esperándome Miguel Ángel, veo al pro
y furiosa a Miguel Ángel, este m
as hacer peq
joder le
o y cálmate. - Pi
. - Digo sin si
peque? - Pregunta
g. Siento tanto coraje. -
atrevió a de
Llévame a mi refug
- Expresa con una sonri
uela Gaia. El IMPERIAL CLUB a esta hora n
asando mientras avanzamos,
ro te juro que te arrepentirás,
l profesor? Princesa. - Pregunta Mig
que me es imposible
esencia desde el primer momento en que l
na fuer
que cuando no soporto a alguien e
iento privado, y voy al ascensor q
resalta en la puerta, entro me coloco mis mallas para el en
que me llena de adrenalina, sentirme en el aire, m
*
tro
s ella, y al no alcanzarla decidieron salir a organizar su fiesta le darían una sorpresa p
n el yate. - Dijo Francesca tomando su
con
onrisa la pequeña Bianca, marcó y la respuesta a
nita. Respondió al
sa que le llenó los ojos de un brillo qu
n a su alrededor, que se vio oblig
- Respondió y una sensa
aba enamorada, amaba a Miguel Ángel y
, la estamos esperando en el yate, s
o y cuando ella está ahí ya sabes cómo es,
ra allá. No le digas
Bianca, no l
o a sus amigos dónde estab
Luggina que sus amigos lleg
mar todos irán al centro ecu
salir corriendo cambiarse y
a en un mome
a su camerino y colocar
hizo cuando llegó fue correr a donde estaban ubic
paren a su caballo Pe
se alejó aún más.. No quería hablar y mucho menos escuchar
tó una de ellas ll
ando. - Expresó Francesc
sabes cómo se pone cuand
irándola alejar
nto, tomó otro camino que la alejó de
afectó tanto
ácil, que no le sería fácil lidiar con un arrogant
a apreciar gran parte de la ciudad, desm
a pero sutil la
? - Esa voz le reco
oy con mi caballo y
sin dejar
posib
ionó men
presó Luggina caminando en dirección a las barandas y mira
ubro, y también ser
tor? Se puede apreciar más sin nec
o? Preguntó aq
miedo a nada
ector que cubría su rostro, era la ven
dama y el enmascarado.
io. No me de
. - Dijo entre risas y camin
El enmascarado cambió el
algo? - Interro
lo fue u
onde con otra pregunta e
mente y cort
a. ¿Acaso no ent
ones caminó hacia
ido la miró
prichosa y muy d
del lugar, era mejor que estar ah
te, dejó a Pegazzo en manos del caballerango y f
raidores? - Preguntó con sarcas
res Luggina - Se
n, me dejaron sola con......
sus manos como rest
¿Tú piensa
ntenerme dentro de las líneas de la
dió la situac
estoy mal, hoy n
cosas y caminando
s llaves
muy sorprend
en s
ono y mirándola y m
favor? - Le preguntó
cada palabra
te vallas sola, puedo ser
quiero estar sola. - Expr
ó las llaves y decidió
uietaba ese profesor. Era algo qu
tenía el control de sus emociones y ahora no. Ahora quién controlaba sus pensami
Aaaa
luego lo apretó con tanta fuerza qu
pensamientos.? ¡Joder! Me j
idad. Llegó a casa subió a su habitación, se metió al ba
za de su habitación, miró por largo rato al cielo. Bajó la mirada y ju
arajos ha
ntó ment
mirada y dibujó un
ión, deslizó su albornoz, y quedando com
fesor por hoy. - Se
e entonces que vió una sombre ente las co