/0/7156/coverbig.jpg?v=75ea4673739b567eb9bafd2583d28173)
Maria tomó el lugar de su hermana y se comprometió con Anthony, un hombre discapacitado que había perdido su condición de heredero de la familia. Al principio, lo que tenían solo era un matrimonio concertado. Sin embargo, las cosas cambiaron cuando los secretos sobre Maria fueron expuestos gradualmente. Resultó que era una hacker profesional, una compositora misteriosa y la única sucesora de un maestro internacional de escultura de jade... Cuanto mejor Anthony la conocía ella, menos él podía estar tranquilo. El cantante famoso, el actor galardonado, el heredero de una familia rica, tantos hombres excelentes perseguían a su prometida, Maria. ¡¿Qué debería hacer Anthony?!
En el área sórdida de un pequeño pueblo, un lujoso BMW estaba estacionado en la calle, y llamaba mucho la atención porque no coincidía con el entorno humilde.
Inexpresiva, una chica en un par de jeans desgastados caminaba hacia este con una maleta vieja en la mano.
El hombre de mediana edad en el asiento del conductor la miró de reojo y frunció el ceño evidentemente. Era obvio que no estaba satisfecho con la sencillez de lo que esta vestía.
"Vamos. Súbete", la instó sin más.
La chica permaneció inexpresiva, ni emocionada de poder subirse a un auto de lujo ni asustada por la actitud fría del hombre en él.
Como se le indicó, ella abrió la puerta del auto y se sentó en el asiento trasero.
De inmediato, ella notó que ya había otra chica de su edad sentada en el asiento del copiloto.
Esta iba vestida completamente diferente en comparación a ella, con ropa y accesorios preciosos que nunca antes había visto en todo el pueblo.
"Entonces esa es ella...", murmuró Maria Jenkins para sí misma.
Ella había reconocido a la chica en el asiento de copiloto; era Vivian Jenkins, la nueva actriz que recientemente había comenzado a ganar popularidad en el país.
El hombre en el asiento del conductor miró a Maria por el espejo retrovisor y le dijo: "De ahora en adelante serás mi hija. Te llevaré a Sheffield, donde vivirás tu nueva vida. Te asignaré a alguien que te enseñe cómo comportarte como le corresponde a una señorita rica, así que aprende a adaptarte a tu nueva identidad como una Jenkins lo antes posible. Por cierto, esta es Vivian, mi hija. Ya debes haberla visto en Internet".
No obstante, apenas Bill Jenkins terminó de hablar, Vivian estalló en una carcajada contenida.
Hablando en inglés, soltó: "Papá, ¿no has visto lo pobre que es? ¿Cómo podría siquiera navegar en Internet y ver mi show?".
Al principio, Bill se sorprendió de que Vivian le hablara con tal fluidez en inglés. Sin embargo, asintió con aprobación y respondió en el mismo idioma: "Veo que ya has progresado mucho en tu inglés, y está muy bien, pero eso fue un poco descortés, querida".
Con una risita, Vivian volvió a responder en inglés: "Bueno, temía que a mi nueva hermana no le gustaría lo que dije, así que elegí hablarte en este idioma".
Bill estaba impresionado con su hija, le dedicó una leve sonrisa y sacudió un poco la cabeza. "Aunque puede que ella no sea tan excelente como tú, sigue siendo una pariente lejana. De hecho, sería ideal para nosotros si ella pudiera tomar tu lugar y casarse con un Wilson".
"Papá, ¿cómo puedes decir eso delante de ella? Ahora eres tú el que está siendo descortés".
Pensando que su conversación sería incomprensible para Maria, ellos continuaron conversando en inglés sin escrúpulos.
Además, ya habían investigado el pueblo con anticipación, y sabían que solo había dos profesores de inglés en ese lugar remoto, y ni siquiera eran graduados de la universidad.
Si ya el nivel de los maestros era tan bajo, era normal que concluyeran que la educación de Maria también era mala. En fin, ellos creían que debía ser imposible para esa chica entender de qué estaban hablando.
En poco tiempo, el auto de lujo había salido del empobrecido pueblo.
Como Maria no tenía nada mejor que hacer en el camino a su nuevo hogar, sacó una vieja computadora portátil de su mochila mientras padre e hija conversaban en los asientos delanteros.
Todo ese rato, ella actuó como si en serio no entendiera su conversación y comenzó a escribir.
"¡Vaya! ¿Sabes usar una computadora portátil, Maria?", soltó Vivian con una ceja levantada al ver el dispositivo en el regazo de la chica.
Por lo que ella sabía, en ese pueblo abandonado por Dios en efecto había más de cien familias cuyo apellido era Jenkins. Si bien su padre había logrado mucho en la vida, todavía tenía lazos de sangre con esos parientes pobres y molestos que vivían allí.
Por su parte, Maria perdió a sus padres a una edad temprana, por lo que creció con la ayuda de esos parientes.
Ya era un milagro que no se hubiese muerto de hambre como huérfana y que incluso se graduara de la escuela secundaria sin ningún problema.
Debido a su situación, era impensable que pudiera tener una computadora portátil.
"¿Esto? Oh, es solo para jugar", respondió Maria en voz baja e indiferente.
Al escuchar su tono plano, un rastro de desprecio brilló ipso facto en los ojos de Vivian.
¿Qué?
Bueno, enseguida cayó en cuenta de que no debía sorprenderle algo así, pues ese tipo de entretenimiento era el de personas comunes y corrientes como Maria.
Vivian también notó que la superficie de la computadora portátil parecía tan vieja que ni siquiera podía identificar la marca.
"¿Cuánto te costó?". Ella continuó fingiendo su curiosidad solo para saber cosas de la adoptada.
"No pagué nada". Tras una breve pausa, Maria explicó: "Trabajé en una pequeña tienda de computadoras en la ciudad, y cuando el jefe no pudo pagar mi salario, comenzó a darme repuestos como pago. Eventualmente logré ensamblar esta computadora portátil yo misma".
Vaya, ese debía ser un producto de gama muy baja.
De seguro, tal y como había dicho la misma Maria, solo podría usarse nada más para jugar.
De todos modos, tampoco era que Vivian supiera mucho sobre computadoras, por lo que creyó sin problemas que aquello no era más que un pedazo de chatarra.
"Bueno, supongo que va contigo", dijo con una risa sutil.
"Tú necesitas una novia y yo un novio. ¿Por qué no nos casamos?". Abandonados ambos en el altar, Elyse decidió casarse con el desconocido discapacitado del local de al lado. Compadecida de su estado, la chica prometió mimarlo una vez casados, pero no sabía que en realidad era un poderoso magnate. Jayden pensaba que Elyse se había casado con él solo por su dinero, por eso planeaba divorciarse cuando ya no le fuera útil. Sin embargo, tras convertirse en su marido, él se enfrentó a un nuevo dilema: "Ella sigue pidiéndome el divorcio, ¡pero yo no quiero! ¿Qué debo hacer?".
Danielle reveló sus múltiples identidades secretas. "Ya soy la mujer más rica. ¿Por qué no te casas conmigo? Puedo convertirte en el hombre más respetado". Después de regresar a casa como la legítima heredera, Danielle descubrió que no era bien aceptada por sus padres, peor aún, era despreciada por su hermana y aborrecida por su hermano. Sin más opciones, Danielle tuvo que reanudar sus actividades anteriores, ganándose la vida mientras mantenía ocultas sus otras identidades. Para su sorpresa, Shawn se enteró de sus secretos y le propuso: "Cásate conmigo y haré de ti la mujer más respetada de esta ciudad".
Traicionada por su pareja y su hermanastra en la víspera de su boda, Makenna fue entregada a los despiadados príncipes licántropos como amante, pero su propio padre ignoró su difícil situación. Decidida, ella intentó escapar y buscar venganza, pero, sin darse cuenta, captó el interés de los tres príncipes licántropos, que la deseaban en exclusiva entre muchas admiradoras. Esto complicó sus planes, atrapándola y convirtiéndola en rival de la futura reina licántropa. Enredada en deseo y celos, ¿podría Makenna lograr su venganza en el intrincado baile con los tres príncipes?
Hace tres años, la familia Moore se opuso a la decisión de Charles Moore de casarse con su amada mujer y seleccionó a Scarlett Evans como su novia. Pero Charles no la amaba. De hecho, la odiaba. Poco después de la boda, Scarlett recibió una oferta de la universidad de sus sueños y se lanzó sobre ella. Tres años más tarde, la amada mujer de Charles cayó terriblemente enferma. Para cumplir su último deseo, él llamó a Scarlett y le presentó un acuerdo de divorcio. La joven estaba profundamente herida por la abrupta decisión de su esposo, pero ella decidió dejarlo libre y aceptó firmar los papeles. Sin embargo, Charles pareció retrasar el proceso deliberadamente, dejando a Scarlett confundida y frustrada. Ahora, Scarlett estaba atrapada en las consecuencias de la indecisión de Charles. ¿Sería capaz de liberarse de él? ¿Charles eventualmente entraría en razón y enfrentaría sus verdaderos sentimientos?
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un día sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavía se mostraba frío con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo quería. Estaba empeñada en ocultarle que tenían una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarían? ¿Caleb se ganaría el corazón de Debra y conocería a su adorable hija? ¡Descúbralo!
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved