img La perdición de Hell  /  Capítulo 2 Greenville | 66.67%
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Historia

Capítulo 2 Greenville

Palabras:2142    |    Actualizado en: 31/10/2023

alid

abandonada de la Familia Demon. -Dijo Lucas mirándome con un

emanas atrás y que el collar de atrapasueños que andaba con él todo el tiempo lo había sacado del dormitorio de la señora Demon: nos ha dicho que desde que lleva ese

ner pesadillas a anda

nco minutos de fama. Saben la leyenda de la casa de la Familia Demon

co fastidiada ocasionando que diera un pequeño brinco en la silla. -Es una estúpida leyenda

azón crees que

hasta el punto de hacer ofrendas de sangre. La entrada a la aterradora casa esta bloqueada por un enorme portón el cual tiene añadido un letrero que dice

salir con vida pero sus cuerpos sin alma son encontrados frente

rato de tu imaginación o de un sueño que confundiste con la realidad. -Lucas

ue vi. -

chico de aproximadamente quince años que me miraba con tristeza. Recuerdo que informe a todos de lo que había visto pero nadie me creyó debido qu

hicos que estaban al igual que ella enfadados con mi inclinación p

ada de mi ahora enfad

do para iniciar una relación pero me aseguro que cuando lo este me lo propondrá de la manera que me lo merezco. Llevábamos cinco meses teniendo es

ho tiempo -Solamente asentí. -Así que por más cruel que suene iré con ellos con o sin ti, aunque sería mejor que nos acompañaras ¿Qué tienes qué esta noche de Halloween? Apa

hacia mí para darm

ré con u

la cual había aceptado ir era porque probablemente Lucas me pediría que fuera su novia en ese lugar debido que ¿Qué otra cosa importante tend

o con el dinero que había pedido para hacer la guía turística. Tomás lo señalaba en forma de amena

chicos me miraban

azos mientras me miraba con completa seriedad. -Porque si es así

re

e formará parte del grupo que iría a allanar la casa de la Familia

do en todo el terri

nuestras manos. Sandrack se acercó al portón para con una herramienta que seguro pertenecía al ta

ueron las palabras de Sadrack mie

as imb

s venían detrás de nosotros. Tomás traía en sus manos una bolsa negra donde echaría algunos objetos de la casa que se

ción que sentía como si alguien m

guntó Tamara en un susurro mientras abrazaba a Dylan.

Sólo cá

n otra herramienta que era más pequeña que

corriente con varias fotografías en cuadros colgadas en la pared. Un aire helado recorrió por mi cuerpo al percatarme que el chico que se encontraba en las fotos era el

surro mientras le daba pequeños jalones a la camisa de

contraban en el mueble que estaba frente a nosotros. Sentí a alguien quedar de pie d

casa. Subimos con rapidez para encontrarnos a un venado muerto en estado de pudrición, e

habitación debido que la chica había que

ntó Lucas mirando a Tomás con un poco de d

ra parece que murió hace dos meses. -Dijo Tomás cubriendo su nariz con la manga de su camisa para acercarse a observar

ón del chico debido que el armario el cual estaba abierto tenía ropa m

r una chequera de cuero y echarla a

-Dije refiriéndome al act

echaba a la bolsa unas zapatillas color negras. -Solo disfruta la guía t

e acerque a ella para observar detenidamente mientras pensaba si era adecuado abrirla o no: mi curiosidad me terminó ganando y la terminé abriendo. Solo se trataba de un simple baño, me ade

taba la tina me encontré con una escena que no olvidaré ni pagando al mejor psicólogo del mundo: había un cuerpo humano en estado putrefacto den

la casa, en segundos sentí al grupo de allanador

nemos q

s terminará salpicando. Cuando todos llevamos nuestras linternas hacia la tina para ver qué era lo que había caído del te

ron a salir por la puerta principal pero cuando era mi turno para salir esta se cerró dejando ade

erar. Lucas se había ido sin importarle mi vida lo cual ha

esta se derrumbara pero después de más de cinco intentó supe que era imposible. H

ada paso que el desconocido daba. Sadrack siguió dando golpes a la puerta con la esperanza que está abriera,

e me pudieran de punta. Sin pensarlo dos veces corrí a auxiliarlo debido qu

ban de niños debido que su postura era extraña. La linterna en mi mano se volvió a encender después de que había dejado de funcionar hace quince minutos atrás, al llevar

iente para que cayer

, dulce

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