad el funcionamiento de la universidad y cada lugar que el debería conocer, los esfuerzos de Nazo fueron suficientes para pasar a la carrera en la que estaba interesado y esperaba que esta fuera una temporada tranquila y sin sorpresas.
- Bueno eso es todo lo básico, lo demás lo podrás descubrir tú mismo – responde la amable chica terminando con una sonrisa
- Gracias por el recorrido, ya me encargaré del resto – responde Nazo
- Tu carrera es psicología, ¿te gusta o solo es por el dinero?
- El morbo es más gratificante, la idea de saber algo sobre alguien más y poder utilizarlo luego es algo que me gusta
- Eso es poco ético ¿no crees?
- No, que va – responde rápidamente a la par que saca de nuevo sus pastillas y toma otras dos - ¿Dónde está la cafetería?
- Por allá - señala y se despide
Cruza el pasillo para llegar a la cafetería y rebusca en su cartera algo de dinero, en eso no debía preocuparse su padre aun siendo un idiota insistía en que Nazo era su responsabilidad, eso era mejor que decir que el dinero solo lo enviaba a Jane y ella lo repartía, se sentó a disfrutar de su primer café mientras estiraba los músculos de su espalda tratando de calmar el dolor que parecía aumentar, se disponía a probar su café cuando un sujeto de cabello rubio paso rápidamente por su lado y derramo su café, su enojo no se notó y mantuvo su calma buscando con ojos de asesino al responsable de no probar su maldito café, el culpable siguió su paso apresurado y se metió en una de los pasillos transversales, Nazo se levantó con intenciones de vengarse y trato de interceptarlo, había visto el mapa en la entrada y lo memorizo así logrando su objetivo, pero en vez de encontrar a la victima de su venganza le encontró tendido en el suelo, ya varias personas se habían acercado al lugar al parecer se había desmayado de la nada, Nazo se acercó a él y reviso sus signos, seguía con vida pero sus latidos eran difícilmente perceptibles, levanto sus parpados para revisarlos y sus reflejos eran anormales
- ¿Qué es lo que le pasa?
- Parece un coma – responde Nazo
- ¿Qué lo provoco?
- No lo sé – responde levantándose
- Hay que hacerle RCP – responde uno de las personas del lugar
- Déjame adivinar, estudias medicina
- Si claro
- Te aconsejo que vuelvas a estudiar para que sirve el RCP - responde Nazo mientras el rostro del sujeto se torna avergonzado
Al poco tiempo llegaron a la escena algunos médicos y se llevaron al chico sin dar ningún tipo de explicación a nadie, parecía que nadie conocía, Nazo continuaba meditando sobre lo que sucedió, por la forma en que el sujeto se movía apresurado cuando tumbo su café le hizo pensar que huía de algo y al encontrarse en ese estado podría confirmar su teoría, reviso con su vista la escena y noto una anomalía, el bolso del sujeto no estaba con él, antes lo tenía debido a que con él fue que provocó el accidente del café, observo con detenimiento el lugar hasta que sus ojos se centraron en un objeto bajo una de las mesas de descanso que habían en el lugar.
Sólo hace falta un segundo para que el mundo de una persona se derrumbe. Este fue el caso de Hannah. Durante cuatro años le entregó todo su amor a su marido, pero un día él le dijo fríamente: "Divorciémonos". Hasta ahora se dio cuenta de que todos sus esfuerzos de los últimos años fueron en vano. Su marido no la amó. Mientras ella procesaba la noticia, la voz indiferente continuó: "Deja de fingir que estás sorprendida. Nunca dije que te amaba. Mi corazón siempre ha pertenecido a Eliana. Sólo me casé contigo para apaciguar a mis padres". El corazón de Hannah se rompió en un millón de pedazos cuando firmó los papeles del divorcio, marcando el final de su reinado como esposa devota. La mujer fuerte que tenía dentro rápidamente se manifestó. En ese momento, juró no volver a depender de un hombre nunca más. Su aura era extraordinaria cuando se embarcó en el viaje por encontrarse a sí misma y dominar su propio destino. Cuando regresó, había madurado mucho y era completamente diferente de la esposa dócil que todos conocieron. "¿Qué estás haciendo aquí, Hannah? ¿Es tu truco para llamar mi atención?", preguntó su arrogante exmarido. Antes de que pudiera responder, un CEO autoritario apareció de la nada y la tomó en sus brazos. Él le sonrió y, en tono de amenaza, dijo: "Sólo para advertirle, señor, ella es mi amada esposa. ¡Aléjese de ella!". El exmarido no podía creer lo que oía. Él pensó que ningún hombre se casaría jamás con Hannah, pero ella le demostró que estaba equivocado. Pensó que ella nunca lograría nada. No sabía que habría aún más sorpresas por venir...
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Emily Doman decide dejar atrás su vida perfecta en Seattle al no poder conseguir el perdón de su Ex novio el abogado Daniel Mercer quien descubre su doble vida en la app ChatGirl. Cinco años después convertida en una exitosa abogada y madre del pequeño Diogo su vida es perfecta a pesar de no haber podido olvidar a aquel hombre que se adueñó de su corazón. El destino le juega una mala pasada en un caso que cambiará su vida y reencontrarse con el hombre al que le rompió el corazón que se enfrentará a ella sin ninguna piedad para vengarse. Daniel Mercer no volvió a ser el mismo desde el engaño de su ex novia Emily eligiendo tomar el mal camino, el alcohol, las noches de fiesta, interminables mujeres han pasado por su cama con el único propósito de intentar olvidar y desahogar el odio que no pudo con la culpable de su corazón roto. Daniel decide alejarse de los incesantes consejos de su amigo Derek y es contratado por una familia multimillonaria para enfrentarse a la mejor abogada de Vancouver que para su sorpresa es la misma mujer por la que ha acumulado su odio por largos cinco años obteniendo su oportunidad de vengarse. ¿Cómo terminará esta batalla?
Madisyn se quedó de piedra al descubrir que no era hija biológica de sus padres. Luego la verdadera hija de esa familia le tendió una trampa, haciendo que la echaran de casa y se convirtiera en el hazmerreír de todos. Creyendo que era hija de campesinos, Madisyn se sorprendió al descubrir que su verdadero padre era el hombre más rico de la ciudad y que sus hermanos eran figuras de renombre en sus respectivos campos. Todos la colmaron de amor, solo para enterarse de que Madisyn tenía un próspero negocio propio. "¡Deja de molestarme!", dijo su exnovio. "Mi corazón solo pertenece a Jenna". "¿Quién te crees que eres? ¿Mi mujer siente algo por ti?", reclamó un misterioso magnate.
Casarse con su mejor amigo fue un sueño hecho realidad para Kelly, pero todo tiene realmente una limitación. Pierce es el primer amor de Kelly, pero como su mejor amiga, sabía bien que siempre había otra mujer en lo profundo de su corazón. Lexi Gilbert. La mujer que Pierce nunca podría olvidar incluso si ya hubiera acordado casarse con Kelly. *** Kelly finalmente se dio cuenta de que su feliz matrimonio de los últimos tres años era solo un hermoso sueño cuando Pierce pidió el divorcio solo porque Lexi regresó. Ella sólo podría ser su mejor amiga incluso si estuviera encinta de su bebé. *** Dado que su amistad se había convertido en una jaula, Kelly decidió dejarlo en libertad, así como a la miserable misma. Pero ¿por qué entonces fue Pierce quien se negó a seguir adelante? Para empeorar las cosas, su diabólico hermanastro también intervino de manera dominante al mismo tiempo, pidiéndole que fuera suya. *** ¿Su príncipe azul contra su hermanastro diabólico? ¿Cómo podría Kelly salvar su corazón en esta batalla de amor y odio?
Belinda pensó que, tras el divorcio, separarían sus caminos para siempre: él podría vivir su vida como quiera, mientras ella podría dedicarse a disfrutar el resto de la suya. Sin embargo, el destino tenía otros planes. "Cariño mío, estaba equivocado. ¿Podrías volver conmigo?". El hombre arrogante, al que una vez ella amó profundamente, bajó humildemente la cabeza. "Te ruego". Belinda apartó con frialdad el ramo de flores que él le había regalado y respondió fríamente: "Es demasiado tarde".