mi
a en mi casa, regresé lo más rápido posible, encontrándome así una esposa borracha. Verla en ese estado no me agradó para nada. Antonella no es mujer de emborracharse y tampoco de dar espectáculos, pero últimamente ha tenido comportamientos infantil
arlo y que luego todo vuelva a ser como siempre. Sé que debo mejorar mis actitudes y ser ese hombre romántico que Nella espera de mí. El a
cuerpo y rigidez para que l
ar, ella se remueve en la cama hasta abrir su
ntrelazo mis dedos-, ¿qué p
a la m
Da-Damián,
pintiéndos
¿De verdad lo sientes, Antonella
lo siento
parece que
la fijo, y
o y luego de alistarme nos s
esperaré aqu
continúo en el mismo lug
con los problemas entre nosotros,
estremece ante mi mirada imponente y desafiante. Tengo tanto deseo de ella, por tenerla entre mis brazos y saborear su delgado cuerpo con mi lengua. Hace rato que quiero tomarla como mía y poder sentir el calor de
ir.-Fija su vi
a, aquí t
rte y no lucir como un maldito pervertido, pero ella no ayuda mucho con esos shorts tan cortos que tanto odio y
mos. -Toma asie
ar mi deseo por ella, pue
a fiesta? ¿Qué prete
ba que re
nde, en serio
e, o mejor dicho, exige u
. -Sostien
e si, A
ie
regresar a casa antes
o es s
que yo regresara. No estoy comprendiendo nada.-Cruza
anquilo, ya
spondido a mi
a a
dmitir, me negaba a que eso fuera posible, pero en cuanto te fuiste me molesté porque sé tú historial de mujeres y lo que haces en esos viajes de negocios. Y sí, sentí celos de que estuvieras
uto que mi hermosa Antonella heredó de su madre. Ella eleva un poco su vista para dar c
más fácil decirme anoche, cu
lo pensé, pe
írmelo por tu m
señ
quiero aceptar el hecho
-La pego
rtunidad no
é -re
por ser tan chica. Eso sí me hubiera traído graves consecuencias. Espe
ar ese momento, que fue ju
to lo de la empresa,
. Fue ahí cuando vi mi oportunidad. Esperé un
etea mu
ro fuerte la c
stra situación, Damián! ¡Mis hermanos eran tus amigos y lo que más es
a mi lado pudo más. No pensé con
silencio
ado conmigo -co
toy dispuesto a aprender tus estúpidas clases de amor para conquistarte. Quiero hacer bien mi parte, que esto funcione y que ya no tengamos más pr
bserva c
Tú aprendes mis clases y yo...
, amigo. No vayamos a arruinarlo. Mira
go para luego besa
asta su trasero y la otra manola ubico detrás de su cabeza, donde enredado mis dedos con su cabello aún mojado. Nos besamos con desesperación. La alzo y
astimaré
, Damián, ni creas que
ro de
uy cuidadoso
nie
ella jamás ha sentido una erección-.Ese anima
vez más
mí. -Beso
pero no en tu c
apoderarme de sus labios. Rasgo s
¡Era mi camisa
nco el
o toda la fábrica que produzca la ho
Es la primera vez que logro saborearla como
¡
dientes en
me con algo
de su piel libre. Me detengo en su ombligo y adentro mi l
n -mur
po. Me deleito con cada uno de ellos. Quiero devorarlos, morderlos duro y dejarlos enrojecidos. Me separo de Antonella para quitarle su
lpeo la cama-. ¿Ti
ue yo
a con gran incomodid
ha venido a int
ión-. No querrás asustar a la persona
ella considera
le así a mi te
ca ropa que ponerse y
erta, escucho con clar
ada b
os momentos! ¿Cuándo no es ella inoportuna? Esa herm
la Antonella con
villosa persona que se gana el corazón de quien sea, incluso hasta del más complicado. Desde
e? No vas a pasar todo el día
, pero es que quise darles la sorpresa. Por
ba a pregun
i erección. No quiero tener que es
de la habitación-. ¿Por qué no me avisaste? Hubi
a de mi
que mi madre. El problema es que
sorprenderlos. -Deja
-opina Antonella-.
s cómo es ella. ¿Cómo los trata la vida de casados? -Bajamos todos hasta la sala
tono sa
a por mí-. Justo ahorita estábamos plan
o que pase por su mente. Si
así
de irán? -Mi he
odrá por cosas de trabajo, ya sabes cómo es, así
creer que
ir sola? Eso sí
ivo el que yo pueda dejar que ella vi
amigas, ¿verd
aje estaba planeado desde hace rato
te estás a
ir? -le
astos -la motivo para que asista. Me sentiré
s conv
e iba a gus
bemos celebrar con un buen almuerzo y un buen vino t
bien. -Respon
o quiero tener que pelear con ning
na la
ntrolas mi vest
ner que escuchar a ese montón
ce con una pantalón blanco, una camisa rojo pasión y unos tacones. De
e contarte, cariño - le
s la extrañó a
traición, señ