s de embarazo!", dijo el sonriente doctor
el. ¡Solo me había acostado una vez con ese ho
ué iba a
¿sería feliz y seguiría a
ente me acusaría de tratar de atraparlo con un bebé. En d
tristeza, metí el informe en m
os de la puerta, y tenía la ventana medio abierta, dejando el r
ención por su atractivo. Mujeres de t
bre no era otro que Elliott Crawford, el responsable de mi embarazo. Entonces, haci
sando con los ojos cerrados, frunció e
o firmado por el director del hospital
ntrato, pero me encontré con Elliott en el camino, y
ras, pero cada vez que hablaba, sonaba autoritario y no dejaba lugar a discusiones ni sugeren
n torpeza, simplemen
h, me había costado muchísimo lograr acostumbrarme a eso! Con el
de noche, ¿a dónde me estaba llevando? Aunque tenía curiosidad, no me atrevía a cuestionarlo, as
me puse nerviosa y no tenía idea de cómo darle la noticia. Echándo
silencio cuando mis manos y mi
él con frialdad, sintiendo q
re me había tratado así. De cualquier manera,
..". Las palabras que quería decir er
de la nada, haciendo que me
asa, Ol
r mientras trataban a todos los demás como basura, y Elliott era de ese tipo de gente. Su ternura
pisó el freno y dijo de manera reconfortante: "No llores,
y severo como si hubiera accionado u
in margen para
de la carretera, así que asentí, me tragué todas la
la mujer a la que Elliott amaba era Olivia. Yo era solo una chica que se interpuso en s
e ordenó a su nieto que se casara conmigo. Elliott no quería, pero no tuvo elección. Debido a eso, nuestro matrimonio había sido un infi
podía dejar de pensar en ella como una de esas mansiones embrujadas que aparecían en las películas de terr
da cuando escuché el vago sonido de un au
t había
la noche con s