osos, procesaba la verdad que acababa de revelar. Su mirada buscaba respuest
res...? -susurró, con una mez
erza, esperando su reacción, esperando el desen
ue se ensanchaba con cada segundo que pasaba. Y en ese instante, comprendí el pe
lado mi secreto a Brianna. Mi mente luchaba por discernir entre la realidad y la ficci
io, una tregua momentánea en mi conflicto interno. Brianna dormía apaciblemen
oz matutina resonando con preocupación mientra
se momento, decidí guardar mi verdad por un poco más de tiempo, pr
ia
punto blanco; pasos torpes. Penetró en un portal limpio y elegante y subió despacito las escalinatas de m
saba, dando saltos, hasta su amado esposo; miró en torno con compl
se quedó observando la computadora, sin prestarle un ápice de atención. Ella, levant
leró, pudo contemplar su sombra inquieta por el rabillo del ojo. Po
scucharla; la misma sonrió. En forma precipitada, se
procurando no darle
te amo -dijo de la
tá b
preguntó de repente -
ue hablemo
de Brianna.
rte -comentó con una sonrisa rad
escúcham
po hacia atrás, sin entend
ues vale,
quiero es
ntó pensando hab
me escuchas y además
na salieron de sus órbitas. No podía lleg
eso?, no puedo ll
la vista -Eres... de las person
ntiendo a qué
como tú. Ya pasaron tres años de nuestro matrimonio, ahora te quiero fuera de mi vida. Así que te voy a pedir el favor, en cuanto salgas de
Seguro es u
saliva en seco, bajando la vista y sintiéndose en
tiendo qué me está
contigo!, quiero separarme,
seguramente que es una broma. Estamos
Siempre fué una mentira, y la verdad es que quiero volver
la verdadera razón por la que me estás dejando -dijo
guntando por qué te dejé..?, puedo enumerar las razones, pero por ahora no. M
d me estás diciendo que te est
iero hacer una vez salga de esta pue
ente se puso de pie. Se dio la vuelta,
me? -repitió él, su
, y él simplemente la dejó marchar dando una r
te con prisa, sin poder llegar a comprender
Deja caer su cuerpo en la puerta, el suelo se mueve b